La figura que cayó al suelo estaba sin aliento. Su hermoso rostro estaba sonrojado y su cuerpo temblaba constantemente como si ya no tuviera fuerzas para levantarse.

Su ropa estaba rasgada en varios lugares. Parecía angustiada.

Harvey York, que estaba bebiendo té en ese momento, se volteó para mirar y su expresión cambió al instante.

¿Teresa Thompson?

¿No había regresado a Wolsing? ¡¿Por qué apareció aquí?!

“Será mejor que no te metas en esto”.

Justo antes de que Harvey se pusiera de pie, hubo un estallido de risas horribles con un ligero toque de crueldad proveniente del exterior del patio: "El Príncipe de Briewood, Dennis Parker le gusta esta mujer…”.

“¡Teresa!”.

Harvey tiró la taza de té, corrió hacia ella y la ayudó a levantarse. Preguntó solemnemente: "¿Qué pasó?".

Harvey revisó su pulso mientras hablaba, y luego su rostro cambió ligeramente.

Teresa fue drogada con estrógeno, no con veneno. En ese momento, el cuerpo de Teresa estaba ardiendo y parecía un poco aturdida.