Cenizas de un amor perdido
Después de ocho años de relación, Lila Viveiros ha sido demasiado mimada por Joseph Leclerc. Ella dijo una vez que le gustaba 《Up: Una aventura de altura》, y el señor Leclerc, que tenía en un puesto muy alto, se dedicó a tallar madera y recreó la casita del dibujo animado con una precisión perfecta. Una noche, ella dijo en voz baja que quería comer tacos, y Joseph condujo a toda velocidad durante kilómetros para comprarle unos. Estuvieron juntos ocho años, pero él nunca la tocó. Eso era lo que lo hacía especial, ese cariño desinteresado, la prueba más pura de amor verdadero. Hasta que la secretaria personal de Joseph, muy embarazada, se presentó en su puerta, y fue entonces cuando Lila se dio cuenta de que había sido una boba caída del zarzo esos ocho años enteros. Con el corazón roto, Lila marcó el teléfono y dijo:
—Tía, acepto casarme con el Julien Santoro dentro de siete días.
El día de la boda, Joseph, lleno de expectativas, entró al salón con el anillo de bodas en la mano.
Lila caminaba tomada del brazo de un muchachón alto y bien simpático, quien tenía una sonrisa de oreja a oreja.
—Bienvenido, señor Leclerc, a mi boda.
El siempre calmado y controlado señor Leclerc, por fin, se volvió super loco.