Capítulo 29

Kamila

Yo de verdad tenía que ser idiota, tenía que serlo, no hay otra explicación. Cómo se me ocurrió darle una oportunidad a ese hombre; cuando desde un principio sentía que había algo mal con ese dichoso contrato de matrimonio. Solo a una persona como él, se le pudo haber ocurrido semejante barbaridad, pero si pensó que podía utilizarme a mí o a las niñas. Se había equivocado de persona rotundamente.

Me encontraba rumbo a mi casa, dentro de un taxi que pedí luego de haber discutido previamente con Daniel en el pasillo de su penthouse. Este no paraba de decirme que las cosas ya no eran como antes y definitivamente la cabeza comenzó a darme vueltas sin saber qué suponer realmente. Tal vez una buena idea sería renunciar a la agencia en la que trajo y al puesto que tengo actualmente. Solamente quiero tomar a mis hijos y desaparecer para que él no pueda volver a encontrarlos. No voy a exponer a las gemelas a ningún trato desagradable por parte de su familia, puesto que para