CAPÍTULO 131: EL PRECIO DE LA ETERNIDADHazelRealmente no sé qué estoy haciendo aquí. Estoy loca, no hay más. Mi vida es un caos tan grande que no me ha quedado más que recurrir a las criaturas más traicioneras de todas. Las brujas.No puedo dejar de pensar en las palabras de Kael, sé que corro mucho peligro aquí, sé que esto puede ser un grave error, pero… Serena me mira con ojos expectantes, como si ya conociera la respuesta a la pregunta que acaba de hacerme."¿Qué estarías dispuesta a sacrificar por la eternidad con tu Mate?"Trago saliva, obligándome a no mostrar debilidad.—Depende —respondo con la voz firme, aunque por dentro mi corazón golpea con fuerza contra mi pecho—. Dime primero qué es lo que quieren de mí.Serena sonríe complacida.—Directa y pragmática —murmura—. Me gusta eso de ti, Alfa Hazel.Alrededor de nosotras, las otras brujas se mantienen en silencio, como si esperaran la señal de su líder para hablar o actuar.—Lúa es poderosa, demasiado para que simplemente l
CAPÍTULO 132: NO QUIERO PERDERTEHazelLo que menos quiero es pelear con él en este momento. Necesito su apoyo, necesito que confíe en mí y en el plan. Soy consciente de los riesgos, pero no veo otra salida. Si no nos aliamos a las brujas, él las matará y entonces no habrá nada que pueda quitarle el poder a Lúa, mucho menos lo regresará a mí.El silencio pesa entre nosotros, Erik y yo nos quedamos allí, con la distancia de apenas un suspiro separándonos, pero sintiéndonos como si estuviéramos en extremos opuestos de un abismo imposible de cruzar.Sin embargo, cuando le digo mi respuesta sincera, algo en él se rompe. Lo veo en su expresión, en la manera en que sus ojos oscurecen, en cómo su cuerpo se endurece como si acabara de recibir un golpe brutal.—No —su negativa es firme, absoluta—. No voy a dejar que hagas esto.Mis labios se separan.—No es tu decisión.Él suelta una risa vacía, llena de incredulidad y rabia.—¿No es mi decisión? ¡Estás hablando de sacrificarte, de convertirte
CAPÍTULO 133: LA DECISIÓN DEL ALFAErikLa noche es densa y pesada. Puedo sentirla aferrándose a mi piel y erizando mis vellos, pero eso es lo que menos me importa ahora. Todo lo que tengo en la mente son las palabras de Hazel que aún arden como una maldit4 herida abierta que no deja de sangrar.Ella quiere arriesgarlo todo por mí y yo no puedo permitir eso.Camino con pasos firmes por los pasillos de la fábrica abandonada, sintiendo cómo la ira y la determinación se enredan en mi pecho. He tomado mi decisión. No me quedaré de brazos cruzados viendo cómo ella se lanza directo a la muerte. El único que tendría que morir, el único que tiene que hacer un sacrificio aquí soy yo.Las brujas tienen que morir. Las encontraré y acabaré con ellas antes de que terminen de hundir sus garras en la mente de Hazel.Cuando entro en la habitación donde Rosie está con mi hijo, ella levanta la mirada de inmediato, su rostro refleja una evidente preocupación.—¿Qué pasó? —pregunta con cautela, su mirada
CAPÍTULO 134: ACUERDO EN EL BARErikSigo el rastro de Kael con facilidad pues no ha hecho ningún esfuerzo por ocultarlos, como si quisiera que alguien lo siguiera. Lo encuentro no muy lejos, en un bar de mala muerte al borde del territorio. El lugar apesta a alcohol rancio y sudor. Hay pocos clientes, prácticamente todos son humanos que han bebido más de lo que deberían.Kael está de pie junto a una diana en la pared, lanzando dardos con una precisión letal. Su expresión es impasible, pero sus ojos clavados en el tablero revelan que está librando una guerra interna. Su otra mano sostiene un vaso de whisky, el líquido ámbar refleja la tenue luz del bar.Me acerco sin decir palabra y me apoyo en la barra. El barman me mira de reojo, esperando una orden.—Un vaso —digo sin apartar la vista de Kael.El vaso aparece frente a mí en segundos. Lo tomo y doy un sorbo. El licor me quema la garganta, pero no me inmuto.—¿Qué demonios estás haciendo aquí? —le pregunto.Kael sonríe de lado y lanz
CAPÍTULO 135: AHORA O NUNCAHazelRegreso a la manada con el corazón encogido y una sensación de vacío en el pecho que no se disipa. Algo está mal. Lo siento en el aire, en la tensión de los lobos que caminan por la fábrica sin mirarme directamente, en el silencio que se siente tan opresivo en mi pecho. Acelero el paso, pero siento mi respiración entrecortada, mi instinto me grita que algo terrible acaba de suceder.Cuando llego a la habitación, el sonido de mi hijo llorando me hace salir corriendo a su encuentro. Entro sin pensarlo dos veces y lo veo en los brazos de Rosie moviéndose inquieto con su pequeño rostro enrojecido y húmedo mientras ella lo mece con suavidad. Rosie levanta la vista hacia mí y veo el dolor reflejado en sus ojos. No hace falta que me diga nada.—Se fue —susurro, sintiendo cómo las lágrimas queman mis ojos.Rosie asiente y me extiende a mi bebé. Lo tomo en mis brazos y lo aprieto contra mi pecho, inhalando su aroma como si eso pudiera calmar la tormenta que se
CAPÍTULO 136: SOLO RESISTE UN POCO MÁSHazelEl aire en la fábrica se vuelve más pesado y sofocante. El círculo de símbolos que arde en el suelo pulsa con una luz azul fantasmal, y las voces de las brujas se alzan en un cántico cada vez más intenso, reverberando en las paredes de metal como un eco imposible de escapar. Estoy en el centro, sintiendo cómo la magia se enrosca a mi alrededor como una serpiente invisible que me aprieta el pecho y me roba el aliento.Afuera, los gruñidos se han convertido en rugidos y el estruendo de cuerpos que impacta contra las paredes se escuchan como un tambor de guerra. Mi manada está luchando. Lo sé porque puedo sentir el dolor atravesar el vínculo que compartimos, como cuchillas cortando la piel de mi consciencia. Pero no puedo detenerme ahora. No puedo titubear.Serena se mueve frente a mí con gracia inquietante, su cabello oscuro flota como si el aire mismo la elevara. Su mirada es fría y calculadora. La mantiene fija en la mía cuando su voz se fu
CAPÍTULO 137: LA ORDEN DE LA DIOSAErikVoy a matarlas.Esa es la única certeza que tengo cuando cruzo las puertas de la fábrica, con el rugido de la batalla a mi espalda. La manada lucha a sangre y colmillos que chocan en la oscuridad, pero nada de eso me importa ahora. Solo veo el círculo de brujas, la luz temblorosa de su magia, y en el centro de todo, Hazel, de rodillas, con la piel bañada en sudor y la sangre que gotea de su nariz.Serena es la más cercana a ella, será la primera en morir.Con un gruñido me lanzo hacia ella, mi lobo ruge exigiendo su sangre. Siento la energía chispear en el aire, la magia se estremece como si la realidad misma supiera que se avecina un derramamiento de sangre. Mis dedos se cierran alrededor de su garganta.—¡Erik, no! —la voz de Hazel es capaz de hacerme flaquear por una milésima de segundo, pero estoy demasiado cegado por la rabia como para detenerme.Las brujas gritan, pero ninguna se acerca. Son inteligentes. Saben que no tienen oportunidad co
CAPÍTULO 138: YA NO ME DOMINASErikEl rugido de la diosa retumba en mi mente como un trueno que amenaza con partirme en dos. Su orden es un látigo invisible que se enrosca alrededor de mis entrañas y me arrastra hacia Hazel, obligándome a obedecer. Cada fibra de mi cuerpo, cada gota de sangre que corre por mis venas, quiere resistirse, pero el peso de su poder es abrumador. Mi respiración se vuelve errática, mi mandíbula se tensa y mis garras se clavan en la tierra, tratando de aferrarme a algo, cualquier cosa, para no ceder.—¡Mátala de una maldit4 vez, Lycan! ¡Te lo ordeno! —me grita.La voz de Lúa no es un simple mandato, es una sentencia. Siento la orden perforándome como un hierro al rojo vivo, marcando mi carne y mi espíritu con un solo propósito.—¡No! —gruño entre dientes, grito y mi cuerpo tiembla sin control—. ¡No lo haré!—¡Eres mi esclavo y debes obedecerme! —protesta con los ojos echando chispas de la furia.Aun así, veo la preocupación en su mirada, si quiere que mate a