—Estamos prontos a llegar Clark, nos quedaremos un par de horas y volveremos, hemos estado fuera mucho tiempo. Usted debe descansar.

Entramos al lugar, él había dicho que era un amigo, pero estaba tan sorprendido como yo, al parecer su amigo había invitado a muchos otros amigos.

—Clark, creo que es conveniente que nos regresemos a casa, hay muchos hombres aquí y su atuendo llama mucho la atención.

—¡No!, es decir ¿por qué quiere hacer eso? No puede quedarle mal a su amigo, no solo porque considera que por estar embarazada no puedo usar prendas con escote en los senos. Por lo menos entremos, lo saluda y nos iremos, será menos descortés de ese modo. No perderemos la venida hasta aquí, además se me antoja probar los platillos. ¿No le gustaría?.

—No, pero si usted quiere hacerlo, no puedo negarme, vamos a buscar a mi amigo y después comerá lo que desee. ¡Allí está!.

—Hola Frederick, —saludó Ivanov—. Gran fiesta hermano, no me mencionaste nada sobre esto.

—¡HEY! Miren quien está aquí, el