Llegué al taller tomada de la mano de Hayden, mientras Nora y Debbie nos miraban. Les sonreí y seguimos adelante hasta llegar a la oficina, donde nos esperaba Jona con cara de tragedia.— ¿Pasa algo? — le pregunté.Jona me entregó unos documentos, los ojeé y de inmediato supe que todo estaba hecho un desastre.— ¿Quién carajo hizo este desastre? — le pregunté.Jona se pasó las manos por el rostro.— Nora, y yo no los revisé. Ahora estamos metidos en un enorme lío con esto, prácticamente vamos a promocionar gratis — me dijo.Dejé los documentos sobre el escritorio y salí de la oficina. Caminé hasta donde estaban esas dos.— Te necesito en la oficina ya — le dije a Nora.Ella me miró de arriba a abajo y me ignoró.— Tanto que me reclamaste de que yo era la culpable de tirar a la basura todo el esfuerzo de este equipo, ¿y tú regalas dinero? — le pregunté furiosa.— No sé de lo que hablas — me contestó.Agarré su brazo y la arrastré conmigo hasta la oficina, donde estaba Hayden y Jona.— A
Al día siguiente, Hayden se fue muy temprano al taller. Yo decidí quedarme, ya que no tenía ganas de salir. Me senté en el sofá y empecé a buscar información sobre el tipo de ayer, terminando en su red social. Cada foto del tipo era más y más sugerente; definitivamente, este hombre era un presumido de primera.— ¡Kat! — gritó Grace, espantándome. Yo dejé de ver la pantalla de mi celular y la miré a ella.— ¿Cómo entraste? — le pregunté.Ella se sentó a mi lado, me quitó el celular de la mano y después me miró a mí.— ¿Por qué estás viendo hombres desnudos? Woow, este tipo está bien bueno, ¿de casualidad no tendrás su número? — me preguntó.Yo le arrebaté el celular de la mano y la miré mal.— Solo estoy investigando un poco, y este tipo es la competencia directa de Hayden — le comenté.Grace volvió a quitarme el celular y lo miró por un momento.— No te preocupes, Hayden va a ganar — me dijo con una sonrisa.— ¿Apostaste otra vez? — le pregunté.Ella sonrió de oreja a oreja.— Aposté
El rugido de los motores llenaba el lugar. Grace y yo nos acercamos a los ingenieros y a Jona, que se veía algo preocupado. Yo miré el coche de Hayden, que estaba en la línea de salida junto a los demás.— Confía en Hayden — le dije a Jona.Él me quedó mirando.— Confío en él, sé que ganaremos — me dijo.Yo asentí con la cabeza. Jona se quitó los auriculares y me los entregó. Yo me los puse de inmediato.— La victoria es tuya, amor — le dije.— Te amo — me contestó Hayden.— Concéntrate. Ya me dirás que me amas más tarde — le dije.— Solo quería recordártelo, pero sí que te lo diré más tarde — me dijo.Yo miré a un lado y los otros que también tenían los auriculares se estaban riendo.— Chao, me estás haciendo avergonzar — le dije.Me quité los auriculares y se los devolví a Jona, que sonreía ampliamente.Las gradas se teñían de los colores de los diferentes equipos. Los gritos de la multitud llenaban todo el lugar. Se sentía tan emocionante.El semáforo se apagó y los coches emprendi
Hayden se había ido de viaje con el equipo. Yo no pude ir con él por cuestión de trabajo, así que lo llamaba todos los días para preguntar cómo estaba, y cuando no lo llamaba, él me llamaba a mí. Era lindo, me encantaba sentirme tan mimada y querida.Hoy estaba en la oficina, revisando algunos documentos. Siendo sincera, lo único que realmente quería era irme a casa y dormir. Con el embarazo, me había vuelto una persona perezosa.Lily entró a mi oficina y me quedó mirando.— Kat, alguien quiere hablar contigo — me dijo Lily.— No estoy para nadie — le dije.Ella respiró profundamente.— Es la hermana de Hayden, y dice que no se irá sin hablar contigo — me dijo.Yo puse los ojos en blanco. Después de la discusión con el padre de Hayden, pensé que todo había acabado, pero parece que no.— Dile que pase — le dije.Lily asintió con la cabeza y salió de mi oficina. Después de un breve momento, entró la hermana de Hayden. Ella me miró y sonrió de lado.— Entonces, ¿es verdad que estás embar
Los días pasaron sin ningún problema. Hayden y yo estábamos viviendo un sueño. De hecho, desde el momento en que él me pidió la mano, Grace y yo empezamos a hacer planes para mi boda. Quería algo pequeño pero lindo, idea que no le gustó para nada a Grace. Ella quería algo ostentoso, la boda del año según ella. Ella y yo estábamos sentadas en el suelo de mi apartamento mientras ojeábamos revistas con vestidos de novia. — Podemos alquilar un salón, te juro que la boda será maravillosa — me sugirió Grace. — Quiero que sea en el jardín de casa de mi padre, algo pequeño pero lindo — le dije con una sonrisa. Ella puso los ojos en blanco. — ¿Quieres una boda como la de tu hermana? — me preguntó. Yo negué de inmediato. A pesar de que se habían cambiado muchas cosas en la boda de mi hermana, para mi gusto fue… aburrida. Yo quería que fuera alegre pero pequeña. — No te entiendo, ¿entonces solo quieres unas flores, las mesas y ya? — me preguntó. — Diste en el blanco, eso es exactamente l
El día más importante de mi vida llegó. Grace estaba conmigo en la habitación de mis padres ayudándome a terminar de arreglarme. Me sentía como una princesa muy embarazada.— Pareces una carpa, pero de esas lindas — me dijo Grace de la nada.Yo la miré mal y ella empezó a reír.— Lo siento, es que estoy nerviosa. Esta es tu primera boda. Me siento igual de nerviosa que cuando perdí mi virginidad — me dijo.Parpadeé un par de veces, aún mirándola fijamente.— ¿Y si mejor ya no hablas? — le sugerí.Ella puso los ojos en blanco de inmediato.— Es que estoy nerviosa — me dijo.Me acerqué más a ella y la abracé.— Estoy tan feliz de que seas feliz — me dijo con la voz quebrada.Me separé de ella y sonreí. Grace estaba llorando.— Gracias por siempre estar a mi lado, y gracias por todos tus consejos, aunque en ocasiones no son los mejores — le dije.Ella me abrazó con fuerza.— Salgamos rápido o vamos a arruinar nuestro maquillaje — me dijo.Ambas nos separamos, y sonreímos. Grace salió de l
Meses después.Empecé a poner por todos lados las fotos de mi boda con Hayden, y algunas otras fotos. Quería que nuestra casa fuera lo más acogedora posible.— Amor, ¿me ayudas a rodar esto? —grité.Hayden apareció sin camisa y todo sudoroso, ya que estaba organizando los muebles para el cuarto del bebé.— Cariño, deja de moverte tanto, estás en los últimos días. Se supone que debes estar tranquila —me dijo.Yo puse los ojos en blanco de inmediato. Odiaba no hacer nada y dejarle todo el trabajo.— Solo estoy poniendo algunas fotos. No se me va a caer un brazo —le dije.Hayden, de mala gana, movió una mesita que estaba estorbando.— Siéntate, por Dios, que me estás poniendo nervioso —me dijo.Yo me acerqué a él y lo abracé.— Estoy todo sudado —me dijo.Yo me encogí de hombros.— Te ves muy sexy —le dije.Él sonrió.— Siéntate, por favor —me pidió.Yo me separé de él y de pronto sentí cómo agua empezó a bajar por mis piernas.— Mierda —dije.Hayden me miró con nerviosismo.— ¿Qué pasó?
Dos meses después.Hayden se había ido temprano al taller sin antes decirme, o más bien ordenarme, que tenía prohibido ir a ver la carrera. Ethan estaba demasiado pequeño, y yo era consciente de ello, pero hoy era la gran final, y me parecía justo que nuestro pequeño viera la victoria de su padre.Llamé a Grace y le pedí que viniera por mí. Obviamente, ella me dijo que sí de inmediato. Así que aquí estaba, en la puerta, esperando a mi loca amiga, con un maletín con las cosas de mi bebé y con un bebé de dos meses en su portabebé.El coche de Grace aparcó frente a mi casa, yo me apresuré hacia él, acomodé a mi niño en el asiento trasero y después me subí en el asiento del copiloto junto a Grace.— Tu esposo me va a matar —me dijo con una sonrisa.— Nos va a matar a las dos, así que date prisa o llegaremos tarde y quiero desearle buena suerte —le dije.Grace asintió con la cabeza y aceleró.— ¿No has bebido, verdad? —le pregunté.Grace me miró mal de inmediato.— No soy un monstruo, Kat