Tania cada vez se sentía más perdida con la actitud de Hans, este parecía bastante molesto con lo sucedido la noche anterior. — ¿Todo bien? — pregunto su madre al desayuno, la cara larga de los dos no era algo a lo que estaba acostumbrada.— No, solo no he dormido muy bien — contesto ella, mientras daba un bostezo.— Yo igual — añadió el mientras que Mara prefería guardar silencio.— Estaré con tu padre, ya dentro de algunos días le darán de alta, Hans quería desde ya agradecer todo el tiempo que me has brindado tu casa — le dijo al joven que amablemente le había dejado quedar en su casa.— Las puertas de mi casa están abiertas para ti cuando desees, aunque aún no te vas, dímelo cuando llegue el momento — contesto mientras que la mujer sonreirá.Tania solamente miraba la manera en la que estos dos se entendían, parecía ser que eran muy parecidos, mismo signo para ser exactos.— ¡Hans, te espero en la piscina! — dijo Tania levantándose del lugar en el que estaba desayunando. — Se me ha
Hans había dejado de hablar con sus padres desde hace algún tiempo, quizás desde aquel momento en el que se había accidentado, sabía que estaba mal, pero no podía evitar sentirse orillado a olvidarle.— ¡Si no te encuentro aquí, te olvidas de tu padre! — dijo en modo de saludo.— No es que me olvide, estoy acostumbrado a tu ausencia, si, que la independencia es algo que aprendí por ti — añadió y le estiró la mano, era la forma más cordial de saludarlo.— Saludarte no es algo que deseo por ahora — le contestó este sin siquiera tomar la mano de su hijo.Su familia se había alejado desdén algunos meses, la navidad había sido la fecha en la que estos hicieron un alto, no podía decir que su padre era malo, pero era de aquellos a los cuales se les olvidaba la existencia de sus hijos.Esa Navidad, sus hermanas comenzaron a cuestionar su vida, estas no tenían la culpa de lo que estaba pasando, incluso, eran puro amor con él, pero su padre era de aquellos a los que lo que estaba pasando no era
Chimuelo había decidido acabar con todo en casa, estaba bastante preocupado de ver su jardín en total caos.— ¡Tania! — grito fuertemente.— Señor, ella ha salido con su madre, dijo que venía en una semana — le contó la mujer y este se molestó aún más.Llamó a una de las personas que le ayudaban y comenzaron a limpiar todo lo que estaba en la casa.No solo había dañado afuera, este había decidido seguir con la parte del patio, no entendía por qué un animal tan pequeño había decido hacer hoyos en la parte donde había un poco del césped.— ¿Y aquí que paso? — le preguntó Miguel que venía atrás de él.— ¡No quiero ver más a esa bestia en mi casa! — grito, era la manera en la que estaba explotando y con el que menos tenía que ver con su error, el pequeño gato se escondió de inmediato, pero sus pasos llenos de barro lo del ataron rápidamente.— ¡Ven, pequeño! — le dijo Miguel con suavidad, no sabía por qué tener que desquitarse con un pequeño animal que no tenía que ver con lo que él estab
Hans le estaba diciendo que sentía más por ella de lo que pensaba, estaba completamente en shock en su habitación, quizás eso le estaba pasando un poco de factura, no sabía que pensar al respeto de lo que estaba pasando.— ¿Tania? — le preguntó al otro lado de la puerta, esta había decidido huir, estaba claro de que era algo que no se esperaba.— ¿Qué quieres? — le preguntó esta, estaba molesta, pues su gato era el menos implicado en sus problemas y el único que había recibido la descarga de enojo de Hans.— Solo quiero que hablemos, ha sido un día de mierda y creo que me he descargado con ustedes — le dijo poniendo su frente sobre la puerta, sabía que Tania no le abriría, era demasiado orgullosa para hacerlo.— Perdón por lo ocurrido, pienso que no creí las cosas, quizás actúe mal, no es quizás, es un sí, actúe como un idiota y Miguel está con Chimuelo, perdón — dijo una y otra vez.Tania aunque estaba molesta, sabía que este tenía un poco de razón en su enojó, ella no tenía el derec
Tania y Hans habían tenido una larga charla, hablar de sentimientos era algo que los hacía sentir algo vulnerables, pero aquellos temas eran algo que debían tratar, estaba claro que la vida les estaba dando una oportunidad de ser claros entre ellos.— ¿Qué sientes por mí exactamente? — preguntó ella, era la segunda vez que lo orientaba, quería estar clara de lo que sentían, sabía que Hans sería honesto, habían entrado a un punto de la vida en la que debían hablar claro.— Me gustas, eso exactamente, no sé cómo pueda esto ayudarnos, realmente lo sé, pero ignorar lo que siento por ti es estúpido — le dijo este y ella se quedó ahí, mirando y analizando todo.— ¿Y eso que quiere decir para ti, que cambia? — le preguntó, Tania tenía la intención de dejar claro todo, no quería sorpresas que le molestaran en un futuro.— No sé, realmente no he pensado en ello, no sé lo que quiero realmente, pero creo que conocernos es un buen paso, pero sé que el hecho de que estés en casa todo el tiempo no
¡Un nuevo aire!Los padres de Tania habían decidido volver a la casa de campo, no querían estar en la casa en la que ya se habían separado, Tania y Michel estaban pensando en lo exagerado y loco del tema, pero ellos eran los únicos que sabían todas las razón es por las cuales se negaban.Una relación es un mundo aparte, está la cara que todos conocen, la buena o mala, pero también está la que muestra todos los detalles que a veces se ignoran, la verdadera esencia de la persona que se tiene al lado, sus manías, los complejos y todo lo que implica conocerse a fondo.Mara había vivido una relación maravillosa, algunos matices no tanto, se habían casado muy jóvenes, se había dedicado en alma a sus hijos y eso había consumido todo en aquella relación, entre ellos no había nada más en ese momento, era la razón por la cual se habían divorciado, ahora eran otros y el accidente fue como ese punto en el que comenzaron a darse cuenta de que el amor aún era fuerte, que la vida los había unido de
Estas estaban entusiasmadas de hablar un poco de las dos, había pasado algún tiempo desde que no conversaban de todo un poco, colocaron música y lo primero que sonó en la lista era esa canción, una con la que habían crecido y que les traía una de las historias más tremendas de vida, era bebé con ella, cantaron a todo pulmón, para Tania era como un himno de resiliencia y para Jane uno de victoria.— ¡Tania cantalaa! — le grito cuando comenzaron a entonar aquella letra…Ella se ha cansado de tirar la toallaSe va quitando poco a poco telarañasNo ha dormido esta noche pero no está cansadaNo mira ningún espejo pero se siente to' guapaHoy ella se ha puesto color en las pestañasHoy le gusta su sonrisa, no se siente una extrañaHoy sueña lo que quiere sin preocuparse por nadaHoy es una mujer que se da cuenta de su almaHoy vas a descubrir que el mundo es solo para tiQue nadie puede hacerte daño, nadie puede hacerte dañoHoy vas a comprenderQue el miedo se puede romper con un solo port
Tania estaba en una posición bastante complicada, por un lado, estaba su mejor amiga, esta había vivido toda su vida a las sombras de un amor no correspondido como el de Michel, ahora estaba su hermano; este había hecho de la vida de su amiga un desastre y aun así estaba destrozado de haberle perdido, había intentado por algunos medios de que estos hablaran todo lo que estaban pasando, pero había sido imposible.Jane estaba convencida de que el amor de su vida era Marco, ese le enseñaba un mundo donde tenía todo el respeto y el amor del mundo, no quería seguir en aquel círculo vicioso, donde Michel ponía su vida una miseria.— No tienes que ir si así lo deseas, creo que lo que pasó entre tú y mi hermano es algo que les compete solo a ustedes y por más de que quiera opinar, lo debería hacerlo, solo son ustedes dos en esto y aunque me duele, estoy contra la espada y la pared, eres mi amiga y él mi hermano — me dijo Tania esa misma tarde, su amiga había reclamado por la presencia de Mich