Sin embargo no había podido progresar como esperaba debido a los despilfarros de dinero que su progenitor hacía pero no podía hacer absolutamente nada ya que aún no heredaba.— ¿Qué tiene que ver eso con la oferta por la chica?— le pregunte con duda.— Ese sujeto tiene fama de derrochar dinero a lo descocido cuando se trata de mujeres pero no es solo eso, oferto por la misteriosa chica.— ¿Cómo te diste cuenta? Por un momento pensé que todo eso era anónimo.— Lo es — me dijo — pero Lía, la dueña de la agencia es amiga mía por así decirlo, ella me habló de que ya ese sujeto había hecho una oferta por la damisela.— ¿Y? — le pregunté.— Ese sujeto tiene mala fama, la misteriosa chica que ya no es tan misteriosa porque averigüe su nombre, no es la primera que desvirga y las otras chicas se han quejado de que es demasiado brutal con ellas cuando las toma entre sus gordos y rechonchos brazos. Utiliza todo tipo de juguetes sexuales y también es sádico.Al escucharlo me preocupé, n
— Tengo algo que hacer — le repetí — luego te explico — le respondí y me marché de la casa.Al llegar a la agencia la recepcionista me hizo pasar a la oficina de Lía quien se encontraba sumamente contenta conmigo y aunque desconocía la cantidad que le habían ofrecido por mi virginidad supongo que era mucho dada la felicidad que emanaba en estos momentos.— Pasa y siéntate — me dijo y cuando lo hice me saco un contrato — Ese documento lo tienes que firmar, léelo y me dices si no entiendes algo.Yo lo hice y ahí se encontraba la cantidad que se había ofrecido y de paso que ya habían hecho el depósito, los requisitos que pedí y de paso los que pidió el hombre, sin embargo, al ver que pedía una semana entera conmigo me detuve en firmar.— Yo no quiero estar una semana con él — le dije — solamente es una noche y una vez consumado el acto me tiene que dejar ir.— Cariño — me dijo entre arrogancia y fastidio — el tipo dio 10 millones de dólares por tu virginidad, algo que nunca
— Te lo agradezco Lía.— No tienes nada que agradecer, me estas dejando mucho dinero y pues tomo eso en cuenta — me dijo — contactare con el señor Lund para avisarle que ya te encuentras lista.— Muy bien — le dije ansiosa y cruzando las manos.— Te necesito poner una inyección — me dijo — es para evitar que salgas embarazada.— Está bien.Ella después de llamar por teléfono llegó un doctor que me llevó a inyectarme el anticonceptivo, coloque mi ropa en su lugar y me iba a ir.— Ese método dura un trimestre para que sepa.Yo asentí y le agradecí, después me fui a la oficina de Lía en donde hablaba por teléfono.— Te lo agradezco, ella va a pagar la estancia completa así que no te preocupes.Le dije que quería la mejor habitación y se lo hizo saber a la persona con la que hablaba, una vez que colgó me ofreció asiento.— En la salida te van a entregar una lencería, dado que ya estás aquí pues te la adelanto, úsala ese día y trata de aflojarte un poco — me dijo mientras rec
SAÚLMe encontraba en la sala cuando escuche un grito sumamente fuerte proveniente de la habitación de Lucía por lo que salí corriendo a ver qué pasaba, ella gritaba en el baño y no pensé por lo que entre inmediatamente para ver si se encontraba bien.— ¿Qué sucede?— exclamé cuando recibí un botellazo en mis ojos y maldije hasta los quintos infiernos — ¡Por un demonio, eso duele!LUCÍANo había calibrado bien el agua por lo que esta salió hirviendo como si fuera a pelar una gallina, al gritar no tardó en llegar el señor Saúl pero fui lo suficientemente rápida para tirarle mi botella de shampoo, esto fue suficiente para que él se saliera del sitio.— ¡¡¡¡¡No entré!!!!!— le dije súper asustada — por lo más sagrado no lo haga.— ¿Qué te pasó Lucía?— me preguntó con un tono más calmado ya que me sentía asustada — ¿Te encuentras bien?— Me encuentro desnuda, no pude calibrar bien el agua caliente y salió hirviendo por eso grite — le dije y él se dio la vuelta para salir del baño
— Cálmese querida, quizás en otra ocasión tenemos el desagrado mutuo de encontrarnos y está vez logra ganarme aunque sinceramente lo dudo, carece de materia gris y de audición.Wow cerró con broche de oro, levantó del suelo la bolsa con hielo y me la colocó en el puente de la nariz para luego marcharse. Esa parte de Lucía no la conocía en absoluto y definitivamente me gustaba.— Quita esa sonrisa de idiota que tienes — me dijo Aimee molesta — ¿Quién es esa mujer corriente y vulgar?— Esa mujer corriente y vulgar a como tú le dices en ardor a que te dejo callada, se llama Lucía y no es mi conquista, Adriel me pidió que la fuera a traer y la llevara a alguna de sus propiedades entonces la traje para acá.— ¿Adriel? ¿De dónde conoce a esa tipa y porque la trajo a esta casa?— No sé de dónde la conoce y él no la trajo a esta casa sino que fui yo, dado que me dijo que fuera a alguna de las propiedades que tiene pues tomé la decisión de traerla aquí ya que es la más cercana que hay d
— No pienso darme por vencida y tampoco confiar, a veces hacen actos que parecen de ángeles pero en el fondo son el mismísimo demonio.— Aimee vamos a llevarla en el carro porque ya camino bastante.— Esa a mi carro no sube — me dijo casi gritando y sumamente escandalizada por lo que hable — antes prefiero que me despellejen viva.— Shhh ya baja la voz y no seas tan mala con la pobre Lucía.LUCIAYo llegue adonde se encontraban las personas que había visto desde un inicio y le extendí los paquetes de comida que llevaba, ellos se mostraron agradecidos y cuando mire a un rincón había un anciano.— ¿Qué tiene ese señor? — les pregunté — se mira delicado. Ellos me dijeron que se encontraba enfermo desde hace días y no tenía dinero para comprar medicamentos, me acerqué para ver cómo estaba y lo encontré quejándose del dolor.— Señor vamos a un hospital para que lo revisen — le dije pero se mostró reacio a la idea e incluso fue odioso — permítame revisarlo entonces, soy enferme
No dije nada y seguí manejando, soy desconfiada y testaruda por lo tanto no pensaba cambiar mi opinión de esa chica.LUCIALlegue a la casa y subí al cuarto que se me había designado, tuve que ducharme nuevamente ya que me sentía sucia y no quería ensuciar la ropa de cama tan fina que cubría la misma, logre calibrar el agua a como me gustaba o sea fría y me bañe. Al salir busqué en mi maleta otro pijama pero solamente llevaba un short y una camisa de tirantes para dormir, bueno al menos nadie me va a ver y mañana me levantaré temprano. Me coloqué el pijama y decidí meterme en la cama, no tarde en caer en los brazos de mi amado Morfeo debido a todo lo que hice.ADRIELMe encontraba en la oficina y cuando mire eran casi las once de la noche, cerré todo y llamé a Saúl para ver en donde se encontraba además de adonde había acomodado a la chica.— ¿En dónde estás?— le pregunté y me dijo que en mi casa — ¿En dónde dejaste a la chica?Me sorprendió cuando me dijo que había tomado la decis
Al ver hacia atrás se encontraba Lucía con ropa distinta entonces se acercó tranquilamente a donde nos encontrábamos.— Además en caso de que sea así a usted que le importa, su hermano es lo suficientemente mayorcito para ver a quién mete a este lugar y a quien no.Sabía que la cosa se iba a poner interesante y también Saúl quien se sentó a mi lado para ver el espectáculo mañanero.— Ya te dije ayer que no te metas — dijo Aimee — pero lo que tienes de gorda lo tienes de metida. — Y yo le dije que me metía porque es un asunto que me involucra y por lo tanto me concierne, ¿O acaso no lo recuerda? Genial, aparte de sorda me salió con Alzheimer.Vaya, vaya, Lucía definitivamente tiene agallas para enfrentar a Aimee de esa manera. Saúl me hizo de seña que era el round 2 entonces me puse a reír.— Como que se te están acabando los insultos, gata.— No es que se me acaben lo que pasa que hasta mis insultos son indignos de usted, incluso en ese aspecto hay categorías, desmemoriada.—