Cuando detuvo el coche ante su casa, los cinco tipos que la custodiaban se pusieron más tiesos que estacas.
Entre ellos estaba Dannyel, quien llevaba toda la semana pensando en cómo confesarle a Sasha que él había tenido algo de culpa en el tema del secuestro de Dylan.
No directamente pero sí teniendo contacto con el capullo de Luka.
-Ya estoy yo aquí así que ya podéis iros- observó Sasha caminando hacia la puerta.
Mientras los demás se iban yendo a los coches, Dannyel se aproximó a él.
-¿No te vas?- preguntó Sasha metiendo la llave en la cerradura.
El rubio se frotó las manos.
-Yo…he-he de contarte algo-
El moreno se giró hacia él.
-Dime- instó a hablar.
Dannyel se mordió el labio inferior.
-Es…es con respe
Semanas después.Ha pasado algo más de un mes desde que Dylan llegara a Moscú.Algo más que un mes en el cual conoció a Sasha y empezó una relación con él.Algo más que un mes donde fue capturado por una organización de mafiosos…Enterándose que el hombre del cual estaba enamorado era el mismísimo líder de todas ellas.Y más adelante saber por él que fue su abuelo quien lo designó como tal.Sí.Dylan se enteró que él también descendía de la hija del respetado líder de la BRATVA…Y ahora era el futuro esposo del actual jefe.La primera reacción de Dylan fue desmayarse.Pero después Sasha se lo explicó con todo lujo de detalles.El joven se pasó casi una semana y media sin querer hablar con él o verle por lo que agarró lo justo y se fue a casa de Piter y Lyanna.Durante esa semana y media, Sasha no hacía más que plantarse ante la puerta de la casa d
El enlace no se llevó a cabo en la ciudad.Sasha habló con uno de sus “socios” del cual conocía que poseía una gran finca situada en el sur de Italia por lo que le “pidió” que se la prestara para celebrar su boda lejos del frío de Rusia y en la más absoluta intimidad, solo familiares.O’Brian no tardó en tomar el primer vuelo con destino a Moscú cuando su propio hijo le llamó para confirmarle que se casaba…Y lo recibió con un puñetazo en toda la mandíbula.John no entendió su reacción hasta que Sasha, a solas, se lo contó.O’Brian se disculpó con su hijo una vez tras otra.Y le explicó que si lo habían mantenido apartado de ese mundo fue por decisión unánime tomada entre su madre, él y su abuelo.Anton no quería que nadie de los que conformaban la BRATVA supiera de la existencia de su único nieto por miedo a que le sucediera algo.Klaudia eligió protegerlo ocultando la realidad.Y John
Tres años después…-¿Kak ty dumayesh’, ya ne videl, kak ty na nego smotrel, ublyudok?-El moreno sostenía por el mentón a un acojonado hombre de mediana edad y que se lo había hecho en los pantalones.Con él como de costumbre, Piter y Grisha vigilaban la puerta de la sala cosa que no parecido dárseles muy bien pues en segundos ésta fue abierta entrando por ella tres pequeños de cabello claro y ojos jade.-¡Ote, ote, ote!-Sasha se guardó a toda prisa el puñal en el bolsillo trasero del pantalón al mismo tiempo que soltó la barbilla del tipo aquel para con el pie propinar un empujón a la silla donde lo tenía atado.El hombre se quedó a cuadros al ver a esos tres niños agarrándose al pantalón del azabache y dando saltitos.Sasha miró confundido a Piter y Grisha quienes negaron con la cabeza al tiempo que se enco
-Y ¿Por qué tengo que ir yo también?-Dylan miró seriamente al moreno quien sostenía en brazos a uno de los gemelos.-Porque sí- declaró el castaño con el otro gemelo en cabestrillo.-No es que no quiera ir pero me he fijado que esa directora no deja de mirarme--Ya le di un “apercibimiento”- repuso Dylan caminando con el niño rumbo a la puerta de casa.-Jumm, me gustaría saber qué clase de apercibimiento le diste- dijo Sasha yendo detrás de él.Dylan se giró a su esposo.-Ya no creo que pueda hacerse la manicura nunca más- fue su respuesta.-¿Le has cortado los dedos?- se asombró Sasha caminando hacia el coche.Dylan abrochó el cinturón de la sillita donde sentó al niño y le miró con ojillos perversos.-Los diez- afirmó.-¡Cómo! Tú…¿Has podido hacer eso?- se rió Sasha haciendo lo mismo con el otro gemelo.-No soy capaz de sacar los ojos pero no me supone problema algu
“-¿Y por qué Rusia?-“Dylan terminaba de echar lo último en su maleta mientras sostenía el móvil en su oreja.-No sé, me llama la atención- respondió.“-No sé si sea buena idea-“ la voz de su interlocutor sonaba con preocupación.-No pasará nada papá- calmó el joven.“-¿Estás seguro?-“-Claro- asintió él y echó su cajita de pastillas de hormonas junto con otra de preservativos.“-Y ¿Cuánto tiempo estarás?-“-Umm, no sé, saqué billete de ida pero no de vuelta- dijo cerrando la maleta y depositandola en el suelo.“-Hijo no me gusta ese país-“ siguió insistiendo su padre “-Y menos para que vayas de viaje allí-“Dylan sonrió para sí.Bien sabía porque lo decía.Era conocido por todo el mundo que Rusia no era fiel amiga de la gente “diferente”…Y él lo era.Bueno, en realidad no es que fuera diferente sino que ahora poseía el cuerpo que siempre quiso salvo por cierta parte que decidi
Llegó al aeropuerto de Moscú en torno a las dos del mediodía.Al mismo tiempo que su avión tomaba tierra, un segundo también lo hacía procedente de Francia.En éste viajaba él.Sasha.Uno de los más peligrosos y poderosos mafiosos dentro de la conocida Bratva.Él solo supo salir adelante con únicamente ocho años, al quedar huérfano y escaparse de uno tras otro orfanato de la ciudad.Con diez cometió su primer crimen de hurto.Con doce ya sabía usar un arma.Con quince se ganó el respeto de los ladrones y delincuentes mayores de la zona.Con dieciocho se tatuó un enorme tribal en honor a sus padres, ambos inmigrantes de los países nórdicos pero por parte de su padre con raíces rusas, de ahí que en vez de rubio, Sasha tuviera un negro cabello que brillaba cuando la luz le daba.De su madre heredó el color de sus ojos, de un intimidante verde con reflejos grises.Con actitud pa
-Hoy no tienes nada importante que hacer, acabo de hablar con Dannyel y dice que todo está bajo con…¿Uhm?-Piter dejó de hablar al darse cuenta que el moreno no le estaba prestando atención sino más bien lo hacía al joven americano con el cual se había chocado.Éste, ajeno a como le observaba el azabache, miraba lo que fuera en su móvil.-¿Sasha?- llamó Piter.Sasha se dignó a mirarle.-Da- asintió.-No me oías- dijo Piter con una sonrisa de oreja a oreja.-Sí que lo hacía- le devolvió la sonrisa Sasha aunque la suya un poco menos marcada.Hablaban en su idioma haciendo que Dylan se les quedara mirando atónito.-A ver, qué te estaba diciendo- quiso saber Piter.-Que no hay nada importante que hacer, Dannyel lo tiene todo bajo control- repitió sus mismas palabras el moreno.-Mmm, sí, me estabas oyendo- escupió vencido Piter.Sasha regresó la mirada al joven, quien aún b
Tal como mandó Sasha, él y Dylan fueron dejados ante la entrada del hotel.Mientras el moreno daba ciertas pautas a Piter, el joven se fijó en un coche también oscuro estacionado a unos cuantos metros de ellos.No le gustó ni un pelo pero lo pasó por alto.Según le había contado su padre, en Rusia todos parecían sospechosos de asesinato.Girando la mirada hacia el pelinegro dio la razón a su padre.Ese tal Sasha no solo tenía aspecto de sospechoso sino que daba la impresión de esconder un horrible secreto.Le vio despedirse del otro hombre para en segundos acercarse a él.-Dejemos tu equipaje en la habitación y así irás más ligero para tu ruta turística- repuso Sasha alargando una mano para arrebatarle la maleta.Dylan asintió con la cabeza y le siguió de cerca.No tardaron en volver a salir el uno junto al otro para echar a andar calle abajo.-¿En serio?- se contrarió uno de los