La cruel risa de Baixue siguió resonando durante largos minutos. Xu AnRong no lo aguantó más y habló en un tono completamente enfurecido:

"¡Qué amor! ¡¿De qué amor estás hablando?!" el sudor cayó por su frente, humedeciendo los mechones de pelo y pegando estos a la piel. Al mismo tiempo, su mirada era tan afilada que podría cortar el hielo más duro.

Xu AnRong solo había amado a una persona en su vida. Y esa persona ahora ya no estaba. Por lo que este tema tocó una fibra sensible en su interior.

La mirada de Baixue se tiñó de rojo. Complacida por su reacción.

"¿No son tus reacciones contradictorias? ¡Tu corazón está lleno de un oscuro deseo! Jaja…"

Sin saber de qué estaba hablando, Xu AnRong terminó por perder la paciencia. Sacó su blanca espada, y esta se llenó de energía espiritual pura.

Antes de que Baixue pudiera reaccionar, una de sus manos fue cortada en un solo movimiento limpio. Parpadeó varias veces, y volvió a mirar al hombre que tenía delante.

Xu AnRong había lanzado un