Vernon… Mire a Vanessa y no podía creer la forma en que se comportaba, sé que estoy pidiéndole mucho, pero, ya le había prometido a Margareth que se podía quedar. Mas cuando uso esos malditos videos para amenazarme y a mi hija, quien me sorprende este emocionada de tenerla aquí. — ¿Y? ¿Dejaras que esa mujer se quede? — suspire impotente, no quería tener problemas con ninguna, no por que me importara Margareth, debía evitar a toda costa que expusiera esos malditos videos. — Nena, se que no te cae bien. De hecho, a mí tampoco, pero, mi hija quiere… — ¡¿Tu hija o tu?! Sabes que, estoy harta. Dices que la odias, pero la dejas verse con Helena, dices que la aborreces y la dejas quedarte bajo el mismo techo que nosotros… entiendes que suena patético — mire como sus ojos se llenaban de emociones, entre odio y tristeza. ¿Qué debería hacer? ¿Arriesgarme? No, eso no. No solo perdería mi reputación, la perdería a ella. Solo esperaba que me diera
Leer más