Ubicación: Argentina

Lisandro parece estar algo molesto, y que Fernando lo siga cuando se levanta de la mesa solo significa una cosa: ya sabe que su hija mayor y Fernando tienen una relación. Tania sonríe, segura de que Lisandro quiere que su hija sea feliz, por lo que no se opondrá. Aunque, pensar en Fernando como su yerno le resulta demasiado gracioso a ella.

—¿Cuándo va a nacer tu pequeño? —le pregunta Tania a Clara, quien se pone de pie de inmediato.

—Sabes que te respeto, pero ni tú ni mi padre me dirán qué hacer con mi vida —responde Clara con firmeza, y su madre, Lisa, la mira con desaprobación.

—Clara, compórtate. Ya no eres una niña. ¿Por qué tratas así a Tania? —le reprende Lisa.

—Es que papá quiere hacerle daño a Fernando. ¿Tú no lo amabas? Sé buena con nosotros y déjanos ser felices —insiste Clara, aunque ya es mayor de edad, a veces se comporta como Amanda.

—¡Tania! —la voz de Lisandro resuena desde la escalera. Todos se giran y encuentran a Fernando en el suelo.

—¿Qué le