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69. Enjuiciados
Luis se quedó pensando por un momento, se debatía en si aquella información era cierta o no, pero después de ver a los ojos a Gabriela supo que era cierto, — ¿Es cierto mi amor?, ¿no me lo estás diciendo para alegrarme el día?Ella sonrió, le tomó la mano y la colocó en su vientre, — Sé que todavía es muy pequeñito para que puedas sentirlo, pero aquí en mi vientre crece una vez más una vida, que vendrá solo a consolidar nuestra relación y aquello que ya me imaginaba. — ¿Y qué es eso? — Que estamos destinados a estar juntos y vivir esta experiencia de ser padres como una pareja, no pudimos hacerlo con Harry, pero esta vez sí. — Pues, en primer lugar, ¡Felicidades amor!, me haces increíblemente feliz con esa noticia, sé que no se puede devolver el tiempo y siempre lamentaré no haber disfrutado contigo las primeras etapas de Harry y su embarazo, pero este bebe estoy seguro que vendrá para consolidar nuestra familia.Ella le abrazó emocionada, — yo también siento que esta es una seg
70. La verdad
Harry los miraba con atención, tratando de leer de que iba su cara de preocupación, en los últimos días habían vivido muchos momentos de tensión y solo esperaba que no se tratara de algo malo. Gabriela que lo conocía bien decidió hablar abiertamente pues su hijo claramente se veía confundido, así que retomó la conversación, — Por favor hijo siéntate, no es nada malo, solo que es inesperado e importante. — Si es para decirme que tú y el doctor Stone están juntos ya lo sé. Todos se quedaron en silencio sorprendidos, — ¿Cómo lo supiste? — Mama, te amo, eres la mejor mamá del mundo, pero por mucho que te esforzabas yo sabía la verdad estabas triste, tu sonrisa, aunque honesta no se reflejaba en tus ojos, solía observarte pensativa, a veces estabas en silencio y antes de hablarte podía ver que te hacía falta algo y todo eso cambió cuando comenzaste a trabajar en la clínica, así que puse atención. Gabriela conmovida ante sus palabras preguntó, — ¿Entonces por qué callaste? — En p
71. Tu padre
Luis decidió no esperar más, después de pensarlo un poco no existía un momento perfecto para revelar algo así y mientras más pasara el tiempo el niño se sentiría aún más engañado, así que decidido ser el quien hablara el tema. — Harry, aún queda algo por comentarte, creo que es mejor no posponerlo más, te contaré una historia, hace muchos años cuando entre en la universidad para estudiar medicina, conocí una joven hermosa e inteligente que no solo hizo que me enamorara perdidamente de ella, sino que se convirtió en mi esperanza y mi fe.Gabriela se sintió conmovida pues era la misma historia contada de otro punto de vista, se miraron entonces el continuó, — Esa mujer es tu madre. — ¿Entonces ya se conocían? — Si, por supuesto, pero permanecimos diez años sin saber uno del otro, en fin, en aquel tiempo nuestra historia terminó muy mal, no porque no nos amaramos, sino por la culpa de terceros que se involucraron. — ¿Por qué me cuentan esto? — Harry porque tu padre no está muerto c
72. Somos novios
Una vez padre e hijo terminaron el abrazo, sus ojos estaban llenos de lágrimas, pero mostraban una sonrisa en los labios, era evidente que a pesar de que había muchas heridas por sanar compartían la alegría del encuentro y un amor profundo. — Bien caballeros, los voy a interrumpir porque yo también quiero ser parte de este hermoso momento y el cual espere por tantos años — , se acercó a ellos y los abrazó conmovida, — los amo tanto, dos de los hombres más importantes en mi vida al fin juntos, el tercero esta con Dios y sé que debe estar feliz en este momento dándonos su bendición.Se sentaron un momento en la cama abrazados con Harry entre ellos disfrutando de la emoción de sentirse finalmente en el hogar que añoraban. — Sé que hay mucho de qué hablar, pero además de que es tarde y debemos descansar, creo que tenemos que tomar decisiones respecto a muchas cosas pues todo cambiará a partir de ahora. — Tienes razón amor, es mejor dejar descansar a nuestro hijo y mañana planificaremo
73. Superando juntos la adversidad
Olivia había comenzado a sentirse cada vez más débil y poco a poco aparecías efectos secundarios que le provocaban desánimo así no lo admitiera en voz alta, Tomy ya Christine eran un gran apoyo, pero no quería agobiar a la niña con detalles que solo la harían sufrir más.Ya no solo era la caída. Del cabello, sino que estaba perdiendo peso con rapidez porque ya ni siquiera los alimentos sabían igual, vomitaba y sufría inapetencia.Intentaba continuar con su trabajo cuando tenía un buen día, pero no era nada fácil y parecía que para su cuerpo cada vez era más difícil recuperarse, sin embargo, no quería defraudar a sus seres queridos no a ella misma.Con esfuerzo se vistió y se sentó en la terraza para poder sentir los rayos del sol y animarse, estaba cansada de estar en la cama y aún más de auto compadecerse se encontraba sola pues su hija había ido al colegio y Tomy debía ir a trabajar a pesar de que constantemente debía prácticamente obligarlo.En ese momento tocaron a la puerta y anu
74. Mantener la fe
Olivia esperaba ansiosa a la llegada de Tomy y Christine para darles las noticias, su ahora novio acostumbraba a turnarse con Luis y con la madre de Gabriela para ir por la niña, era increíble como de la nada todos se habían integrado como una familia en favor de la estabilidad y felicidad de los niños, así que la propuesta de su ex esposo no era descabellada.Llegaron finalmente a casa y como solía pasar cuando llegaban juntos sus chicos hacían una competencia de quien llegaba primero hasta su habitación a saludarla, como siempre su hija era la primera en llegar agitada. — Hola mami — , dijo con una sonrisa en los labios y la respiración un poco acelerada, — Le gane como siempre al anciano de mi tío. — No seas mala, jajaja.Más atrás llegaba Tomy sin aliento a la habitación, — Esta bien lo admito eres la única campeona, innegable e imbatible — , luego se acercó a Olivia y le dio un pequeño beso para saludarla, — Hola amor, ¿Cómo ha ido tu día?, como vez yo cada día perdiendo con
75. ¿Secreto al descubierto?
Gabriela había pedido la cita finalmente para ir a ver al bebe, sería un momento familiar y aunque no podía comentarlo en casa porque aun Christine no querían perdérselo así que llegaron al consultorio de forma separada.Primero fueron Harry y Luis, para luego hacerlo Gabriela y su madre, la doctora sonrió al ver entrar tantas personas, no era común pero que tantos se emocionaran con la llegada de un bebe era conmovedor. — Bien, ¿Ya somos todos verdad? — Sí, doctora disculpe — , para Gabriela era una situación tan diferente a su primer embarazo que solo contaba con su madre y a veces debió asistir sola a las consultas que si hubiesen podido acompañarles todos en casa por ella estaría feliz.Formuló unas preguntas de rutina para agregar a su expediente y luego pasaron a que realizara la ecografía, de inmediato cuando vieron la imagen todos se emocionaron, — Aquí está él bebe — , dijo señalando la zona oscura, — todas las medidas se encuentran correctas para el tiempo del embarazo.
76. Una esperanza
Christine había hecho una pregunta que Harry no sabía cómo responder ni quería hacerlo, involucraba mentir, era algo que no deseaba y que le prometió a su amiga que nunca lo haría, por ello se quedó en blanco, en ese momento tocaron a la puerta y era Tomy quien les apresuraba para ir a cenar.Ambos niños se apresuraron a la puerta, pero ella tomó por el brazo a Harry para detenerlo, — Antes de bajar, por favor respóndeme. — No te preocupes es para un regalo para un bebe que no conocemos. — Está bien, pero dime, ¿si estuviera ocurriendo algo me lo dirías? — Claro, pero ¿Por qué preguntas esto? — Siento que me están ocultando algo y no me gusta. — Eres mi amiga, estas pasando por mucho con lo de tu mamá, creo que debes confiar en los adultos que te rodean que te aman si hay algo por saber ellos sabrán cuando decirlo. — Me tratan como una niña. — Porque todavía lo somos, pero lo hacen también por amor, solo quieren que seas feliz, así que por ahora solo disfrutemos de este tiempo