Ubicación: Argentina

Tania siente un gran miedo, sin embargo, Fernando recupera el color y le asegura que está bien. Le explica que es el tratamiento que Julia le dio, que puede causarle mareos y debilidad por momentos, pero que, dadas las circunstancias, se siente bastante bien.

—Fernando, vas a provocarme un infarto —reclama Tania, abrazándolo con fuerza.

—¿Me extrañarás cuando muera? —pregunta él con una sonrisa.

—Claro que te extrañaré, deja de decir tonterías. Además, aún tenemos tiempo si consiguen un donante —responde Tania, pero él la interrumpe.

—No hagamos esto, Tania —indica Fernando, visiblemente molesto.

—Solo digo que… —Intenta continuar ella, pero él la interrumpe de nuevo.

—Sé que me quieres, y que esperas que viva muchos años, pero esta enfermedad es terminal. Aunque encuentren una manera de ayudarme, moriré. Prefiero vivir mis últimos días pensando en cosas felices, no en entristecerme por ver el vaso medio vacío. No soy tonto. También soy médico y sé que, sin import