Sarah siempre ha tratado de olvidar lo que vivimos cuando Connor murió, todos se desesperaron y creyeron que nunca me encontrarían cuando me fui. Ella ha logrado dejarlo atrás, yo no podría olvidarlo nunca.— Sarah, no puedo entenderlo del todo pero sí que se cómo se siente estar en medio de tanta mierda y también se lo que querer alejar a todos de ti…— suspiro tratando de enviar a lo más profundo de mi cabeza los recuerdos.— Lo siento Brook…— murmura una vez más y suspiro.— No importa… solo no hables de Zero sin saber…— ella asiente y luego suspira una vez más.— Pero no voy a perdonarle lo que le hizo a Cameron, es solo una niña Brooklyn…— con la mención de la pequeña mi cuerpo se tensa y suspiro.Tampoco crea que pueda olvidarme de ello tan pronto, no voy a olvidarme de esas niña llorando porque el no pudo asistir a verla. Suspiro y asiento.— No creo tampoco poder olvidarme de eso…— ella asiente satisfecha con mis palabras y se recuesta al espaldar del sillón.— Bien, solo querí
Zero.Me remuevo adolorido por la posición en la que me encuentro y por alguna otra cosa que no recuerdo, pero que seguro es causante del dolor, cuando me incorporo y veo a mi alrededor no sé exactamente donde estoy, pero no me importa, el recuerdo vago de haber estado en un bar bebiendo me asalta y sonrió sin ganas.— La lucidez no es lo mío…— murmuro sintiendo la lengua extremadamente pesada.Abro la puerta del auto y salgo de este mirando a mi alrededor, no tengo idea que hora es, ni me importa solo quiero volver a perderme y no sentir una mierda lo que llevo en el pecho y no me deja respirar. Camino algunos pasos, notando que hay un bar a unos cuantos metros, meto las manos en mi bolsillo y saco algunos billetes, necesito meterme alguna mierda, algo que me haga olvidar y no seguir jodiendome.Camino en esa dirección y en cuanto llego a la puerta un sujeto enorme se pone en mi camino.— Niño bonito ¿otra vez aquí? — sonrió y me encojo de hombros— Solo quiero entrar y beber alguna
Dieciocho velas sobre el pastel, todas encendidas mientras gritan y cantan el feliz cumpleaños a nuestro alrededor. Mi gemelo me tiene abrazado por los hombros, la alegría es indescriptible y yo me siento igual que él.Feliz.Cuando finalmente todos terminan con la canción, ambos nos inclinamos hacia el frente y soplamos las dieciocho velas juntas. Y como cada año desde que nacimos mama nos hace foto junto al pastel. Pronto Ash se une a nosotros y mama continua haciendo fotos de todos.Lili toma un poco de crema del pastel y la unta en la mejilla de Niko haciendo reír a todos y ganándose una mirada asesina de mama, en seguida se disculpa y se esconde detrás de ambos.— vayan todos para allá y déjenme cortar el pastel… venga ya…— nos apura mama alejándonos alrededor de la mesa.Todo reímos y caminamos hacia el otro lado del patio, mi hermano eleva el vaso que tiene en la mano y riendo como cada año murmura.— ¡Feliz cumpleaños súper héroe…!— sonrió de lado y suspiro.— ¡Feliz cumpleaño
Kyle.Los minutos pasan y no sabemos nada de lo que ocurre del otro lado de la puerta que da a la sala de emergencias, nos sacaron en cuanto Zero entro en shock porque a Lili le dio una crisis de llanto. Ahora estamos los cuatro sentados esperando que nos digan que ha pasado.Paso mis manos por mi rostro nervioso y deseando que alguien, quien sea salga y nos diga qué demonios pasa. Después de casi una hora de espera, la Dra. Que nos recibió sale con expresión preocupada.— ¿Están con Zero Evans? — asiento y de inmediato nos ponemos en pie.— ¿Cómo está? — pregunta Lili ansiosa.— Pues es complicado, tiene una intoxicación por drogas y alcohol, — mis ojos se abren como platos al escuchar aquello y no puedo ni creerlo — Por los efectos tuvo que haber inhalado una gran cantidad de cocaína en muy poco tiempo, en adición a esto el nivel de alcohol en su sangre es sumamente elevado — suspira y nos ve de uno en uno — tiene una costilla fracturada, la nariz, y varios cortes en la cara tres de
Desciendo de la camioneta de Kyle con el corazón martilleando en mi pecho, no logre venir temprano en la mañana porque mama me acompaño a casa y decidió quedarse un buen rato conmigo, luego la lleve al aeropuerto y Kyle me dijo que vendría por mí, cuando nos vimos ninguno de los dos dijo mucho, solo nos abrazamos con fuerza y nos subimos a la camioneta.— ¿Estas bien? — pregunta una vez rodea la parte delantera de la camioneta y se pone frente a mí.— Sí, estoy bien…— Brook…— sostiene mi mano — Zero se ve mal…— asiento y suspiro.— Tranquilo Kyle, estoy lista para esto…— Kyle me observa como si fuera una niña a la cual está a punto de mostrarle un monstruo.Sonrió tratando de animarle, sin hacerle saber que dormí con más de un monstruo y que se exactamente como lucen y como son capaces de dejarte cuando no les das lo que quieren. El suspira y camina junto a mí, mientras nos acercamos a la entrada del hospital.Una vez dentro, los pasillos blancos vuelven a recibirme y la presión en m
Brook.— El trabajo deberán entregarlo la próxima semana, no quiero retrasos — nos pide el profesor por décimo octava vez en lo que va de hora — bien pueden irse, nos vemos la próxima semana y no olviden el trabajo — nos recuerda una vez más.Recojo mis cosas y salgo del aula dispuesta a tomarme un descanso antes de mi próxima clase. Mientras ando por el pasillo de la universidad diviso a lo lejos a los Smith, Kyle y por supuesto a Zero. Mi corazón se acelera y se comprime al verlo sonreír, suspiro y desvió tanto mi mirada como mis pasos. Hace casi tres semanas que le dieron de alta de la clínica, volvió a la universidad un par de días después y desde entonces es como si ninguno de los dos existiera para el otro.Sus heridas ahora son solo un vago recordatorio de lo bajo que cayo y de lo que paso, apenas y si tiene algún moretón, la argolla en su labio regreso, el piercing en su ceja también y los túneles siguen allí, nada cambio aparentemente después de tocar fondo. Aunque ambos sabe
El agua cae sobre mi cabeza mientras mis pensamientos me torturan y las puntadas en mi cien se incrementan, desde que llegue a casa el dolor de cabeza se ha incrementado y aunque ya me tome un calmante siento que explotara en cualquier momento. Paso mis manos por el cabello escurriendo el poco baño de crema que le queda y cierro el grifo una vez no ciento más el producto sobre las hebras de mi cabello.Abro los ojos y suspiro tratando de enfocar bien las cosas a mi alrededor, últimamente cada que mi cabeza duele tan fuerte mi vista se pone un poco borrosa. Salgo de la ducha y envuelvo mi cuerpo en una toalla, para luego pasar a secar mi cabello con otra. Mientras salgo a mi habitación pienso en Zero y en su forma en tratarme hoy, frio, distante como si fuéramos dos extraños, como si nunca ninguno de los dos sintió nada el uno por el otro.Me dejo caer en la cama y cierro mis ojos, recordando la última vez que estuvimos en mi cama juntos. ¿Cómo puede ser tan idiota y hacerme a un lado
Zero.Ojos cafés, grandes, expresivos, hermosos. Así son los ojos de Jake… paradójicamente una de las cosas que más me gustan de ella son sus ojos, creo que incluso me gustan más que los míos. Suspiro como un imbécil mientras la veo a lo lejos, mientras conversa con Sarah, Jack y Charlie.— ¿Hasta cuándo vas a jugar a esto? — Pregunta Kyle a mi lado mordiendo una manzana — la extrañas, te gusta, estas muriéndote por volver con ella — continua mientras mastica el trozo de manzana.— No empieces Kyle…— me quejo poniéndome en pie para irme, pero me detengo.Si me voy no poder seguir contemplándola y hacia dos días que no la veía. Evitarnos se ha vuelto el pan de cada día y uno que no soporto tragar. La extraño demasiado y no imagine que iba a ser así. Vuelvo y me dejo caer junto al pesado de mi amigo que me ve y ríe negando con la cabeza.— Estas siendo un imbécil, ¿lo sabes no? — pongo los ojos en blanco y vuelvo a verla.— Lo sé, pero es lo mejor…— me encojo de hombros — no puedo darle