— Te lo agradezco Lía.— No tienes nada que agradecer, me estas dejando mucho dinero y pues tomo eso en cuenta — me dijo — contactare con el señor Lund para avisarle que ya te encuentras lista.— Muy bien — le dije ansiosa y cruzando las manos.— Te necesito poner una inyección — me dijo — es para evitar que salgas embarazada.— Está bien.Ella después de llamar por teléfono llegó un doctor que me llevó a inyectarme el anticonceptivo, coloque mi ropa en su lugar y me iba a ir.— Ese método dura un trimestre para que sepa.Yo asentí y le agradecí, después me fui a la oficina de Lía en donde hablaba por teléfono.— Te lo agradezco, ella va a pagar la estancia completa así que no te preocupes.Le dije que quería la mejor habitación y se lo hizo saber a la persona con la que hablaba, una vez que colgó me ofreció asiento.— En la salida te van a entregar una lencería, dado que ya estás aquí pues te la adelanto, úsala ese día y trata de aflojarte un poco — me dijo mientras rec
SAÚLMe encontraba en la sala cuando escuche un grito sumamente fuerte proveniente de la habitación de Lucía por lo que salí corriendo a ver qué pasaba, ella gritaba en el baño y no pensé por lo que entre inmediatamente para ver si se encontraba bien.— ¿Qué sucede?— exclamé cuando recibí un botellazo en mis ojos y maldije hasta los quintos infiernos — ¡Por un demonio, eso duele!LUCÍANo había calibrado bien el agua por lo que esta salió hirviendo como si fuera a pelar una gallina, al gritar no tardó en llegar el señor Saúl pero fui lo suficientemente rápida para tirarle mi botella de shampoo, esto fue suficiente para que él se saliera del sitio.— ¡¡¡¡¡No entré!!!!!— le dije súper asustada — por lo más sagrado no lo haga.— ¿Qué te pasó Lucía?— me preguntó con un tono más calmado ya que me sentía asustada — ¿Te encuentras bien?— Me encuentro desnuda, no pude calibrar bien el agua caliente y salió hirviendo por eso grite — le dije y él se dio la vuelta para salir del baño
— Cálmese querida, quizás en otra ocasión tenemos el desagrado mutuo de encontrarnos y está vez logra ganarme aunque sinceramente lo dudo, carece de materia gris y de audición.Wow cerró con broche de oro, levantó del suelo la bolsa con hielo y me la colocó en el puente de la nariz para luego marcharse. Esa parte de Lucía no la conocía en absoluto y definitivamente me gustaba.— Quita esa sonrisa de idiota que tienes — me dijo Aimee molesta — ¿Quién es esa mujer corriente y vulgar?— Esa mujer corriente y vulgar a como tú le dices en ardor a que te dejo callada, se llama Lucía y no es mi conquista, Adriel me pidió que la fuera a traer y la llevara a alguna de sus propiedades entonces la traje para acá.— ¿Adriel? ¿De dónde conoce a esa tipa y porque la trajo a esta casa?— No sé de dónde la conoce y él no la trajo a esta casa sino que fui yo, dado que me dijo que fuera a alguna de las propiedades que tiene pues tomé la decisión de traerla aquí ya que es la más cercana que hay d
— No pienso darme por vencida y tampoco confiar, a veces hacen actos que parecen de ángeles pero en el fondo son el mismísimo demonio.— Aimee vamos a llevarla en el carro porque ya camino bastante.— Esa a mi carro no sube — me dijo casi gritando y sumamente escandalizada por lo que hable — antes prefiero que me despellejen viva.— Shhh ya baja la voz y no seas tan mala con la pobre Lucía.LUCIAYo llegue adonde se encontraban las personas que había visto desde un inicio y le extendí los paquetes de comida que llevaba, ellos se mostraron agradecidos y cuando mire a un rincón había un anciano.— ¿Qué tiene ese señor? — les pregunté — se mira delicado. Ellos me dijeron que se encontraba enfermo desde hace días y no tenía dinero para comprar medicamentos, me acerqué para ver cómo estaba y lo encontré quejándose del dolor.— Señor vamos a un hospital para que lo revisen — le dije pero se mostró reacio a la idea e incluso fue odioso — permítame revisarlo entonces, soy enferme
No dije nada y seguí manejando, soy desconfiada y testaruda por lo tanto no pensaba cambiar mi opinión de esa chica.LUCIALlegue a la casa y subí al cuarto que se me había designado, tuve que ducharme nuevamente ya que me sentía sucia y no quería ensuciar la ropa de cama tan fina que cubría la misma, logre calibrar el agua a como me gustaba o sea fría y me bañe. Al salir busqué en mi maleta otro pijama pero solamente llevaba un short y una camisa de tirantes para dormir, bueno al menos nadie me va a ver y mañana me levantaré temprano. Me coloqué el pijama y decidí meterme en la cama, no tarde en caer en los brazos de mi amado Morfeo debido a todo lo que hice.ADRIELMe encontraba en la oficina y cuando mire eran casi las once de la noche, cerré todo y llamé a Saúl para ver en donde se encontraba además de adonde había acomodado a la chica.— ¿En dónde estás?— le pregunté y me dijo que en mi casa — ¿En dónde dejaste a la chica?Me sorprendió cuando me dijo que había tomado la decis
Al ver hacia atrás se encontraba Lucía con ropa distinta entonces se acercó tranquilamente a donde nos encontrábamos.— Además en caso de que sea así a usted que le importa, su hermano es lo suficientemente mayorcito para ver a quién mete a este lugar y a quien no.Sabía que la cosa se iba a poner interesante y también Saúl quien se sentó a mi lado para ver el espectáculo mañanero.— Ya te dije ayer que no te metas — dijo Aimee — pero lo que tienes de gorda lo tienes de metida. — Y yo le dije que me metía porque es un asunto que me involucra y por lo tanto me concierne, ¿O acaso no lo recuerda? Genial, aparte de sorda me salió con Alzheimer.Vaya, vaya, Lucía definitivamente tiene agallas para enfrentar a Aimee de esa manera. Saúl me hizo de seña que era el round 2 entonces me puse a reír.— Como que se te están acabando los insultos, gata.— No es que se me acaben lo que pasa que hasta mis insultos son indignos de usted, incluso en ese aspecto hay categorías, desmemoriada.—
— Tú misma dices que el compromiso de Aimee se iba a romper con esa actitud que tiene ya fuera que aparecieras o no, mi hermana no es mala pero cuando se pone de mula no hay poder humano que la haga cambiar de parecer y sus celos son desmesurados.— Es cierto lo que dije pero es imposible no sentirse mal si la manzana de la discordia soy yo, siempre se sabe que va a haber un responsable por algún problema que se desate sin embargo no es agradable saber que esa persona eres tú.— No te preocupes, Saúl ama a Aimee pero también quiere darle una lección. Aunque no lo aparente es un buen tipo y sus intenciones son buenas porque si no lo fueran no permitiría que se acercara a mi hermana ni un poco.LUCIAEra agradable escuchar que un hermano cuida a su hermana, eso era algo que yo no conocía ya que desde pequeña Carlos se encargó de ponerme malos apodos y lo más triste es que yo normalizaba esto pero con el tiempo comprendí que esto no era normal.— Si hay amor de por medio todo se resu
Tengo que reconocer que es una mujer bellísima y la atracción que siento hacia ella es enorme pero al menos quiero que la pase bien antes de que la tome por completo, que sea algo lindo y no traumante, ese es el objetivo que me propuse y lo voy a cumplir.Cuando la mire sonreír mientras hablaba por teléfono simplemente me saco una sonrisa y cuando hizo lo mismo con Aimee sonreí de la misma forma que ella, a la misma vez pensaba que era una mujer sumamente hermosa tanto por fuera como por dentro.LUCIAYo bajé a la cocina cuando sentí un olor terrible que no sabría describir si era quemado o podrido por lo que fui a ver que sucedía, Aimee se encontraba ahí supuestamente cocinando algo que parecía veneno de la más alta letalidad. El señor Saúl no le decía nada porque probablemente no quería lastimarla pero si comíamos eso que estaba preparando posiblemente no sobreviviríamos— ¿Quiere que le ayude con la comida?— pregunté y saque a ambos de su mundo — soy buena cocinando.— ¿Quieres