Era de color melón, con una franja vertical de flores rojas en el centro, a todo lo largo del vestido, al ponérselo noto que le llegaba un poco más debajo de medio muslo, las mangas eran largas aunque dejaban sus hombros al descubierto y caían anchas por sus brazos, también tenía una linda caída por su cuerpo y se ajustaba a la cintura con un delgado cinturón marrón, unos botines del mismo color hacían juego con el cinturón, se miró sorprendida ante lo bonita y femenina que la hacía ver ese simple atuendo, normalmente ella solo vestía pantalones vaqueros, camisetas y zapatillas deportivas, sencilla y cómoda, sin accesorios y no se maquillaba, en ese momento aunque sabía que aún le faltaba por ser arreglada ya sentía un gran cambio en sí.— Bien, ya me vestí... ¿Ahora si me dirán que se traen entre manos? ¿De dónde sacaron este vestido y todo lo demás?— ¿Realmente no te lo puedes imaginar? —sonrió Victoria divertida, Jessie la miro mal.— Para ser tan inteligente mi querida Jess, eres
Cuando llegaron al restaurante Cedric se sintió un poco incómodo, y la miro un poco avergonzado por llevarla a uno de sus restaurantes, pero Jessie solo lo miro sonriendo, ella aún estaba nerviosa pero el verlo a él en ese momento la relajaba y divertía, quería pasarla bien y dejarse llevar un poco, confiaba en él, John los recibió en la puerta sonriendo de oreja a oreja, se veía divertido y un poco más animado de lo que ella recordaba, miraba a Cedric con un pequeño brillo de burla en los ojos. — Buenas noches señorita… — La saludo con galantería haciéndola sonreír. —Powell, si gustan seguirme, los guiare a su mesa. — Muchas gracias. —Jessie le devolvió la sonrisa, Cedric estaba serio aunque no molesto, ella tomo su brazo y caminaron tras John hasta una pequeña terraza privada, fuera. Estaba techada y apenas verla Jessie se quedó sin aliento, estaba decorada de manera sencilla pero el jardín tras ella era fascinante, flores de diversos colores se mezclaban con los diferentes tonos
— Al menos fuiste amable, hace un tiempo mis compañeros de estudios se burlaban de mí por ser tan "princesa"— Debió haber sido difícil para ti.— Un poco, pero entonces estaba Bruno, siempre cuidándome, incluso de Zack, él también se burlaba de mí, pero no con mala intención, aún lo hace–. Sonrió negando con la cabeza.— Me alegra que los tengas.— Yo también, son como mi familia. —El asintió y continúo comiendo. —¿Has sabido algo de Nora?— Ha estado bien, está más animada y aunque Norberto le discute bastante sale más de la habitación y camina por los alrededores, me dijo que se muere más rápido estando todo el día recostada sin hacer nada cuando no se siente mal.— Es una mujer testaruda. —Jessie sonrió con cariño.— Es una de las cualidades que admiro de ella.— Les estoy agradecida a ella y a Norberto de que estuvieran contigo este tiempo, aunque no hayan logrado corregirte del todo. —Sonrió con burla.— Voy a tomar eso como un alago.— Lo fue, créeme.— ¿Cómo está la comida?—
Al término de la obra Jessie no dejo de alabarlo todo y él estaba más que feliz por haberla complacido tan plenamente, por saber que su elección o había sido errónea, aún entre comentarios y debates con respecto a lo ocurrido en la obra se dirigieron nuevamente al carruaje recibiendo algunas miradas curiosas de los espectadores de la obra que salían junto con ellos y algunas otras de envidia al reconocer quien era él y preguntándose quién era la chica con la que estaba, pero Jessie logro mantener un perfil bajo hasta que estuvo resguardada tranquilamente en el interior del carruaje, aún emocionada por el hecho de estar desplazándose por la ciudad realmente en algo como eso, aunque sabía que era estúpido.— Jess… —El leve Susurró de Cedric la trajo de regreso, fuera de sus pensamientos, lo miro con una pequeña sonrisa. —Hay algo que quiero darte. —Afirmó con calma buscando entre sus bolsillos.— Apenas estamos empezando a conocernos, no me voy a casar contigo. —Él se rio ante su coment
Despertó sintiéndose extrañamente contenta esa mañana aún estando consciente de que Cedric se iría ese día del hotel que por ende el verse y pasar tiempo juntos les sería mucho más difícil, por un momento su mente vago en la idea de aceptar su propuesta, se encargaría de recalcarle el que no dormiría con él, y en pedirle esa habitación que le había prometido, aunque mentiría si decía que no moría por pasar la noche entre sus brazos y no precisamente durmiendo, pero su mente y conciencia le decían que no era buena idea hacerlo, sabía que si accedía a eso no podría seguir manteniendo sus guardias altas y que al final terminaría cediendo a sus deseos lo cual sería un gran error, tenía que encontrar otra manera de pasar tiempo con el sin exponerse.Con esos pensamientos rondando su cabeza se levantó para prepararse para salir, era su día libre pero le había prometido a Cedric que iría con él a ver la casa y supervisar las reformas, lo cual sabia era una excusa tonta de él para pasar tiemp
— Pero yo también tengo una petición. —Se alejó de él mirándolo a los ojos.— Sus deseos serán órdenes.— Quiero comprar yo misma mis muebles y decorar la habitación con mis propias manos. —Él la miró alzando una ceja. —Sé que debo aceptarte con todos tus millones y juguetes de niño rico y lo hago pero si voy a aceptar vivir a medias aquí quiero que también te adaptes un poco a mí, no quiero nada muy ostentoso ni llamativo y quiero que lo nuestro sea lo más discreto posible, que solo lo sepan las personas más allegadas a nosotros, quienes consideremos importantes, más adelante veremos cómo se desarrollan las cosas, por el momento quiero eso.— Si te refieres a la prensa y todo el escándalo de la otra vez, no tienes de que preocuparte, ellos me molestan muy poco últimamente, recuerda que solo soy un empresario, ni cantante, ni actor o modelo.— Pero igual te has creado fama, eres exceso y ya te tienen en la mira, ¿o ya te olvidaste de la noticia de la supuesta competencia entre Shelley
Tal como había prometido en algún momento durante el día anterior Jessie estuvo en su casa al día siguiente a las seis de la mañana, una hora antes de lo que era su horario en el trabajo, pero no estaba sola, noto Cedric cuando abrió la puerta notando el auto estacionado frente a su casa, Laura, Victoria y Zack lo saludaron con sonrisas divertidas plasmadas en sus rostros y un gesto de la mano, Bruno quien iba al volante solo hizo un gesto con la mano a modo de saludo, tenía el seño fruncido y estaba muy serio. — Tienen diez minutos antes de que me arrepienta y me vaya. —Amenazo alzando la voz sin mirarlos nuevamente — ¿Pero... que? —se quejó Cedric aún sin entender nada. — Vamos, apresúrate, no hay tiempo. —Le urgía Jessie empujándolo dentro de la casa. — ¿Pero qué ocurre? —insistió mientras Jessie lo empujaba hacia las escaleras para que empezara a subirlas. — Es una sorpresa pero debes apurarte o Bruno cumplirá su promesa y se arruinara todo. —Explico mientras seguía empujándol
Llegaron a la casa de Cedric poco después de mediodía, nuevamente la sensación de incomodidad invadió a Cedric cuando Bruno se detuvo frente al enorme portón negro y todos incluyendo a Jessie contuvieron el aliento, miro a su novia un poco extrañado y esta solo se encogió de hombros susurrándolo un "aún no me acostumbro a este lugar" que lo hundió aún mas, salió del auto un poco irritado y suspiro tocando el intercomunicador, cerró los ojos esperando a que todo eso pasara rápido, les mostraría la casa y ya después las cosas volverían a ser un poco más cómodas o eso esperaba, se sentía estúpido por avergonzarse del dinero de sus padres y la forma en que estos lo gastaba aún a esa edad aunque no era su culpa, pero ese pensamiento igual no aliviaba su incomodidad.— ¿Cedric? —la voz de Norbert por el intercomunicador irrumpió en sus pensamientos, el hombre sonaba sorprendido.— Te lo explico adentro. —Fue su única respuesta y el enorme portón se abrió, Cedric volvió al interior del auto