Relata Eva:Azote la puerta de mi habitación, caminé de un lado para el otro, nerviosa, enojada, indignada. ¿Qué yo era su esencia y la de la empresa? ¿Hasta cuándo quería mi madre que viviera bajo su sombra? ¡Yo no era ella!Esa noche, casi no pude dormir y fue más por la rabia, que por decidir lo que debía hacer, pues ya estaba más que preparada, desde hacía tiempo tenía la intención de hacerlo, solo que antes no me atrevía.Pero ya era hora de soltar y dejar ir.Por la mañana, había dejado órdenes precisas con el personal para que me enviaran mis cosas a mi aviso, luego de que encontrara un lugar para vivir, y una enorme maleta me acompañaba al salir de mi habitación.Mi madre, la respetable Selene de Golf, me esperaba en la sala con una humeante taza de té entre las manos.—¿Te vas? — Fue su saludo, al denotar mi maleta.—Sí, tengo mucho trabajo que hacer. — Respondí entre dientes. — No regresaré pronto, buscaré un apartamento en España y me instalaré allá, después de tod
Relata Eva:Inhale profundo, esta era la primera vez que intentaría soltar todo de mí, pero Lucas me daba una sensación de tranquilidad, sentía que por primera vez podía confiar en alguien y ese era él.—No sé por dónde empezar… — Musite.—Eso es fácil, nena… Puedes empezar por el principio, ¿Qué es lo que te molesta?—Mi madre… — Solté sin dudar.—Bueno, cuéntame de ella. — Lucas se encogió de hombros.—Por el principio, ¿Eh? Es una larga historia…—Que bueno que tenemos toda la noche y suficiente vino… — Murmuró con una sonrisa sensual.—Apuesto a que antes de que termine, te irás.—No lo sé… Pero ahora, te pienso escuchar…Lo sopesé y concluí que era lo mejor, que él supiera todo de mí y decidiera si quería quedarse o irse, así no sería tan doloroso después, si dejaba correr más tiempo y se enteraba por alguien más de mi verdad.—Bueno… Como ya te había contado antes, soy gemela y durante nuestra niñez, mi hermana Ava y yo, nos llevábamos muy bien, éramos… — Son
Relata Lucas:Eva se veía deprimida, ese brillo lleno de fuerza que caracterizaba su mirada, ya no estaba, por eso me pareció buena idea consentirla un poco, hacerla sentir cómoda y segura, en un pequeño intento por animarla.Después de todo, me había dado una grandiosa noticia, se mudaría permanentemente a España y eso para mí significaba, más tiempo juntos. Quizás esto que teníamos y que todavía ninguno sabía definir, sí podría funcionar.Llegamos a la suite del hotel en donde solía alojarse, le prepare un baño de burbujas en la enorme tina y la ayude a meterse, mientras que yo me dedicaría a prepararle una deliciosa cena.Moría de ganas por acompañarla y hacer chispear un poco el agua, pero para cada cosa, había un momento.Apenas terminé de cocinar y el vino estuvo bien frío, me dirigí al baño con dos copas servidas, me rompió el corazón, verla en el estado en qué la encontré, tan cabizbaja, algo debió haberle afectado mucho, un pensamiento o varios a la vez la mortificaban,
Relata Lucas:Llegué al restaurante en el que me había citado Selene de Golf, obviamente no me negué a la invitación, se trataba de la madre de Eva y aunque sabía que esa mujer me consideraba un aprovechado, porque la misma Eva me lo dijo, pensé que era bueno aclarar todo y tranquilizar a la señora.Supuse que quizás eso ayudaría para arreglar la situación entre madre e hija. Fui muy ingenuo.—Buenas tardes. — Saludé, apenas llegué a la mesa, la reconocí al entrar en el restaurante, era una mujer muy hermosa y elegante, con un gran parecido a Eva.—Buenas… No tanto. — Levantó la vista con prepotencia, detallándome cuidadosamente, al parecer me había reconocido. — Puede tomar asiento, señor Black. — Me molestó su actitud, pero me llené de paciencia y solo obedecí.—Veo que no hacen falta las presentaciones, señora Golf, entonces seamos claros y dígame, ¿Para qué quería verme? — Pregunté con mucha seriedad y en ese mismo momento, llegó el mesonero, con una copa para ella.—¿De
Relata Eva:Luego de que los mensajeros hubieran salido de mi oficina, hago lo mismo que he hecho los últimos días, lanzar el ramo de rosas a la basura.No entendía que era lo que había cambiado, pero no quería ni enterarme, ¿Qué Ethan estaba arrepentido por como había actuado esa noche al salir de la fiesta del desfile? Eso jamás se lo creería, él podría enviarme mil ramos, por mil días, y seguiría sin creerle.Volví a mi escritorio, dispuesta a recoger mis cosas para irme, era viernes y pensaba tomarme el fin de semana para mi mudanza, pues finalmente y con la ayuda de Lucas, había encontrado el apartamento perfecto.—Hola… — Toqué al tiempo que abría la puerta. — ¡Vaya! ¿Todavía trabajando? — Me crucé de brazos, ya en el interior de la oficina. — Esa jefa tuya debe ser una tirana.—Pues si… — Él soltó los papeles que tenía en la mano y fijó toda su atención en mí. — Es una dictadora, una exploradora, una mujer muy déspota y mandona… — Describió observándome con malicia. — Pe
Relata Eva:Las palabras de Leila me dejaron congelada, ¿Esa pequeña de verdad tenía la esperanza de que sus padres volvieran? Eso me hizo sentir un poco culpable.Lucas me había contado un poco sobre su fallido matrimonio y como se había acabado hacía mucho tiempo. Desde mucho antes de firmar el divorcio, Lucas ya no se llevaba bien con Nancy, discutían por cada cosa, él dijo que fue como si cada uno se hubiera cansado del otro, tan simple como eso, pero cuando ocurrió lo del cierre de la empresa familiar, una revista de modas, y comenzó el declive económico en su familia, la situación marital empeoró de tal manera, que no había ninguna salvación para su matrimonio.Todo estalló y fue el momento del inminente divorcio.Aunque yo ya conocía la historia de los padres de Leila, no pude evitar sentirme mal por sus palabras, ella era inocente y como cualquier niña, debía querer a sus padres juntos, como una familia, mientras que yo, era solo una intrusa para ella.—Escucha Leila,
Relata Eva:Me sentía tan bien… Por primera vez, en mucho tiempo, yo me sentía plena y feliz.Ya había pasado cuatro meses desde que contraté a Lucas y desde las amenazas de la junta para sacarme de mi propia empresa, dentro de poco, se cumpliría el plazo de seis meses, en el cual yo debía demostrar que era capaz de dirigir la compañía como CEO.Pero ya nada de eso me preocupaba, porque con el minucioso plan gerencial que Lucas había hecho y con mucho esfuerzo y dedicación, la empresa G&G España, estaba creciendo más de lo esperado.Y no solo estaba feliz por eso.Sentía que mi nueva vida era perfecta, pues finalmente tenía la independencia que siempre anhelé. Mi madre, ya no me asfixiaba con sus órdenes y peticiones, supuse que gracias a nuestra última discusión en París por mi relación con Lucas, ella pareció haber tomado consciencia de que yo ya no era una niña a la que podía manejar, y mágicamente, me había dejado en paz.En algún momento, hablaría con ella y trataría de sol
Relata Lucas:Me quedé estático al escuchar la noticia que me había dado mi padre, la emoción invadía mi mente e inflaba mi pecho, había estado esperando por tanto tiempo por esta oportunidad, pero ahora…Levanté la vista hacia Eva, ella se veía tan sorprendida como yo con la noticia que evidentemente había escuchado estando sentada a mi lado. Y al verla, solo una pregunta pudo abordar mi mente, ¿Y ahora que haría?—Me alegro, papá… Pero… — Guardé un momento de silencio, todavía con cierta duda.Me aclaré la garganta, pensando muy bien las palabras que respondería, intentando ser muy cuidadoso con lo que iba a decir, al tiempo que seguía sin quitarle la vista a Eva, quien me observaba muy confundida.—Tienes que viajar mañana mismo… — Siguió mi padre, al no escuchar que terminara mi oración.—Lo siento, papá… Pero no puedo…Solté, todavía algo inseguro de lo que hacía, pues había esperado por esto por mucho tiempo, pero ahora estaba Eva de por medio, la empresa para la que t