Cuando llegan al departamento de Edda, ella insiste en que Olaf suba a su casa, pero él no quiere, ella lo presiona, como tenía que entregarle unos archivos, hace que suba, ya en el departamento le ofrece un café a Olaf y mientras se toma el café, aprovecha para grabar en una memoria la información que necesita.

— Tu casa es muy bonita, me gustó mucho, ¿vives sola?, perdona, no quise ser mal educado por hacerte preguntar personales— se le hace raro que una mujer joven no esté en casa de sus padres, la familia de Olaf es muy conservadora y el también, es por eso que no quería subir a su departamento para no molestar a su familia en viernes por la noche.

— No me molesta, no se preocupe, al contrario, muchas gracias por preguntar y por preocuparse por mi bienestar — Edda está muy emocionada porque es la primera vez en tantos años, que Olaf le hace alguna pregunta pe