Mordida?

Zacarias se removió ligeramente abrazando más contra su pecho la espalda de la pequeña omega junto a él  mientras enterraba su nariz contra la descubierta nuca. Su olor hacía que dormir fuera más placentero. Ella por su parte respiraba pausadamente indicándole que estaba totalmente rendida. Su pierna entre las de ellas se enredaba por debajo de las delicadas sábanas de seda y no estaba para nada incómodo a pesar de no acostumbrar dormir con nadie, por largas horas.

Pero debido a que la habitación tenía una sola cama, y que después de bañarse y comer algo se habían acostado, él al momento se había abrazado a ella simplemente para relajarse. La noche de acción la dejaría para después, no quedaría mal en el sexo solo por estar cansado, tenía

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