Sebastián
5 años después...
Termino de arreglar los papeles que firme para remodelar la escuela de niños de la manada. Hace dos años mi padre me entrego el puesto de alfa rey en la manada según él, esto distraerá mi mente y funciona a la perfección.
No tengo tiempo para nada aunque debes en cuando la extraño a mi lado, ya ni recuerdo como era su olor, se que es muy poco tiempo desde su muerte.
—Ella no está muerta, —gruñe Orus—Volverá. —Añade.
—Lo se pero es difícil no sentirme triste por no tenerla a mi lado, —le digo.
—Debemos ser fuerte, —murmura para cerrar el enlace.
Después de aquel día cuando salí corriendo al bosque triste por la perdida de mi luna
Prólogo''Ya solo faltan solo minutos para que se cumplan los cien años desde la muerte de la luna que prometió que volvería.La fría noche azota el cuerpo desnudo del alfa rey mientras que este mira la luna en espera de que sean las 12 de la noche para que al fin los cien años se cumplan''—Esperamos tu llegada, —dice mirando a la luna pero mientras el alfa espera del otro lado del mundo en Rusia para ser más específico una joven adolescente se debate entre la vida y la muerte al traer una criatura en su vientre.—Samantha vamos tu puedes. —Incita la doctora preocupada por su paciente la cual cada segun
Sebastián—Alfa los roguer han estado muy cerca de nuestro límite fronterizo —me informa Sam uno de los guardias fronterizos.— ¿Cuántos son? —interrogo.—Dos lobos jóvenes —asiento. Que querrán dos lobos jóvenes en mi manada porque a nadie en su sano juicio se le ocurriría acercarse a la manada del rey alfa sin ningún tipo de invitación.—Bien vamos —me levanto de mi asiento para salir de la oficina que se ha vuelto el primer lugar en la casa manada del cual no salgo. Últimamente me la paso en mi oficina y solo salgo a tomar una ducha, Maiquel mi padre ha hecho todo lo humanamente posible para que salga más y Orus igual me dice que salga porque quiere estirar las patas pero no tengo ganas de hacerlo.Estando fuera de la casa manada mi ropa es empapada por el agua llu
Azzula—Kicky tus amigas te buscan —termino de recoger mi cabello en una cola para mirar a mi padre con una de mis cejas alzada.— ¿Sabes qué las puertas se tocan antes de ingresar? —cuestiono dejando mi mano derecha en el aire estilo diva mientras que cruzo mis piernas.—Soy tu padre.—Y esta es mi habitación, mi área restringida, mi espacio privado, mi madriguera...—Si, si, como sea ya entendí tu punto —sale de mi habitación a veces no sé dónde quedo la madures de este hombre pero bueno supongo que tener 36 años y no parecer de esa edad es un motivo para comportase de esa manera.Mi padre sin duda alguna es un bombón con su cuerpo bien formado por sus estresantes largas horas de gimnasio y su obsesión de que una dieta balanceada es la mejor para verse como él se ve creo
Sebastián— ¡Minimi apúrate!—Ya voy hombre —la escucho decir y luego el sonido de sus tacones resonar en las escaleras, elevo la mirada hasta ella y esta despampanante como siempre.—Ni idea de porque vestirte con si fueras a una fiesta —sermoneó ayudándola a bajar los últimos escalones.—Una mujer siempre debe de estar presentable y más si se trata de la hermana del jefe de los jefes de la mejor empresa de arquitectos —alaga con una sonrisa.—Bien, bien basta de alago, vamos que el jet espera por nosotros en el aeropuerto —salimos de la casa para ir directo al auto el cual lo manejara el chofer.Hace unos días se cumplió el plazo de un mes de estadía en la manada mi luna nunca llego cosa que ha dejado a Orus triste pero le hice prometer a mis padres de que si tienen a
Azzula—Chantall ese vestido sin duda alguna no es tu estilo —hago una mueca hacia el vestido el cual para mi es muy vulgar pero claro, Chantall no entiende eso porque para ella mientras más muestra más hombre llegan a ti y eso para mi es indiscutiblemente inaudito porque los hombres que te ven vestir de esa manera:1-Te ven como una presa fácil.2-La sociedad te juzga aunque a mi me vale muy poco la sociedad pero debo mantener una imagen, se lo debo a Erick.3-Sin ofender cuando una mujer muestra tanto dejando de ser sexual para caer en lo vulgar todos la ven como una ramera que se abre de pierna a cualquiera que tenga un lindo físico y un pito entre las piernas añadiendo claro una coquetería nivel Dios.—Pero me gusta y además está aún buen precio, es el único que queda y se ven mis tetas muy bien &mdas
ErickEscucho la alarma de mi teléfono sonar sacándome de mi sueño devuelta a la realidad, suspiro para pasar una mano por mi rostro y luego estirar la mano para tomar el teléfono y apagar a la alarma para evitar que Azzula se despierte la cual esta dormida a mi lado con su cabello desparramado por todo lado mientras que su mano descansa sobre mi pecho. La admiro por un rato para luego despacio salir de la cama e ir hasta el baño donde me desnudo para tomar una ducha fría y despejar el sueño que tengo.Estando ya aseado y con frescura en mi boca salgo del baño envuelto en una toalla para entrar a mi closet donde me visto con un traje azul marino, una camisa blanca de bajo de este, un pantalón que se ajusta mi pierna del mismo color del traje y peino mi cabello de manera formal para luego colocar un poco de perfume, salgo del closet para acercarme a la cama acaricio el rostro de mi hija y ac
Sebastián—No puedo creer que aún no tengan ninguna información de mi luna —gruño al investigador.—Señor Wolfs las cámaras del centro comercial son de baja resolución por lo tanto la búsqueda ha sido complicada —explica el señor.—Esfuércese más, salga de aquí ahora —asiente y sale de mi oficina mientras dejo salir un gruñido y llevo mis manos a mi cabello el cual desarreglo.— ¿Cómo puede ser posible que no, nos reconozca? —cuestiona Orus con voz lastimosa.—Algo extraño sucede, además no sabemos nada de las reencarnaciones —en esa parte esta de acuerdo conmigo porque es primera vez que vemos una reencarnación.Mi luna al fin la encontré pero también la perdí
Azzula— ¿Enserio tengo que ir a esa fiesta? —pregunto mirando a mi padre a través del espejo mientras me sujeto el cabello en una cola para que verme elegante y sofisticada con el vestido liso hasta mis rodillas con un pequeño escote en los senos y con hombros cubiertos por las cortas mangas que trae.—Cena de negocio —aclara.—Es lo mismo —él rueda los ojos intentando que el nudo de su corbata esté correcto, no, nos vestimos en la misma habitación sino que él vino a darse los últimos toque en la mía.—No es lo mismo y ya te explique el porque debes ir, no lo haré otra vez —suspiro frustrada por mi intento de escapar de esta cenas de negocios. No sé qué rayos tengo que ver yo con todo esto, ni siquiera soy parte de la empresa.—Ven, deja que te ayude con eso &m