¡Bam!

Pronto, sonó el sonido final de una botella de vino rompiéndose. En ese momento, todos vieron claramente lo que realmente había sucedido.

Vieron a Harvey sacar un pañuelo y limpiarse lentamente los dedos con él.

Los hombres de Luke estaban tirados en el suelo.

Algunos estaban golpeados y magullados.

Algunos estaban convulsionando por todas partes.

Sin embargo, era obvio que ninguno de ellos podía quedarse de pie.

“Ugh, agh, ugh…”. Demi y el resto podían escuchar claramente sus gruñidos de dolor. Era obvio que querían gritar de dolor, pero la conmoción se lo impidió.

Ronald y los altos ejecutivos se estaban escondiendo en el fondo. La esquina de sus ojos estaba temblando, sus rostros tenían una expresión incrédula.

En su mente, la persona golpeada y magullada que debería estar tirada en el suelo en este momento debería ser Harvey, no los subordinados de Luke.

Kait dejó escapar un suspiro de alivio. Aunque sabía que Harvey era fuerte, no pudo evitar preocuparse cuando H