Con una guía tan sexi cómo no ganar, Dafne cada vez más cerca del final.
Cap. 46 Más obstáculos que vencer Livana veía la competencia, todo le estaba saliendo bien a su cuñada y eso le motivó para llamar a su hermano Giacomo y a Lauren. —Deseo que vengan. Era hora de poner en orden todo en sus vidas, Lauren no quería confrontaciones con nadie y menos conociendo a Giacomo que adoraba sus raíces y perder eso sería para el doloroso y cuando vio que su hermana lo esperaba con una pasta le encantó: —¡Pasta! Hace tiempo que no pruebo pasta, con lo de la dieta de Nicole…—decía emocionado. Lauren veía todo con más calma, solo ella sabía la verdad, al menos en parte… Tomó asiento y les contó a sus hermanos: —Estoy enseñándole a Bruno hacer pastas, tiene talento. —Es tu hijo hermano—decía Giacomo—es una bendición, tener una niña lo es más, porque las mujeres son rosas en el rosal de la vida. Admiraba a su hermano, solía darle a sus locuras cierto aire acertado. —Coman, mis hermanos…—expresó Livana y comenzó a llorar—porque para mí siempre lo serán. Giacomo
Lauren estaba rodeado de periodistas y muchos de ellos le hacían preguntas, a su lado estaba Nicole calmando los ánimos de todos: —Por favor, se explicará todo. Lauren les dijo: —Debido a que información privada mía y de mi esposa salió a la luz, es mi deber dado que ella está concursando aclarar las cosas. Dafne contenía el aliento, ¿qué podía decir de todo eso? Estaba de nervios. —Todo es cierto. Los jueces la miraron sorprendidos y la misma Dafne lo estaba. —Lo cierto es que cuando conocí a Dafne Daniels, había salido de una relación tortuosa con Celia y eso produjo en mi inseguridad. Celia: ¡Qué! Dafne: ¿Inseguro por dónde? Jueces: Impactados y mudos. Lauren continuó para decir: —Dafne llegó a mi vida cuando no lo esperaba y… le propuse una relación, pero le hice firmar ese contrato por miedo a pasar por una situación similar a la pasada, Dafne estuvo conmigo cuando Celia me agredió, me apoyó en mi rehabilitación y aunque firmó ese contrato se ha ganado cada momento a m
Tenía el turno diez, Elisa el turno 8, ella se estiraba y hacía ciertos ademanes de práctica, Dafne estaba con una bata puesta y no dejaba ver nada, se sentía tensa, escuchaba las diferentes músicas, algunas cantaban y lo hacían bien, otras bailaban y hacían coreografías. Cuando le llegó el turno a Elisa, pusieron una música de jazz y ella comenzó a moverse al son de esa con una destreza envidiable, daba saltos y hacía sonar sus zapatos con destreza, desde donde estaba podía ver a los jueces muy receptivos a sus movimientos y gracias. Pronto sería su turno y solo esperó que todo saliera bien, escuchó los aplausos y vio salir a otra de sus compañeras a cantar una vieja canción de Sinatra, ahora deseaba volar y Elisa se le acercó: —¿Qué tal lo hice? —Genial, envidiable. —Gracias, es como descargar la adrenalina del cuerpo. Pronto llegó su turno. Lauren había ido a apoyarla, muchos tenían opiniones divididas, algunos estaban con una u otra candidata y él no sabía qué esperar, hasta
Lauren y su hermano llegaron a casa, encontraron a Bruno jugando solo en la sala y él se le acercó: —Bruno, ¿todo bien? —Sí, papito, tío. —Campeón—lo acarició—¿y tu hermanita? Bruno les respondió: —Sue la llevó al parque. —¿Qué?—miró a todos lados—¿por qué no te llevó a ti también? —Ella dijo… que no podía porque se le dificultaba ir con los dos. Eso le pareció raro y corrió a la habitación que ocupaba la empleada y vio que sus cosas no estaban, solo había una nota que decía: “No digas nada a nadie o tu hija pagará las consecuencias, solo haz lo que se te diga” Entonces musitó aterrado: —Se llevó a mi hija. Corrió y le dijo a su hermano: —Se la llevó, se llevó a Sofía. —¡Debemos de llamar a la policía! Lo detuvo: —¡No! Dicen que le van a hacer daño a Sofía. El corazón de Lauren se apretó en esos momentos, Bruno lo miraba aterrado, sin poder entender la dimensión de lo que estaba pasando. Dafne estaba entre las finalistas e iba por el gran título, Elisa igual, podía se
Bruno lloraba desconsoladamente y Livana se le acercó a decirle: —Encontraremos a tu hermanita. —Debí detenerla… Ella es chiquita. Julia miraba todo con desesperación y entonces pensó en la única persona que podía ayudarlo usando sus contactos del lado oscuro y se apartó de todos ellos y marcó el número de Rossi. Florentino vio el número, ya se esperaba esa llamada y cuando contestó: —Julia. —Florentino ha pasado algo terrible, raptaron a Sofía… la hija de mi hijo Lauren, ¿puedes ayudarme? —Por mi hijo hago lo que sea, Julia, en eso estoy ahora—le colgó. Había dicho su hijo… Lauren era su hijo… miró a Livana atendiendo a sus hijos y a Bruno, sintió un alivio de que se haya sabido esa verdad. El lado oscuro de Rossi El auto se estacionó en un barrio de mala calaña, unos sujetos de pinta dudosa al verlo reconocieron a un patrón, como le decían y se fueron apartando. El hombre de Rossi le hizo una seña a un sujeto que estaba en una esquina y este le hizo una seña, entonces le i
Lauren lo pensó mucho, lo cierto es que si alguien podía ayudarlo era ese sujeto y tenía miedo de cruzar la raya pidiéndole favores a su… padre, hasta le costaba decirlo, era complejo. —Esto lo hago por ti mi preciosa Sofía, porque te amo Dafne y Bruno, son mi familia y debo cuidarlos. Marcó a Rossi… Su voz se escuchó fuerte y clara: —Lauren, dime ¿qué cosa pasa? —Raptaron a Sofía, mi hija, no sé qué hacer. —Entiendo, ven para hablar sobre el tema. Lauren tuvo que ir a casa de Rossi que lo esperaba con vino, lo primero que hizo es darle una copa de vino que se tomó de una, ver a su hijo derrotado, cansado y sin respuestas le dio rabia. —Estoy en búsqueda de mi nieta. —¿Entonces lo sabe? Él asintió, Lauren le dijo cansado: —La he buscado y no… No sé dónde está mi bebita—su voz se quebraba—es que no entiendo. —El mal no se entiende, son cosas que nos pasan y debemos estar listos para enfrentarlas. Lauren le comunicó entonces: —Me dieron una lista de posibles lugares en donde
Lauren veía a los bebes, muchos de ellos vendidos irónicamente por sus madres, era de terror, entonces le preguntó a Florentino: —¿Qué haremos con ellos? —Son nueve niños, mi abogado ya fue informado, veré que me sugiere, allanamos los tres sitios que nombró esa mujer y no hay nada… Le pasaban un informe de Diego Baker, entonces leyó: —Este Diego Baker trabajó durante 15 años para Baby Dream, como asesor jurídico, luego de lo pasado con Dafne hubo muchos despidos y algunas desapariciones, se casó hace 8 años con Elisa Mateo, hace poco tuvieron a su primer bebe. Lauren se lamentó en esos momentos: —Lo tuve varias veces frente a mí y no pude darme cuenta de nada. —Pero él se dio cuenta de ti, se tomó el trabajo de investigarte, quería congraciarse con Baby Dream de nuevo… Cuando pasó lo de Judd Gables se removió todo este asunto y cayeron algunas cabezas, no todas… —Entonces el sujeto siguió con eso… —Eso parece, la última vez que se supo de él fue cuando llegó a un aeropuerto e
Les dieron a cada candidata unos obsequios de los auspiciantes, además de set de maquillajes para la gran noche, perfumes, un álbum de fotos profesional para sus futuros proyectos. Elisa abrazaba sus obsequios, porque eso era lo único que tenía en esos momentos: un set de maquillaje de una renombrada marca, sus fotos, algunos obsequios de cierto valor y para sorpresa de todos se elegiría en esa velada a la más Fotogénica de las candidatas: —El premio para la más fotogénica del certamen es para…—se escuchó el redoble—Dafne Montessori. Muchas aplaudieron emocionadas por ese hecho: Le dieron una banda y una placa con una de sus mejores fotos y en letras doradas las palabras Miss Fotogenia y un set para tomar fotos de alta calidad y un premio de 5000 dólares. —El premio para la candidata más talentosa es para…—más redobles—Elisa Baker, con su Tap del corazón. Elisa se levantó emocionada a recibir su premio. El premio consistía en un curso en la escuela de arte durante un año con tod