eligeme a mi

Camila Henderson tiene problemas con su padrastro y se refugia en casa de sus padrinos, esta perdidamente enamorada del hijo de ellos Sam Walker, la diferencia de edades hace que sus caminos tomen rumbos diferentes. Después de varios años por un accidente de Sam vuelven a reencontrarse, y terminan unidos de una manera muy peculiar, pero Sam tiene un pasado doloroso que no le permite ser feliz, Camila tendrá que decidir entre el amor de su vida o cumplir su sueño mas grande.

Si había algo que Kate, una vampira de más de 200 años, tenía como regla de vida, era no marcar a ningún humano que se llevara a la cama, porque esto lo convertiría en su esclavo de sangre. Pero despertar en un hotel, sin recuerdos de lo pasado en la noche, mucho menos del rostro de a quien marcó y sabiendo que había inflingido su propia regla, estaba en serios problemas. Primero porque ahora tenía los minutos contados sin consumir la sangre de su nuevo esclavo. Y segundo... porque descrubrir que a quien mordió es su jefe, un bloque de hielo que solo sabe hacer dinero y mirar a los demás por el hombro, la ponía en peor aprieto. Pero primero muerta que rogarle a un humano... o eso ella pensaba. Novela en colaboración con Valkyria Wolf

Acuerdo con mi jefe árabe Lemi Murabak recibe una noticia que sacude sus convicciones: su padre, el actual gobernante de Karilink, está gravemente enfermo. Para heredar el trono, necesita convertirse en el príncipe árabe que el país tanto necesita, pero esto implica un requisito que Lemi nunca se ha planteado: casarse y formar una familia. Totalmente reacio a cualquier compromiso romántico, Lemi se enfrenta a un dilema cuando conoce a su misteriosa secretaria, Alisson Smith. Enigmática y oculta oscuros secretos de su pasado, Alisson debe permanecer encubierta para garantizar su propia seguridad. Pero cuando resurge una amenaza de su pasado, se encuentra en peligro e indefensa. Lemi toma una decisión: propone a Alisson un matrimonio de conveniencia, ofreciéndole la protección de un hombre poderoso. Lo que comienza como una alianza calculada y pragmática pronto se convierte en una intrincada red de deseo y pasión, desafiando sus propias convicciones. Y en medio de todo esto, descubre uno de los secretos de Alisson, lo que hace que se involucre aún más con ella.

Desde que tiene este trabajo, Alison Fox ha fantaseado con ser la chica que el magnate de la empresa abraza cuando sale del ascensor, y a la que le llama su prometida. Locura es la palabra perfecta para describir al círculo de compañeras con la que se codea, jóvenes como ella, otras madres solteras, y algunas ya jubiladas que no desean abandonar sus empleos de ninguna manera. Una noche de copas y celebración, todas se adentran a un juego que cumple los deseos por un tiempo indeterminado. Lo imposible, se convierte en posible, y después de las copas, el juego a medias, y de pedir su deseo en voz alta a la ruleta, Alison se despierta en la mañana, mirando en el espejo, a una mujer que definitivamente conoce a la perfección… Ahora, ella se encuentra atrapada en el cuerpo de la prometida del magnate…

Aiden creyó haber encontrado el amor verdadero con Liam, pero su mundo se derrumbó cuando descubrió que su relación era solo una cruel apuesta. Devastada y humillada, encontró consuelo en Edward, el mejor amigo de Liam, quien siempre la había amado en silencio. Cuando Aiden se entera de que está embarazada, Edward le ofrece matrimonio y la promesa de un futuro seguro para ella y su hijo. Juntos, dejan atrás el doloroso pasado y se mudan a la ciudad, donde comienzan una nueva vida llena de esperanza. Sin embargo, la felicidad es efímera. Años después, Edward fallece, dejando a Aiden sola y enfrentando la vida como madre soltera. Las dificultades se multiplican cuando pierde su empleo y se ve obligada a mudarse a un pequeño apartamento. Entre las pertenencias de Edward, descubre un título de propiedad de una finca en su antiguo pueblo. Decidida a asegurar un futuro para su hijo, Aiden regresa al lugar que juró nunca volver a pisar. Lo que encuentra es una finca en ruinas y a un Liam destrozado, convertido en una sombra de lo que alguna vez fue. La finca, símbolo del caos en la vida de él, se convierte en el campo de batalla donde ambos lucharán por lo que creen justo. Aiden está decidida a proteger el legado de Edward y brindar una vida digna a su hijo, mientras que Liam, atrapado por sus errores del pasado, se da cuenta de que la mujer que una vez despreció es su única esperanza de redención. Entre la tensión y los resentimientos, surge una pregunta ineludible: ¿Podrá Liam redimirse y recuperar el corazón de Aiden, o las heridas del pasado son demasiado profundas para sanar? © 2024/27/06 Angellyna Merida. Todos los derechos reservados. Código de Registro: 24062XXXXX525

Alexa después de ser una rica heredera pasa a la ruina debido a una mala inversión, luego de muchos esfuerzos logra coronar su carrera y el día que esta celebrando tal logro se encuentra con Jesse Lennox, su amor de la infancia, el pequeño que ahora es un hombre y que le obsequió el collar junto con la promesa que se casarían cuando fueran adultos. A pesar que ella pudo reconocerlo solo con verlo, no fue igual con él, la hermosa mujer que se le presentaba en estos momentos era completamente diferente a la que conoció un día, ya Alexa no se trataba de una pequeña con sobrepeso. Pasaron una noche juntos y fue ahí donde ella se dió cuenta de que no solo no la reconocía sino también que era una trabajadora sexual, con el corazón roto y miles de malentendidos al final se da cuenta que se encuentra esperando un hijo de su enemigo

El día que Katerina Johnson le diría a su esposo Shaun Ross que serían padres ese día ella conoció al monstruo al que fue vendida por su abuela, pero cuando esa puerta se cerró ante ella se abrió la más hermosa de las ventanas, pero ella debió superar muchos obstáculos antes de siquiera tener su final de cuento de hadas con Elías Walker, pues los padres del joven, una mujer con la que arreglaron su matrimonio y los padres de esa mujer, le harían ver a Katerina harían su vida imposible a ella y a su pequeño hijo, pero también hay alguien, alguien a quien Katerina tiene que superar, el "otro" yo de su exesposo Elías...

Alan Stane, Ceo Industrias Tecnológicas Stane, no cree en el amor a pesar que es un hombre muy apuesto, es frío y no tiene una vida social muy activa. Priscila Méndez, mujer latina emigrante muy enamorada y decidida, hasta que sufre un engaño que la hace dudar del amor, hasta que coincide con él, ¿será que juntos descubren el amor verdadero?

A veces, el amor surge donde menos lo esperamos. Lina siempre se ha sentido invisible. Alta, con sobrepeso y una sonrisa tímida, ha sido el blanco de las burlas durante años. Pero cuando el chico más guapo y popular del instituto, Derian, comienza a mostrarle una atención inesperada, Lina no puede evitar dudar de sus intenciones. Después de todo, él siempre fue su enemigo, alguien que la ridiculizaba sin piedad. Pero el destino tiene otros planes. Tras un giro inesperado, los dos se ven obligados a pasar más tiempo juntos, y lo que comienza como una amistad, termina en una relación marcada.

¿Qué harías si al despertar te encuentras a la par de un desconocido y tu cabeza parece estar a punto de explotar? Anastasia Strousman no podía creer que se encontraba en la misma cama que aquel hombre, a toda costa intentó que una explicación coherente viniera a su cabeza y solo consiguió sentirse perturbada por mirarse desnuda. Al final, huyó de la escena y, con el tiempo, dejó atrás lo ocurrido. Pero la vida de Anastasia dio un giro cuando fue despedida de su empleo y se vio en la obligación de encontrar trabajo en otro lugar. Terminó siendo mucama en uno de los hoteles del millonario Zared Jones. Recordaba que Zared era el hombre con quien había estado, pero él parecía haberla olvidado por completo. Para empeorar las cosas, Anastasia descubrió que estaba embarazada y, a pesar de intentar mantenerlo en secreto, fracasó estrepitosamente. Ahora, debía enfrentarse no solo a un futuro desconocido, sino también a ese millonario, el padre de su bebé. No sabía cuando tendría el valor de decirle: —¡Mi hijo es suyo, Jefe!