Algunos meses despuésRyan salió de la empresa silbando, encendió el coche y se dirigió a la casa en la que convivía con su novia. Aparcó en la calle ya que Gina quería pasar la tarde con sus padres y el como siempre, trataba de pasar el mayor tiempo posible con ella. Cuando no estaba junto a ella, se sentía incompleto y vacío. Habían sido unos hermosos meses, su pelirroja era cada vez mas abierta y confiaba en el de verdad, se sentía feliz por eso. Cuando creyó que la perdía… no podía ni pensar en eso. Se habían comprometido hace tan solo una semana, le había mandado una foto de los posibles anillos a las amigas de Gina, estas habían discutido en plena videollamada por cuál creían que era el mejor color para su amiga. Al final, no habían servido de mucha ayuda. Ryan le preparó una cena especial, bueno, en realidad le había pedido a su empleada que lo hiciera. Gina aceptó emocionada casarse, casi inmediatamente, llamó a sus amigas y les contó mostrándoles el hermoso anillo. Las chic
Gina sintió como si el le hubiese abofeteado. Se abrazó por el dolor que estaba sintiendo. Creyó que sería una hermosa noticia y el lo catalogaba como un error. —Estoy embarazada, y no es un error— lo vio meditar y jamás, nada lo hubiese preparado para lo que estaba por escuchar.—Todo esto está mal, no puedes estar embarazada. No vamos a tener un hijo, demonios! esto va en contra de todo lo que creo, pero debes abortar!. —¿Qué?— gritó ella conmocionada— ¿cómo puedes decir eso!?—¡Dios mío Gina! ¡No puedes estar embarazada!— ese parecía ser su mantra—¡Ya deja de decir eso! ¿Cómo puedes querer que mate a nuestro hijo?—Tienes que abortar— le agarró de la mano y la fue llevando hasta la puerta principal— conozco a un doctor…—Sobre mi cadáver te desharás de mi hijo— —¡Exacto! —¡No!— exclamó ella furiosa. Se soltó de el y corrió fuera de la casa.El fue tras ella, visiblemente angustiado. Logró llegar a ella antes de que se subiese al coche y la retuvo contra el.—Por favor… te lo r
Fueron dos semanas infernales, Gina no mejoraba ni empeoraba. Estaba igual, Ryan y toda la familia estaba tan angustiada, pero el no perdía la esperanza, sabía que su pelirroja se pondría bien, solo tenía que tener Fé. Agarró su mano y le susurró entre lágrimas—Mi amor… lucha por nosotros, por nuestra hija. Vuelve a mi… solo… vuelve a mi, te lo ruego. Te necesitamos… tu madre… tu madre dijo que nuestra pequeña es igual a ti, que tiene tus preciosos ojos y delicadas pecas. Por favor mi amor. Regresa con nosotros…— casi sin darse cuenta, se quedó dormido, recostado, con sus manos entre las de el. Escuchó la voz de su pelirroja y creyendo que seguía soñando, mantuvo los ojos cerrados recreándose en la armoniosa voz. —Ryan…— dijo la joven moviendo su mano— Ryan…—Pelirroja… ¡pelirroja! ¡Estás despierta! ¡Doctor! ¡Doctor!— dijo el levantándose y gritando hacia el pasillo.—Ryan… el bebé— sollozó ella asustada.—Tranquila mi cielo, nuestra niña está bien.El médico la revisó y le explicó
Cuatro años despuésGina estaba en la galería, exponiendo sus obras. Miró hacia la puerta esperando a que llegara su marido. Este le había llamado un poco mas temprano, diciéndole que no iba a llegar a tiempo, ya que sus reuniones se habían atrasado. En ese momento mantenía una conversación con un coleccionista que le estaba coqueteando descaradamente, aún viendo que ella mostraba de manera orgullosa su alianza de matrimonio. Esa alianza que los había unido a ella y a Ryan legalmente. Solo legalmente, ya que estaban unidos en mente y corazón desde hace muchos mas años.El hombre seguía acercándose a ella, haciéndole sentir ya demasiado incómoda. En eso, escuchó la voz de su hijo mayor que con determinación se posó a su lado y miró enojado al individuo. —No te acerques mas a mi mamá, mi papá se enojará mucho.Gina rio interiormente, le daría un sonoro beso a Marco si no fuese porque el niño se veía demasiado serio; y que su babosa madre lo apapachara y besuqueara, destruiría su porte
PROTECTORA PERSONALUna agente secreto, un abogado exitoso...Sam abandonó a sus padres y hermana para ingresar al servicio secreto.Sin embargo, años después, una de sus misiones como agente puso en peligro a su familia. Por más que intentó protegerlos, quien sufrió las consecuencias fue el hombre del que se había enamorado.Huyó, llena de culpa, pero se fue con mas que el corazón partido, algo que la uniría a su hombre de por vida.Volverá, pero su pasado no la dejará tranquila.La pareja deberá luchar por recuperar la confianza mutua y ser felices de una vez por todas.
Sam estaba exhausta, necesitaba vacaciones. Tenia 28 casi 29 años, pero sentia que tenia 40. Aún asi, no cambiaria esa sensación de adrenalina y desafío continuo.Llegó al hotel, y fue al bar a tomarse algo. Se estaba tomando su segundo vaso de vodka y escuchó a alguien carraspear. —¿Estas sola aquí cariño?— le dijo un rubio, alto bastante atractivo; pero ella no tenia ganas de ligar.—No, espero a mi marido que ya subio a dejar unos papeles—comentó ella tratando de ignorarle y que éste entendiera la indirecta. —La vi bajar del auto y estaba sola. No necesita mentir para deshacerse de mi. Entiendo un no por respuesta. —Habló ceñudo el.Sam se sintió culpable , hace mas tres meses no tenia sexo y su cuerpo le estaba pasando factura.—Disculpe, no se vaya. Tiene razon, soy Sam, mucho gusto.— le tendió la mano ella.—Generalmente no soy tan insistente, me llamo Fernando San... —Sin apellidos,solo nombres...—interrumpió ella.♥️♥️♥️♥️♥♥️♥️♥️♥️♥️♥️♥️♥️ Llegaron a la habitación a trompic
Angelina dio vuelta la fuente para ir a saludar a Ryan por su cumpleaños. Toda la noche pareció que estaba evitándola y ella quería abrazarlo y decirle que le deseaba lo mejor del mundo. Pero cuando llegó a la esquina, escuchó una conversación que habría deseado nunca oír.—Ya lo sé papá, estoy saliendo con ella, además es la hermana de mi mejor amigo. No podía dejar de invitarla.— No tengo problemas con su hermano, ¿pero ella? ¡esa chica es adoptada, por favor! Y encima está enferma. No puedes estar con alguien débil. ¿Entiendes? ¿Quieres que yo me encargue de ella? Debes terminar con ella lo más pronto posible.—¡No! Yo lo haré papá, entiendo perfectamente lo que dices. Es débil. Déjame a mi decírselo, Gina piensa que yo siento lo mismo que ella, pero ya es hora de acabar, como tú mismo lo has dicho. —Bien dicho hijo, tú necesitas una mujer fuerte, no necesitas tener que cuidarla y estar pendiente siempre de ella en caso de que empeore.—Ya entendí papá. Ahora déjame continuar con
5 años después en Florencia, Italia.Angelina despertó lentamente, escuchó una respiración suave a su lado y miró al hombre desnudo que estaba acostado.Ángelo era muy guapo, lo conoció dos semanas antes, en una exposición en la que había participado Fran.Era un excelente amante y no le pedía más de lo que ella podía dar. Conversaron de sus familias, él era un buen amigo y, lo que agradecía, un soltero empedernido. A pesar de haber intimado con varios hombres a lo largo de los años, aún anhelaba sentir esa pasión irrefrenable y amor que había sentido por Ryan. Ryan, quien había roto su corazón sin pensárselo dos veces. Luego de haberlo visto con aquella chica, besándolo; se fue inmediatamente a su casa. Su madre estaba allí y preocupada le había preguntado que le había sucedido. Gina le contó lo que había presenciado y luego de escucharla llorar largo rato, su madre la consoló diciendo que todo era aprendizaje. Primero le preguntó si estaba segura de lo que vio, que tal vez había i