La puerta se abre y soy reclamada por equivocación.—Papá, ya te dije que tienes que hablarlo con César… —Se interrumpe en cuanto me ve y queda sorprendido.—¿Qué debe hablar tu padre con César? —Arqueo una ceja fingiendo curiosidad, pero ya lo sé, ventajas de pensar que siempre me han ocultado todo.—Madre —se pone nervioso—, no, es algo sobre el trabajo, ¿Y eso que has venido? ¿Te ha enviado papá? —se extraña.—Sabes que me gusta venir a ver a mis hijos y más ahora que no estás con esa… —Me interrumpo en cuanto cambia su gesto en modo de advertencia.Alejandro ya no es manipulable como antes, nunca lo fue, bueno, si se me enojaba con Isabel cuando le mentía sobre que ella me trataba mal, pero nunca fue lo suficiente para dejarla.—Desde que estás con Nicolle, me gusta más visitarte —aclaro.—Pues no te acostumbres, porque pienso recuperar a Isabel —me dice en un tono serio.—¿Por qué? —no comprendo.—Porqué la amo mamá.Y por eso es más fácil mandar a su hermano a la cárcel que a Is
Él está enojado conmigo, porque cuando le dije lo que haría, me ofreció ayudarme a huir sin registros, él es muy justo y lo que haré no será nada justo para mí. Dijo que prefiere eso a qué yo siga lidiando con mi familia, solo así nadie me encontraría y sería feliz, pero este es mi modo de enfrentarlos.—Si —respondo con firmeza.—Pues Alejandro te engañó, el equipo está en la trampa e Isabel va hacia ella, te enviaré la dirección.Estoy sorprendido, pero lo temía.—Gracias.—No hay de que príncipe azul —bromea y me cuelga.Agradezco que me haya avisado, pero ambos sabemos que él no puede involucrarse, puede ayudarme con ciertas cosas y no puedo ponerlo en contra de su jefe para conseguir lo que quiero, así que trabajo un poco solo, además… lo que piensa su jefe se lo sembró mi familia y desconfía de nosotros, y como me encantaría volver a poner a Isabel inocente de las formas correctas, pero como dije antes, mi familia insistiría incluso si yo estoy preso.Sé que en estando en la cár
—Fue fácil, dije para que me ayudara.Nada de esto me cuadra, porque, aun así, William me dijo que viniera, o sea que Isabel debe creer que no le van a hacer nada porque está con Alejandro, pero ella está errada, porque eso no importa.—Tienes que irte —insisto.—No… ¿qué haces tú aquí? ¿cómo te enteraste de todo?—William me avisó, por lo que sea que esté a punto de pasar… —digo mirando a todos lados—. Los tres nos jodemos, así que tienes que irte, diré que harás algún mandado.—No me iré, yo los metí en esto, me haré responsable.—No amor. —Toco su mejilla y la acaricio—. Esto lo provoco mi familia y tú no tienes por qué pagarlo.—Ellos me odian y yo te arrastro, tienes que dejar de protegerme, solo así me odian más y me siguen haciendo cosas, quiero que sepan que yo también puedo defenderme.—No puedo evitarlo, te amo —sujeto su mentón y la beso—, por favor hazme caso y vete, yo me encargaré, piensa en tu hijo, no merece que sus padres estén en prisión.—Ay que lindos —dice el homb
—No, me dejarás para que seas feliz con Isabel, porque mientras yo viva, lo seguiré intentando, por más que te prometa que la dejaré en paz —me confiesa—, te iba a traicionar.Me quedo callado por un momento, pensando, aunque sabía, sabía que él iba a hacerlo.—No me importa, no me importa cuántas veces me hieras, yo te amo tanto que no puedo hacer eso contigo —lo sujeto de cualquier forma y lo alzo.Con un poco de su ayuda y la de Isabel, lo tenemos en pie, prácticamente lo sacamos con cuidado y arrastras de ahí, él conocía el taller, por lo que nos guío hacia una salida trasera.Logramos salir de ahí y nos llevo lejos como puedo, pero Ale se empieza a arrepentir con un con sus pasos.—César, el maletín con el dinero —me dice un poco ido.—Necesitas un doctor, eso no es lo importante ahora.—Pero es que ese maletín hará que Isabel vaya a la cárcel —me confiesa y nos detenemos detrás de unos autos, lo hago sentarse con cuidado y le presto atención—. Antes de que tú y yo hiciéramos el
—Pero estás herido.—No puedo huir, nos verían, al menos ellos me llevaran a un hospital esposado, así que quédate aquí.Ale camina saliendo del escondite, camina como puede, y yo también salgo de nuestro escondite, hago que apoye su brazo en mi hombro y nos vamos juntos, me miró feo, pero no tiene fuerzas para hacer que evite que vaya con él.Vamos caminando lento y escuchamos que le preguntaban a César dónde estaba yo, hasta que me vieron con Alejandro y se acercaron a arrestarnos.—Ya tenemos a todos los cómplices atrapados, son alrededor de tres —dice el oficial por el walkie talkie.—¿Tres? Mi informante solo dijo que era una mujer —le responden—, ya tráiganlos.Nos separan a Alejandro y a mí, y me esposan, César trata de girar su rostro y sé que ha logrado verme antes de que un oficial lo obligará ver hacia al frente. Nos llevan en patrullas distintas y al llegar a la estación, también me encierran lejos de ellos, en la sección de mujeres y aunque había algunas en la celda, yo m
Y aunque estaba cometiendo un delito que debería ir a prisión, quería hacerlo reaccionar y que olvide esa vida, pero la banda no era de fiar y nada salió como se esperaba, y sobre Isabel, ella fue víctima, porque se iba a ver con Alejandro para la firma de documentos, pero él se desvió un poco e hizo una parada, aunque la banda la obligó a salirse del auto, ella no sabía lo que estaba pasando, Alejandro la llevó ahí.Eso fue lo que confesé, así que espero que William haya anotado bien mi historia, para que así se lo diga a Isabel antes de que la lleven a interrogatorio, no sé qué hubiese pasado si la hubiesen interrogado primero a ella, pero tengo suerte.¿Por qué me declaré cómplice? Porque puede que sean menos años en la cárcel, además, es un castigo hacia mis padres que, si siguen jugando con el dinero, en algún momento lo perderán todo.Isabel.En lo que me sacaron de la celda, William me susurró lo que debo decir, fue un resumen prácticamente, dijo que César mando a decir que Ale
A mí me atacó porque soy fácil y para demostrar a su esposo que ella es fuerte, pero yo nunca fui su enemigo, quien realmente lo es, es él.Recojo mis cosas y Juliana me ayuda, aunque no tenía mucho la verdad, mientras checo que nada se me está olvidado, recuerdo que Alejandro me dio un papel, con la dirección de mi padre en donde vive y hasta su número telefónico. Doy un suspiro y decido llamarlo, nunca me imaginé que volveríamos a hablar, pues cuando se separó de mamá, se olvidó de mí.Fue cómodo hablar con él, sentía un gran alivio, no iba a estar sola, me comentó que tiene familia, tal vez no hijos nuevos porque su esposa ya tenía y no quiso tener más, pero al menos son buenos con él y lo tratan como parte de su familia, lo respetan.Se escuchó muy alegre al oír mi voz y la verdad es que yo también, hasta me preguntó si podía pasar tiempo con él y acepté, no conoce a mi hijo, lo que es buena idea que lo conozca ahora.7 años despuésHoy es el cumpleaños de mi hijo Alejandro y le e
—Mamá tuvo hijos de padres diferentes y aun así tiene pareja. —comenta Guzmán.—¿Y qué tal ella va con eso? —les recuerdo arqueando una ceja y se quedan callados.—Solo te queremos ayudar por tu situación, no queremos que estés sola y si te pasa algo, nadie podría ayudarte, sé que estás con tu papá, pero cuando estás sola con los niños, ¿Quién te ayuda? necesitas un compañero que te apoye, yo tengo un amigo, compañero de trabajo y creo que es un buen candidato para ti… —lo interrumpo.—Gracias José, pero no estoy disponible por el momento.Rechazo y subo por las escaleras hasta el segundo piso, camino hacia a mi habitación y entro, camino hasta la cama, me siento y cubro mi rostro. Hace un año que me diagnosticaron cáncer en un ovario, se me hizo cirugía y me lo extirparon, pero hace poco descubrimos que se mutó hacia el otro ovario y pues la primera operación, aunque salí bien después de todo, tengo miedo, sé que necesito operarme nuevamente, pronto lo haré.He empezado hasta comer s