CAPÍTULO 12. ¿SE CONOCEN?

Cristian ladeó los labios y lo miró a los ojos.

—Creí que después de las nueve de la noche, ya no te daban permiso de salir —se mofó—, no quiero que nos vayas a arruinar la noche con tus quejas o tus achaques de viejito gruñón.

Carlos Alejandro rodó los ojos.

— ¿Viejo?, ¿me llamas viejo? —lo enfrentó—, sabes muy bien que no salía porque no había quien se quedara con mis hijos, pero desde que está Briana, recuperé mi vida social.

—Claro, solo sales cuando vas a cerrar algún negocio —se burló—, yo estoy invitando a mi amiga Briana a divertirnos, quizás a bailar, ya que a ti no te gusta.

Briana se sorprendió, además que ahora era Cristian quien la tomó de la mano.

— ¡Basta! —pronunció bajito—, dejen de pelear, desde que llegamos aquí, no lo han dejado de hacer, ¿no pueden llevarse bien? —cuestionó mirándolos a ambos.

— ¡No! —respondieron al mismo tiempo.

—Me saca de mis casillas —se quejó Cristian.

—Pareces toda una señora reclamona —Alejandro ladeó los labios y comenzó a reír. Curiosame
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App