Capítulo 27

Daniel

¡Demonios! Esto tenía que estar siendo una broma, una broma de esas de muy mal gusto

¿Por qué de todas las veces que mi padre pudo haber escogido para venir a mi penthouse escogió precisamente esta? Justo cuando estaba a punto de besar a Kamila y que lo más probable fuera que hubiésemos llegado a algo más. No entiendo por qué la vida se empeña en ponérmelo todo tan difícil y a veces pienso que es el karma el que me está pasando factura por todo mi pasado.

Me separo de Kamila sin tener otra alternativa y esta esconde disimuladamente su sonrojo tras sus manos. Hay que reconocer que se ve demasiado adorable y me sorprendía saber que todavía existen mujeres capaces de sonrojarse así.

Una vez estuve frente a mi padre con los brazos cruzados sobre el pecho, me dedico a mirarlo por unos segundos para luego hablar directamente con él.

- ¿Qué haces aquí papá? - le pregunto seriamente luego de haberme arruinado la noche.

- Perdón por aparecerme así hijo; no sabía que ibas