Aurora una chica para nada tonta, recibe una propuesta ventajosa de unos de los grandes líderes millonarios aunque el hombre le redobla la edad ella no duda en aceptar dicha proposición, porque de otro modo una chica de clase baja como ella nunca podrá cumplir sus grandes metas en la vida; cómo por ejemplo: ser una gran diseñadora famosa. Obteniendo el odio de todos incluyendo el hijo menor de su señor esposo, ella continúa adelante, beneficiándose de dicha unión, pero el día que el hombre que suponía su esposo muere, descubre varios secretos y entre ellos está la respuesta de porque el señor Jones nunca la tocó como un marido a su mujer. Estos secretos la comprometen más de lo que pensó, puesto que ese matrimonio incluía cumplir con términos a los que nunca estaría de acuerdo. —¡Eres una embaucadora!, ¡¡solo te casaste con mi padre para obtener toda su fortuna!!— le gritó Tobías encolerizado y viendo a esa mujer con mucho desprecio. —Y tu un niño mimado que no podrás tener un solo centavo de tu herencia hasta que no me respete como tu madrastra que soy— se mofó Aurora, quién ya esta arta de los insultos de Tobías —Corrección, señora Jones usted no es su madrastra, sino su esposa— le aclaró el abogado que estaba haciendo la lectura del testamento y los ojos de Aurora casi se le salen de las cuencas. —¡¡Imposible!!
Leer másAurora y Tobias están en su mejor momento, ambos están admirando su empresa de diseño, que juntos como una forma pareja construyeron, sus más allegados les acompañan, aún que las gemelas son de apariencia tierna, son muy traviesas, pero eso sí, tienen a todos enamorados.Y que decir del niño Alejandro, es todo un galán, un niño sumamente inteligente, Tobias y Aurora aún no pueden asimilar que apesar de todo lo que pasó estén juntos.—corta el lazo tú amor— pide Aurora ansiosa—no mi reina, hazlo tú— dice Tobías mirándola a los ojos —entonces lo hacemos los dos— sonríe Aurora y entre los dos sostienen la tijera, al cortarla, Eliézer capta el momento mágico, por fin Aurora tenía su propia empresa y por fin Tobias Jones se valió por el mismo, porque trabajo muchísimo junto a Aurora para lograrlo, aún que no era tan fácil, por qué tener gemelas y un niño, son noches desveladas y estar de un lado a otro sin poder tener tiempo a solas.Todos comparten animadamente y lo mejor es que Aurora
—Leonardo no cometas una locura por favor— hablo asustada Aurora —todo lo que hice maldita sea, todo lo que hice por tenerte para mí, le vale la cabeza al maldito de Dante para que te sintieras acosada por él, hice mucho robos a Trending Jones, poco a poco fui haciendo que Tobias cayera en banca rota, le enviaba constantemente fotos de nosotros y aún así nada valió la pena.Tobías se coloca al frente de Aurora, como protección.—te mato a ti primero, y luego a la perra de Aurora —¡No por favor!— grita exaltada Aurora—a mi, me puedes hacer lo que quieras, pero dejala ir, ella no tiene la culpa, está rivalidad siempre la hemos tenido tu y yo— dijo Tobias cuidadosamente—¡Cállate maldito!, Arruinaste mi vida, ahora yo voy a arruinar la tuya.Leonardo apunta hacia la frente de Tobias y luego al ya estar apunto de jalar el gatillo, Leonardo recibe un fuerte golpe en la cabeza que lo hizo desmayarse —¡¡Lourdes!!— grita Tobias al verla y la mujer está con el jarrón en sus manos, Aurora
Aurora suspira, Leonardo con mucho cuidado agarra la mano de Aurora y ella tensiona sus piernas.—no quiero verte triste— dijo él, y agarra el rostro de Aurora para que ella lo mire —Leonardo...— Susurra ella —quiero que seas feliz y yo si voy hacerte muy feliz mi reina, si quieres nos podemos vengar de Tobías —¿A que te refieres?— pregunta ella con su dulce voz—que se arruine, podemos hacer que quede por fuera del concurso—eso déjalo así, yo misma lo quiero pisotear, que él vea que yo soy la mejor.— responde Aurora con firmeza Leonardo sonríe satisfecho, el saca su celular no móvil—¿Que haces?— pregunta ella algo nerviosa —hacerte feliz— sonríe él, todo encantador — liberen a la mujer— ordena Leonardo y Aurora se queda boca abierta.Tan solo esa llamada fue suficiente para que soltaran a Lourdes—¿Feliz?— pregunta él—¡Sorprendida!, Y la verdad gracias porque se que ella es inocente.—yo hago lo que tú digas Aurora, ahora sí puedes entender lo que yo siento por ti— ella baja
Aurora se viste muy bien, se coloca un hermoso vestido que resalta su perfecta piel.Tobias la mira fijamente mientras ella se arregla —ya sabes, en cuento yo me vaya, tu sales.— dijo ella y se termina de maquillar—se que todo saldrá bien mi reina, y también se que vas a ganar, llegarás a la final—tu también mi Tobias, te admito algo—¿Que?— pregunta él, intrigante —amo ese vestido azul rey que creaste—lo hice pensado en ti mi reina —no exageres Tobias— dijo ella sonrojada mientras lo mira por el espejo, Tobias se acerca a ella y la mira por el espejo—te estoy hablándo en serio amor, yo necesitaba inspiración, así que pensé en ti, y te voy hacer muchos vestidos hermosos para ti—eso seria un honor señor Jones, tu madre debe estar orgullosa de ti, de igual manera tu hermano y el señor Leopoldo Jones.— dijo ella muy sincera y Tobias suspira—gracias mi amor, mi madre me dijo en un sueño que dejara mi amargura y mi rencor, y mi padre que no te perdiera, por eso tome estrictas dec
—no vamos a discutir, vamos a buscar soluciones Tobías, voy por mi bolso— dijo ella apurada—Maria por favor necesito que vayas a a listar todo mientras, lo ajustes que faltaron, y no dejes que nadie entre a mi habitación— Tobías le entrega las llaves a la chica, que está sumamente nerviosa, no es capaz de hablar.Tobias camina rapidamente con Aurora hacia el ascensor—¡Pobre mujer!, Hasta yo creo en su inocencia sin conocerla, la pobre se fue muy triste— habla Luz y suspira.—Luz, por favor vaya a mi habitación y haga los últimos retoques a las prendas, nos vemos, tratare de no demorar— dijo Aurora y las puertas del ascensor se abren, Tobías y ella se salen del ascensor y ahí queda Luz.Aurora está tan sumida en sus pensamientos, está asimilando la situación, buenos mal ambos manejan bien el idioma francés, al llegar a la estación de policía, Tobías busca la manera de ayudar a Lourdes.Leonardo está a punto de firmar la demanda hacia Lourdes y Aurora al percatarse de ello, dice—¡Le
—necesito descansar— responde ella sin ánimos Tobías la agarra de la mano y le dice —¿Que tengo que hacer para creas en mi?— pregunta él angustiante.Ella niega con la cabeza —necesito dormir, mañana es un día muy cansado, porfavor— pide Aurora, sin mirarlo a los ojos, Tobías se acerca a ella y la besa, él la agarra de la cintura y la besa con ternura, Leonardo que está mirando a escondidas siente como le hierve la sangre, desea tener un arma en esos momentos y acabar con Tobias Jones.Aurora se aleja de Tobías, ella pasa saliva y luego sin decir palabra alguna, la mujer entra a su habitación y se encierra. Aurora apoya su espalda en la puerta, respira profundamente, y luego ella empieza a llorar, Aurora respira profundamente por que siente su corazón muy acelerado y en si no quiere que tantas emociones afecten a su bebé.Mientras Tobías queda muy frustrado y solo. Él pensó que pasaría la noche con Aurora, pero no todo es color de rosa, lastimosamente Leonardo está dispuesto a tod
Tobías traga grueso —mi reina, tú eres hermosa y afortunado yo de tenerte en estos momento conmigo, solo lo decía por qué si están deliciosas, y puedo pedir más, hasta a mí me dieron antojos, es que tiene un sabor único— se apresura a decir él, y pasa saliva.Aurora seca sus lágrimas—¿Cierto?— dijo ella —¡¡si, si claro!!, puedo pedir más para ambos, ya se abrió más el apetito, ¿Quieres postre?— pregunta Tobías rápidamente.Ella solo asienta con la cabeza —no tardo mi reina, voy pero rapidito, no te me muevas, ya vengo cielo.Tobías sale corriendo de la habitación.—¡Maldición los cambios hormonales!, Casi la embargo, que idiota soy— susurra él mientras camina rápidamente al ascensor.—¡Señor Jones!— dice María al verlo.—lo siento María voy a afán— dijo él, y orpime el botón del ascensor varias veces —¡Tengo algo importante que decirle señor Jones!— dijo ella, con voz entre cortada —en otro momento Maria, lo siento pero es un urgencia, te veo mañana que descanses.Las puertas d
Al llegar Tobías a los pies de Aurora, él espera su señal, de que ella levante tan solo un pie, con eso es más que suficiente y Tobías la mira con intensidad, ella si alza el pie y luego el otro hasta que él termino de quitarle las pantys.Tobias ante la mirada llena de lujuria de Aurora huele sus pantys de manera depravada, y luego mira la intimidad de ella, su boca se le hace agua nada más de quererla sentir, Tobías acerca nuevamente su rostro a la intimidad de Aurora, ella traga grueso.Aurora puede sentir las mil maravillas, esa manera tan demandante en que Tobías lame y succiona, la hace jadear de placer.Ella se corre en la boca de Tobias y este succiona sus liquidos con gusto, dejándola a ella impresionada por lo rico que sintió.Tobías se coloca de pie y llega a los labios de ella, con cuidado agarra el rostro de Aurora—quedate está noche conmigo por favor— pide él, en susurro—Tobias...— Susurra ella—por favor, no te vas a arrepentir— súplica él con necesidad.Aurora fija
Que la puerta se abre así por así, ella pasa saliva y termina de abrir la puerta para entrar, al hacerlo todo está oscuro y puede ver unas rosas en forma de camino hacia el balcón, Aurora se sorprende y siente un escalofrio recorrer su cuerpo, eso ella no se lo esperaba para nada.—¿Tobias?— pregunta ella y al no escucharlo, se molesta, por lo que Aurora piensa que llegó en mal momento, quizás él está con otra persona en su habitación, ella escucha un ruido y la rabia se apodera de ella, Aurora camina hacia la puerta para irse, pero la agarran de la mano, por lo que ella se exalta.—¡soy yo!, Tranquila— habla Tobias —¿Creo que estás ocupado, mejor hablamos en otro momento— se apresura decir ella, y se suelta de su agarre, Tobias sonríe, no se pueden ver con claridad, ya que la luz está apagada y solo el resplandor de las velas les permite verse un poco.—¡Llegaste justo a tiempo!— dijo él sonriente—no lo creo, ¿Esto que significa Tobias?— pregunta ella cruzándose de brazos.—solo qu