—No te dejaré a solas con él para que lo beses.—¿Son celos? —Star se pone divertida.—Por supuesto que no, solo intento cuidarte.—Si claro, solo eso… —Super la interrumpe saliendo de la casa.—Lo lamento amigo, pero Star y yo nos tenemos que ir, planeamos otro día para pasar tiempo juntos. —Se acerca a mi con una sonrisa y ofreciendo su mano.La observé por unos segundos y luego se la estreche.—No creo que pueda otro día, era hoy o nunca. —Aprieto mis labios lamentándolo—. Es que trabajo demasiado —le explico.—Oh claro, lo entiendo.Nos soltamos y luego nota el caucho pinchado.—¡No puede ser, mi papá va a matarme! El auto es nuevo —se queja.Tenía ganas de reírme un poco.—Mierda amigo, lo siento —dije y examino el caucho.—¿Qué le habrá pasado? —indaga él muy inocente.—Tal vez una piedra o un clavo, pues mira el terreno, no es un asfalto liso —responde Rocky.—Joder… Creo que no podremos salir hoy linda —le dijo a mi Estrellita y eso me puso rojo.—Ross, tus orej
—Si, si. —Meg rueda sus ojos como si fuese dramático—. ¿Te das cuenta que hemos dejado a un vampiro con un humano solos adentro? Es nuestra responsabilidad si está en nuestro terreno.—Yo solo me ofrecí de hacerme cargo de Star, no de tu zoológico Meg en donde uno de los animales quiere comerse a otro animal.—Super no es parte de mi zoológico —se cruza de brazos indignada.Star insiste con su puchero y yo cedo.—Solo lo aceptaré para que lleven a Super a casa y en lo que reparé el auto, se lo llevo.—Pero no sabes dónde vive —dijo Meg.—¿Bromeas? De tanto que lo veo, distinguiría su olor en una avenida.—Pero podría parecerle raro, ¿no crees? —insinúa Star.—Cierto, así que le preguntarás donde vive y esa será nuestra defensa —concluí y estuvimos de acuerdo.Luego entramos a la casa y Damon estaba muy cómodamente hablando con Super, eso me sorprendió demasiado.—Ellos ya se conocían, no es la primera vez que saldríamos los cuatro —me susurra Meg.¿Y me lo dice ahora?Habí
La acariciaba con mi dedo índice, era lento y suave, deja de verme y se concentra en la película, también saca su mano y me permite tocarla, lo sé, porque abre un poco sus piernas para subir un poco más mi mano.Yo seguí mirándola, quería ver cada gesto que hacía con mis toques. Nadie se daría cuenta, están muy concentrados en la película, tal vez solo Meg y Damon nos escucharan, pero está en ellos prestarnos atención o ignorarnos.Porque la verdad, no me importan los demás.Llevo mi mano más allá dentro de su vestido y tocó su braga, con mi dedo medio acaricio el medio de sus labios sobre la tela, podía sentir ese calor húmedo que emanaba su cueva.Ella se remoja los labios, le gusta y sé que quiere más.—Este es tu castigo nena. —Le susurré—. Eres mía y de nadie más, vuelves a poner en duda eso y te castigaré.—¿Podemos correr a todos y quedarnos solos? —pide en susurro que podría ser un gemido exquisito.—Se irán cuando acabe la película —le aseguré.—Pero Ross… —me mira.
—Tienes razón —suspiro.Solo faltaba eso para dejar de ser terco con el otro asunto de dejarla en paz.—¿Qué querías probar Ross? —Que no soy un loco posesivo adicto al control. —admito dejándome llevar por su encantadora voz.Es tan hipnotizadora que parece solo que me hace decir la verdad.—Pero si eso es lo que me encanta de ti, no lo sabía hasta que dejaste de serlo, y aún así me gustaría llevarte la contraria por diversión. —Se ríe acariciando mi mejilla.—Eso es muy tóxico nena y sé que debo controlarme, porque no me gustan esos complicados dramas de adolescentes.—¿Ah no? Entonces no me digas que no puedes estar conmigo porque parecerás que estás en un drama adolescentes.—Tienes razón, no lo diré nunca más.Ella nunca lo entendería, así que solo le daré la razón, no tengo permitido contarle lo que sucede y tengo que seguir órdenes, aunque no sé si cumpliré la orden de alejarme de Star.—Y quiero que me detengas a qué yo misma me ponga en peligro, soy muy terca e imp
Regreso al frente de ella con una bolsita y estaba más que lista, estaba desnuda y sus piernas estaban algo temblorosas.—¿Te encuentras bien? —Me siento a su lado y ella también se sienta.Tiene la cabeza agachada y huelo que tiene vergüenza.—Perdón… es solo que.—¿No estás lista?Todo iba a estar bien.—¿Qué? No, estoy más que lista, por favor.—¿Segura? Algo no andaba bien.—Si no lo haces tú, lo haré yo.Esto es un dilema, ella está insegura y si hago algo puede que se arrepienta de hacerlo, pero si no lo hago, sentirá que no la deseo o se enojará.—De acuerdo.Decido hacerlo, me levanto y me quito el pantalón, abro el paquete de condón y me forro el falo.Ella se acomoda boca arriba en la cama y yo me subo a ella con delicadeza, tal vez no sea su primera vez, pero es nuestra primera vez juntos, así que la trataré como una reina, por lo que será lento por ser nuestra primera vez juntos, porque la quiero.—Mientras esté cerca de ti, no necesitarás esto. —Le quite el
Caminé de un lado a otro, esto está mal, yo no debí quitarle la virginidad, creí que ya no lo era, que lo había hecho con otro y por eso no había problemas de hacerlo, pero si era virgen, pude evitarlo, esa virginidad le pertenecía a su mate.Claro que sí lo hubiese hecho antes, nadie iba a culparla, puesto que no sabía del matrimonio, pero yo sí sabía y joder.—¿Estás bien? —se preocupa por mí y se levanta desnuda.—Cúbrete Star. —Miré a otro lado.—¿Qué pasa, Ross? —Que eres virgen, eso es lo que pasa. —Me alteró.—¿Y que creías? ¿Qué ofrezco más que solo compañía?—¿Qué? —no logro entender.—Como dijiste que debía cobrar por salir con chicos, ¿acaso creíste que también era en lo sexual?—Eso lo dije porque estaba celoso y quería que te quitarás lo que tenías puesto.—¿Entonces por qué pensaste que no era virgen?—Porque siempre fuiste adelantada mentalmente a todo.—¿Y perder mi virginidad para una experiencia más y con alguien a quien no quiero me hace ser inteligente
Me acerqué sentándome del otro lado de la cama dándole la espalda a ella, no se escuchaba nada, supongo que estará dormida, esto es muy infantil de mi parte, habla de una vez Ross.—Star, yo… —Me giro y ella me abraza de inmediato.Se aferra a mi como si me pidiera que no me fuera, por alguna razón eso me hizo feliz, porque me estoy complicando tanto por los demás cuando solo importamos ella y yo, y que queremos estar juntos.—Perdón estrellita, he sido un total imbécil y no me detengo —me desahogue.—Gracias por cuidarme, no eres ningún imbécil, yo debo valorar lo que haces, no estoy acostumbrada a que alguien se preocupe de esa manera por mí, lamento si te hizo sentir mal darte mi virginidad como si hubiera cometido un error, pero Ross, estoy consciente de lo que pasó.POV’StarNo actúe de la manera que debía, desde hace rato sabía que Ross se sentía inseguro al estar conmigo y enojarme de esa manera no iba a solucionar nuestros problemas, con eso no lo iba a hacer entender qu
—Miedo de sentir de muy cerca como tú corazón se rompía en mil pedazos, ese beso… solo me hizo más fuerte Star para estar para ti, tal vez si no hubiera sucedido lo del beso, no te hubiera consolado por cobarde, porque no hay nada en este mundo que más me duela, es verte mal Star, si tú caes, yo caigo y solo con ese beso… sentí una revelación, que cuando tú caes, yo te ayudo a levantarte.—Yo también quiero estar para ti Ross. —Lo besé.Nuestro beso se vuelve más intenso hasta que él lo detiene, espero que no sea para arrepentirse de nuevo.—Pero si vamos a estar juntos, tengo una sola condición.—¿Una condición? Meg dijo que sería fácil coger contigo. —bromee.—¿Solo me quieres para eso? —pregunta divertido.—Bromeó. —Perfecto, porque quiero algo serio contigo. —besa mi frente.—También yo. —Cierro mis ojos para disfrutar de sus labios en mi frente—. ¿Cuál es la condición?—Nadie puede saber lo nuestro y antes de que digas si es por algún ganado que tenga, no es así, nadie