Sus ojos habían estado completamente abiertos toda la noche, la verdad es que sería difícil dormir después de haberse enterado de la situación de su actual esposo. Pero entonces Valentinne comprendió que él no es su esposo. Ella no se llama Valentinne ante estos desconocidos, ella solo está ejerciendo el papel de su prima y esas preocupaciones que sentía debía dejarlas de lado. Todo hubiese sido maravilloso si no hubiese llegado a aquella conclusión a las cinco de la mañana. Ella debía escapar del lugar, debía irse temprano y con ello lograr llegar a trabajar. No podía dormir unas horas más, si lo hacía corría el riesgo de enfrentarse a aquel hombre y la verdad es que ella no lo escuchará. Por eso ella solo escaparía de su presencia, él no sentiría siquiera que ella estaba en el lugar.
Observó la cama a su lado y noto como Anais había dormido plácidamente toda la noche, mientras ella no dejaba de dar vueltas en la cama. Sintió un poco de envidia por su compañera de habitación,
--No sabía que eras tan buena en esto... La verdad es que tengo que aprender un poco más sobre vidrios, jamás había limpiado nada en mi vida... --las palabras de Cedrik quedaron en el aire, cuando Valentinne observó hacia la espalda del castaño y su gran sonrisa fue borrada de inmediato. Adrien estaba frente a ella, con una mirada completamente fría como hielo y se mostraba bastante intimidante, justamente como la noche anterior.En aquel instante ella se preguntaba qué debía hacer exactamente. Este hombre le había indicado que no deseaba que se cruzara por su camino, que la quería lo más lejos posible. Pero ahora ella no podía hacer más porque ellos se habían cruzado y ella solo había optado por bajar la cabeza y rogar que él caminara fuera de su rango de vista ignorándola por completo. Cedrik giró sobre sus talones de inmediato hizo una gesto de enojo algo que no era muy común en él al ver allí a su hermano.Aquello era sinceramente divertido para Adrien. Cedrik jamás
Su dedo golpeaba una y otra vez en aquel sillón, mientras se debatía en cómo debía comportarse en aquel momento. Su cabeza en aquel momento no sabía si era lógico o tal vez prudente llegar a manejar la situación. Solo llegaba a calcular su rápida y distorsionada mente por los sentimientos que de alguna extraña manera se negaba a reconocer en aquel instante. Es que de solo recordarlo, de solo siquiera llegará pensar en aquello solo hacía que su mente enloquecer.Pero es que los recuerdos no dejaban de invadirlo. Su voz no dejaba de mostrarse una y otra vez en su mente, sus expresiones y sus ojos vacíos mientras cantaba. Adrien creía que aquella chica no dejaría nunca de impresionarlo, pero justamente cuando creía tener ya un concepto establecido sobre ella, esta viene y lo golpea en la cara mostrándole que no es así. Ella no dejaba de mostrar distintas facetas en solamente unas cuantas horas de conocerse. Llegó a su cabeza aquel deseo de conocerla más, le llegó a su mente aquel
Su corazón estaba completamente alterado, su respiración era un completo caos y su mente estaba trabajando a mil por hora. Ella todavía no lo podía creer con el hecho de lo que había ocurrido hacía unos momentos. Ella lo había golpeado y había actuado de manera apresurada por el hecho de que él había herido sus sentimientos de manera casi magistral con aquellas palabras. Había mencionado a su madre de tal manera que ella se había sentido herida. Tenía miles de sentimientos en aquel instante.Quería gritarle que ella no tenía idea de que se trataba de ser criado por tu madre, quería decirle que no se jugaba con la mente de un huérfano y que mucho menos se insultaba de tal manera a alguien que no había tenido padres. Pero entonces justamente después de golpearlo ella comprendió que ante sus ojos ella no era Valentinne, antes sus ojos era Chantal. Una mujer que había tenido a sus padres amorosos toda su vida, una mujer que seguramente ante sus ojos no era más que una caprichosa.&
--No debes preocuparte. Hablas como si el amo fuese algún vampiro maligno y cruel con las mujeres. Si hubiese sabido que usted era la señora de la casa... Lo lamento señorita Chantal... --Valentinne observó a la chica apenada que doblaba la ropa en el cuarto de lavado. Ella se refugiaba allí con la única intención de escapar de Adrien quien había dejado aquella nota al lado de su cama en la mañana.--No me llames señora ni nada de eso... Solo llámame Va... Chantal... Solamente Chantal... No me gusta eso de señora y con respecto a lo que sí es o no un vampiro aún lo estoy sospechando...--Anais sonrió divertida ante las palabras de la chica quien simplemente se puso al lado de la mucama a doblar la ropa al igual que ella. Aunque Anais había indicado que no debía hacerlo al ser ella la dueña de la casa y no parte de la servidumbre. Para Valentinne era una tontería, pues ella estaba más que acostumbrada a ayudar a su nana todos los días antes de ir a estudiar o trabajar.--B
--Entonces iremos a la universidad y me encargaré de mudarte a la carrera que deseas, sin contar que investigaré todo sobre tus notas. No quiero que crean que mi esposa es una mujer sin la menor inteligencia-- ¿Ayudar? ¿Verificar notas? Por dios no, eso sería terrible, no esperó que este hombre quisiera estar tan metido en todo. Además en bien pisara la universidad, todos la llenarían por su nombre, su prima que estaba allí y era bien conocida también. A ella la llamaban la diosa en la universidad. Pero entonces el hecho de que Adrien pudiese estar en el mismo lugar donde si conocían el verdadero rostro de Chantal sería todo un problema. Ella comía y no notaba en medio de sus pensamientos que había una persona completamente concentrada en cada gesto que ella hacía.--Yo... Ahora que lo recuerdo he dejado mis documentos en mi antigua casa... Sí... Creo que lo mejor será que yo me haga cargo de eso... Así que nos vemos luego, yo le digo como me fue en la universidad, señor... --
--Va… --Mamá… Qué dicha en verte… Si lo arruinas te culparé…--lo último había salido en un susurro que sólo Channel de Rossel había escuchado. Al separarse de Valentinne, solo hizo un gesto amargo y tragándose todo el desprecio que sentía hacia ella y el odio repulsivo de sentirse cerca de aquella escoria a la que le había jurado hacer la vida miserable. Channel sonrió a su supuesta hija y acarició su cabello que, en medio de eso jalaba con toda la intención de lastimarla.--Mi querida hija... Mira nada más la sorpresa que nos das... No hay duda que a tu padre le encantará verte, sobre todo estando tan bien acompañada... ¿Quiénes son ellos? --de un solo empujón había dejado a Valentinne de lado. Mientras Adrien seguía un poco más en el juego, por lo que en medio de sus miles de pensamientos dudosos sonrió con picardía y tomó la mano de Channel, mientras le daba un corto beso en ella, dejando sorprendida a las dos mujeres que lo acompañaban. Incluso Irina no sabía que s
Silencio... Todo se había quedado en completo silencio, no había el más mínimo ruido en el lugar. Era más que obvio que nadie sabía qué hacer o decir. Valentinne estaba a punto de hiperventilar, mientras que los padres de Chantal observaban a Chantal como si fuese no más que una loca. Adrien dio una media sonrisa y observó a la mujer frente a él con una sonrisa de satisfacción y una ceja levantada. Había parecido terriblemente divertida toda la situación, en lo que Irina también observaba a la chica, pero entonces vio que su mirada se intercalaba entre Valentinne y Chantal.La rubia despampanante parecía completamente satisfecha con sus palabras y parecía haber ganado algún tipo de premio por sus recientes palabras. Pero entonces el silencio fue disuelto con una gran carcajada, seguida de otra y de otra, todas parecían muy nerviosas.--Vale... Siempre nuestra brillante Vale... Nuestra sobrina es muy divertida, desde niñas hacen este tipo de bromas. Tienen la misma
Las dos mujeres giraron de inmediato hacia las personas que estaban a su costado, en lo que observaron a todos en el lugar. De nuevo una escena que no le agradaba para nada a Valentinne. De verdad a ella le gustaría que su suerte de vez en cuando no se burlara tanto de ella y le brindara un poco de ayuda, pero el problema es que aquello parecía casi imposible. La verdad es que le gustaría que ella no fuese tan explosiva y que su enojo y agresividad salgan en primera línea cuando era insultado un ser querido por ella. Pero la verdad es que no era posible, ella perdía la racionalidad y por completo su carácter explosivo salía a flote de manera instantánea cuando más que todo Chantal hablaba de aquella manera.Ahora ella quería de nuevo querer siquiera salir de aquel lugar ¿Qué no podía siquiera llegar al comedor? Había varios lugares en donde podían hacer un poco más de caos, pero parecía que el recibidor sería su punto