Dalia se las trae ¿No? Comenta, comenta
Anna.-Anna salió de la oficina con la mirada fija en la puerta, desde afuera podía ver las dos siluetas que se encontraban dentro, dio un suspiro para luego caminar hacía el escritorio de Emily, al llegar no la vio la hora marcaban doce con treinta.— Es hora de almuerzo, que raro que no me esperó –Anna se encogió de hombros y dio vuelta para irse, cuando la risa de Emily la detuvo giró de nuevo y vio la puerta de Daniel semi abierta, la joven iba a retirarse, pero la curiosidad la carcomía, de puntillas se acercó mirando por la pequeña rendija y su quijada casi cae al piso, su amiga estaba sentada sobre el regazo de su jefe dándose besos. – ¡Lo sabía! –Dijo Anna en un susurró, se apartó de la misma manera y salió de la oficina sonriendo.(…)Ya en el taxi Anna observaba el folleto que Derek le había entregado, sus labios de curvaron en una sonrisa llena de ilusión, pensaba que por fin su jefe volvería a ser el mismo de antes amable, generoso ese que tanto ella recordaba y que creyó q
Anna.-Después de ir a la universidad Anna se dirigió a una oficina inmobiliaria, era hora de rentar una casa para ella y su abuelo, todas las opciones que le mostraron eran perfectas, pero eligió una que quedaba cerca de la empresa y de la universidad, también de fácil acceso al centro de terapias de su abuelo. Sin dudarlo firmó el contrato y cuando vio las llaves en sus manos no podía creerlo, por fin ella y su abuelo tendría su propio espacio, no estaba lleno de lujos pero era de ellos.— ¡Bubu, llegué! Te tengo una… dos sorpresas –Anna se sorprendió al no ser recibida por su abuelo, la habitación del hotel no era muy grande, cuando se acercó a la cama su abuelo estaba dormido, pero en el fondo Anna sabía que algo no andaba bien. –Bubu, despierta. –Pidió Anna, pero Don Braulio ni siquiera se movió. – ¡Abuelo! –Dijo en un tono más fuerte y aun nada acerco sus dedos para constatar si respiraba, fue una sorpresa darse cuenta que no y el pánico se apoderó de ella, marcó rápidamente el 9
Anna.-El delicioso aroma del café se coló por las fosas nasales de Anna la danza del aceite chispeando en el sartén emitiendo el olor a tocino recién frito la hizo despertar, abrió los ojos de a poco vio una imagen caminando por su cocina, pensó en lo último ¿mi cocina? Terminó de abrir los ojos, Anna se sentó y de inmediato un pequeño dolor en la parte baja de su espalda la hizo arrugar el rostro.No pudo evitar soltar un bostezo, rápidamente puso las manos sobre su boca cuando sus ojos se fijaron en el hermoso dorso desnudo que estaba parado frente a su cocina, un pañuelo reposaba en su hombro mientras Derek manipulaba la sartén como todo un experto.— ¿Sabe cocinar? –Fue lo primero que pensó, era todo un espectáculo verlo en esa faceta, negó reprochándose mentalmente de inmediato porque no sabía que le estaba pasando, sus pensamientos deben estar con el hombre con el que… recordó en ese momento que había olvidado avisarle a Orión, y que el hombre seguramente habrá ido al hotel.Ann
Dos Meses Después.-El abuelo de Anna ya estaba más recuperado los primeros días estuvo muy amargado y gruñón al tener que quedarse todo el día en cama, pero su semblante impresionantemente cambió cuando Derek contrato a un enfermera que lo atendiera para que Anna pudiera enfocarse en sus estudios y en su nuevo cargo en la empresa.Ella no estaba muy convencida al ver a la exuberante pelinegra encargarse de cuidar a su abuelo, era del tipo de mujer que Derek solía cogerse, de hecho Anna la recordaba, la había visto o mejor dicho escuchado gemir con fuerza como una foca mal herida mientras se acostaba con su jefe. Pero sin duda Karina como se llamaba la mujer había mejorado el estado de ánimo de su abuelo por lo que a regañadientes aceptó que se quedara.Mientras tanto Anna disfrutaba de los días que tenía clases, había olvidado lo que sentía estar sentada en un salón lleno de estudiantes, cada clase la recibía con una gran sonrisa y absorbía todos los conocimientos que le impartían al
Por otro lado Derek se sentía miserable, había reservado la habitación frente a la de Anna, cuando ella insistió en revelar su rostro se llenó de pánico aún, aun no estaba preparado para descubrir su identidad ante Anna.Pasó mucho tiempo pensando y había elegido conquistar a Anna como Derek Morgan y una vez hecho era cuando le diría toda la verdad, tal vez era lo más patán del mundo, pero no deseaba ser rechazado no cuando cada vez que estaba cerca de ella cada fibra dominante de su cuerpo se activaba y no podía evitar estar entre sus brazos de nuevo.A la mañana siguiente.-Dando uno golpecitos en su escritorio Derek observaba con gran atención la puerta de su oficina esperando a que Anna llegará, intentaba concentrarse en los documentos que tenía frente a él y cada tanto miraba su reloj, sabía que estaba en clases, pero no olvidaba la imagen de ella caminando y sonriendo junto al chico en la universidad.— ¡Suficiente Derek! Pareces un adolescente esto no es lo tuyo –Volvió a centra
Anna.-Después del desagradable encuentro que había presenciado en la que ahora es su oficina también con su jefe y su… novia, Anna lo miraba de reojo aún sorprendida de que Derek le hubiera pedido disculpas por semejante escenita, estaba molesta aunque no sabía realmente si era por el poco respeto que su jefe le tiene a su lugar de trabajo o si era por lo que la tal Dalia tenía entre sus manos.De inmediato eliminó el segundo pensamiento, no tendría por qué estar celosa, la Anna adolescente que estaba perdidamente enamorada de Derek Morgan y la que siempre imaginaba como sería su boda con él sí, seguramente si estaría celosa. “Definitivamente esos sentimientos no pueden volver” pensó de inmediato.— Anna regreso un momento voy a la oficina de Daniel, los contratista enviaron algunas modificaciones sobre la construcción en Japón por favor échales un ojo— Seguro –Respondió Anna sacándola de sus pensamientos, lo siguió con la mirada hasta que desapareció por la puerta verlo moverse es t
Anna.-La joven observó y notó que ya era hora de retirarse de su trabajo, estaba con el tiempo justo para cambiarse e ir a la fiesta de la facultad a la que Chris la invitó, de reojo observó a Derek, inmerso como siempre en un mar de documentos, desvió un poco la mirada, tenía la camisa arremangada hasta el codo, la corbata de color negro y gris con franjas en diagonal estaba doblada y colocada a un lado sobre uno de sus hombros, con los brazos apoyados sobre el escritorio su espalda y sus bíceps se notaban más ajustados, musculosos, poderosos “Hasta concentrado se ve jodidamente sexy, seguramente uno de los padres de este sujeto debió haber sido pariente de un dios del olimpo, nadie puede ser tan perfecto físicamente” pensó Anna.— Sé que soy atractivo Anna, pero deja de mirarme como si fuera un pastel de chocolate gigante –Dijo sin apartar la vista de los documentos.— Yo… –La joven rodó los ojos con fastidio, aunque estaba avergonzada por haber sido pillada, detallando el imponente
Derek.- — ¿Una fiesta? ¿En el campus? ¿En serio? –Mientras Derek seguía al taxi que llevaba a Anna se cuestionaba y hasta se arrepentía de haberla metido en esa universidad, apretó el volante con fuerza hasta que los nudillos se le volvieron blancos. –Seguramente fue el idiota con el que la vi el primer día, pero será mejor que ni se atreva a intentar conquistarla.Unos minutos después Derek se estacionó cerca del lugar donde se llevaba a cabo la dichosa fiesta, cuando vio que un chico rubio y ebrio se acercó a Anna estuvo a punto de bajarse e ir a socorrerla, pero su idea fue desechada cuando vio saliendo al mismo hombre con el que la vio la vez anterior y un remolino cargado de ira y celos comenzó a formarse en su interior.Derek observaba lo a gusto que se veía Anna con él y luego de haber rechazado su propuesta de verse esa noche la frase “OLVIDATE DE MI” se repitió como un eco y su mayor temor se estaba desarrollando ante sus ojos.— A ella le gusta –Dijo apretando los dientes co