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Capítulo 26
Capítulo 26Kamila Daniel era un hombre sumamente atractivo y ahora que lo observe con detenimiento mientras lo vea desplazarse a su aire por la cocina, me preguntaba por qué nunca nos cruzamos desde de aquella noche. Puesto que ambos vivíamos en la misma ciudad y si él se acordaba de mí a la perfección, debimos de haber coincidido antes. Vero de espalda a mí también me hizo observarlo determinadamente y observé lo que tanto Paula me ha dicho. Daniel es un hombre sumamente atractivo y de cierto modo me subía el ego saber que estuve con un hombre como él. Un hombre de apariencia indomable, con ese pelo rebelde que le llega hasta los hombros. Además, su escultural cuerpo de dios griego tallado a mano, me ponía nerviosa y ansiosa. No obstante, no estaba aquí para admirarlo ni comérmelo con la mirada, estaba aquí para hablar de Rachel y Emma.— Daniel, no quiero que tu posición económica arruine la crianza de las niñas. Estoy consciente de que eres su padre y que tienes todo el derecho
Capítulo 27
Capítulo 27Daniel ¡Demonios! Esto tenía que estar siendo una broma, una broma de esas de muy mal gusto ¿Por qué de todas las veces que mi padre pudo haber escogido para venir a mi penthouse escogió precisamente esta? Justo cuando estaba a punto de besar a Kamila y que lo más probable fuera que hubiésemos llegado a algo más. No entiendo por qué la vida se empeña en ponérmelo todo tan difícil y a veces pienso que es el karma el que me está pasando factura por todo mi pasado.Me separo de Kamila sin tener otra alternativa y esta esconde disimuladamente su sonrojo tras sus manos. Hay que reconocer que se ve demasiado adorable y me sorprendía saber que todavía existen mujeres capaces de sonrojarse así. Una vez estuve frente a mi padre con los brazos cruzados sobre el pecho, me dedico a mirarlo por unos segundos para luego hablar directamente con él.- ¿Qué haces aquí papá? - le pregunto seriamente luego de haberme arruinado la noche.- Perdón por aparecerme así hijo; no sabía que ibas
Capítulo 28
Capítulo 28DanielMi padre, sin decir otra palabra contra mi persona, fija sus ojos penetrantes en Kamila. La cual se ha quedado petrificada en el lugar sin decir siquiera una palabra y las manos le sudan debido a lo nerviosa que se encuentra. Seguramente no esperó presenciar semejante espectáculo por parte de nosotros y menos la noche en la que estábamos hablando de las niñas. Las cuales pienso mantener en secreto hasta que sea el momento preciso, ya que al ver la reacción de mi padre en este momento no quiero ver la que tendrá cuando se entere de que es abuelo. – Por lo visto no has cambiado absolutamente nada, Daniel. Sigues siendo el mismo ególatra, egoísta y ambicioso de siempre. Es por eso que me voy a atrever a preguntarte si tu esposa aquí presente, tiene conocimiento del porqué seguramente te casaste con ella. Aunque para ser sincero, considero que ella ya debe de tener conocimiento de todo al haber aceptado fingir este matrimonio de la nada contigo.Al parecer las palabras
Capítulo 29
Capítulo 29Kamila Yo de verdad tenía que ser idiota, tenía que serlo, no hay otra explicación. Cómo se me ocurrió darle una oportunidad a ese hombre; cuando desde un principio sentía que había algo mal con ese dichoso contrato de matrimonio. Solo a una persona como él, se le pudo haber ocurrido semejante barbaridad, pero si pensó que podía utilizarme a mí o a las niñas. Se había equivocado de persona rotundamente.Me encontraba rumbo a mi casa, dentro de un taxi que pedí luego de haber discutido previamente con Daniel en el pasillo de su penthouse. Este no paraba de decirme que las cosas ya no eran como antes y definitivamente la cabeza comenzó a darme vueltas sin saber qué suponer realmente. Tal vez una buena idea sería renunciar a la agencia en la que trajo y al puesto que tengo actualmente. Solamente quiero tomar a mis hijos y desaparecer para que él no pueda volver a encontrarlos. No voy a exponer a las gemelas a ningún trato desagradable por parte de su familia, puesto que para
Capítulo 30
Capítulo 30KamilaNo puedo creer que esto me esté pasando, puesto que siento como si me hubiese pasado un camión por encima nada más con intentar estirar mi cuerpo sobre la cama. Aún no puedo considerar como terminó la noche de ayer, ya que de ser la más tranquila y armoniosa de todas, pasó a ser la más detestable y la más caótica.Aparte de sentirme como una hoja seca de otoño, siento también como unas suaves caricias son depositadas sobre mi cabello. Lo que me hace pensar que son producto de mi imaginación, sin embargo, al voltearme sobre mi cuerpo para buscar la causa responsable de dichas caricias. En el proceso me encuentro con un cuerpo totalmente tonificado y musculoso, además de un aroma inconfundible para mí. Rápidamente, abro los ojos al darme cuenta de que no estoy soñando y justo a mi lado tengo una imagen que jamás me imaginé ¿Se preguntan cuál es? ¡Bueno! Daniel, estaba recostado a mi lado justo sobre mi cama, como si toda la vida hubiese dormido en ella. Lo que me dej
Capítulo 31
Capítulo 31Kamila.¿Cómo se puede pasar de estar discutiendo acaloradamente con una persona y en un abrir y cerrar de ojos estar besándote con esa persona como si la vida se te fueran ello? ¡A ver, para que me entiendan! Me encontraba, besándome otra vez con Daniel, solo que esta vez sobre mi cama. No entendía en qué momento habíamos llegado a esto, lo único que recuerdo antes de tener a este hombre recostado entre mis piernas; es haber estado discutiendo por lo que yo creía era una mentira. Sin embargo, para este punto ya dejé de pensar y creo que me va a dar un infarto por esto que estoy sintiendo en todo el cuerpo.Minutos antes... Miro a Daniel sin saber qué decirle exactamente, porque me cuesta considerar que un hombre como él haya estado siete años sin estar con una mujer. Tal vez le está diciendo solamente para deshacerse de mí y de mis preguntas, pero si supone que soy idiota se va a quedar con las ganas.- ¿Tú de verdad consideras que yo nací ayer? En qué cabeza cabe que un
Capítulo 32
Capítulo 32DanielPodía sentir claramente como los nervios de Kamila estaban a flor de piel, ya que luego de nuestra conversación de ayer; nos encontrábamos ahora rumbo al juzgado. En donde Antonio nos esperaba para hacer oficial el hecho de que las niñas también lleven mi apellido y que queden registradas legalmente como mías. Como mis hijas.En el asiento del copiloto de mi auto, tenía a mi esposa muerta de miedo, podía comprender que el hecho de compartir a las niñas se estaba haciendo un poco difícil para ella. Sin embargo, para evitar que siguiera destrozándose las uñas, entrelazo sus dedos con los míos para darle mi apoyo.- No tienes por qué estar tan nerviosa Kamila, ya verás que todo va a salir bien y es un procedimiento rápido. - No estoy nerviosa por eso Daniel, más bien estoy nerviosa por todo lo que está por suceder luego de esto. Es obvio que el hecho de que tengas dos hijas traerá polémica al tu ser una figura pública. Ya me veo discutiendo con periodistas y respirand
Capítulo 33
Capítulo 33 Kamila Estaba que no me calentaba ni el sol y todo porque después de salir del registro civil con Daniel, ambos vinimos a la escuela que a mí me había gustado para inscribir a las niñas. Sin embargo, luego de ver esta situación ya estaba totalmente arrepentida de la decisión que había tomado. No obstante, si tal vez le cuento que ha pasado hace algunos unos minutos, entenderán por qué estoy diciendo esto. Minutos antes... – Lo lamento mucho, señora, pero si quiere que sus hijas estén inscritas en esta escuela, ambas niñas deberán estar en salones diferentes – dijo el director de la escuela quién ya me estaba cayendo como una patada en los ovarios. – Es que no puedo entender Por qué quiere que ambas niñas estén en salones separados. Yo como su mamá, siempre las he mantenido juntas porque al ser gemelas no quiero que haya distinción o problemas entre ellas. Me parece muy injusto que quieras separarlas aun cuando están chiquitas y se necesitan la una a la otra. – Pues