Esa noche nuevamente Gordon salió, pero fue a varios sitios, desde el primer momento notó que estaba bajo vigilancia, así que esa noche se fue a un antro, estuvo hasta pasada la medianoche, después fue a casa, habló con sus cómplices vía telefónica, era necesario buscar un nuevo lugar, esperarían para hacer los cambios esa misma noche, necesitaban bajar la presión porque estaban vigilando sus movimientos.Así que se quedó en casa esperando a que amaneciera, para indicarle al padre de Karen qué hacer para hacerle llegar el dinero, por fin había logrado vengarse de ella, lo había menospreciado por haber tenido una pequeña aventura con Elsie Farrell, exponiendo su nombre públicamente, a él que hasta entonces estaba siendo conocido como un intachable abogado de la nación.Aunque no era cierto que estaba arruinado, pero si que no había sido considerado en ningún momento para ser un juez, sólo porque su moral estaba en entredicho, por eso había planeado ésta venganza.Se durmió feliz de sabe
Farid arrugó el entrecejo y exclamó:— ¿Cómo que ha desaparecido? No entiendo, ¿Qué es lo que realmente está sucediendo?— Lo que sucede hijo es que el mismo día que tuviste el accidente, Karen fue secuestrada y desde ese día0 no sabemos de ella — dijo Hafid.Farid no podía entender porqué no habían hecho nada para buscarla, su desesperación se hizo evidente y dijo:—¡Necesito levantarme de esta cama! ¡Karen necesita ser encontrada! ¡ No puedo estar tranquila sabiendo que está pasando por esta situación tan traumática — dijo Farid desesperado.Sylvia intentó calmarlo, pero él quería salir de una vez para ir y encontrarla.— Hijo por favor, necesitas calmarte y escuchar, hay algo que aún no sabes, pero debes calmarte — dijo ella.—¡ Pues digan de una vez! ¿Acaso saben dónde está?— preguntó lleno de angustia.— ¿ Puedes calmarte hijo por favor?— intervino Hafid.— ¡Está bien papá voy a calmarme! ¡ Por favor, hablen pronto —dígame pronto porque si no me va a matar la ansiedad.— Las per
— Si, ya se me está notando, ¿verdad?— dijo Karen.— Creo que el jefe no sabe de su embarazo señorita— dijo la mujer.— Como si eso hiciera alguna diferencia — dijo Karen con tristeza.Increíblemente su estado de embarazo desató la lengua de aquella mujer que continuó diciendo:— ¿Cuánto tiempo tiene? ¿Sabe si es niña o niño?Karen estaba sorprendida de que al entrar la señora ni siquiera la miraba y ahora un torrente de palabras salían de su boca, queriendo informarse del mínimo detalle.— ¿Su esposo sabe que usted está acá?Por un momento iba a decirle que no tenía esposo, pero decidió reservarse esa información y solo respondió:— El sufrió un accidente el día que estos desgraciados me secuestraron y ni siquiera he podido ir a verlo en el hospital — dijo Karen sinceramente conmovida.La mujer apretó los labios en señal de contrariedad y solo movió su cabeza.Karen continuó diciendo: — Ya voy a tener 4 meses y aún no sé si es niña o niño, necesito mis vitaminas para que mi bebé ven
— ¿Qué es lo que sucede contigo Gordon Skinner? ¡A mi hijo no lo vas a tocar maldito bastardo!El hombre mostró su sonrisa de lobo y respondió:— ¿Y muerta qué vas a hacer?— dijo el hombre inundando la habitación con su risa— ¡Esa será mi venganza perfecta! Criar a tu hijo y moldearlo a mi imágen, me encantaría ver como te revuelcas en tu tumba.— ¿De eso se trata todo esto Gordon? ¡De una estúpida venganza!— exclamó ella— fuiste tú quien arruinó mi vida con tu traición, dime; ¿de qué te quejas?— ¡De que mi vida se vino abajo después de nuestro divorcio, mi reputación ya era una mierda por culpa de tus lloriqueos! — gritó Gordon— ¡Ya no era un abogado intachable, nadie me consideró jamás para ser un honorable juez!— Y según tú, eso es mi culpa—dijo ella— debiste pensar en no acercarte a la candela, si tenías la cola tan frágil, no fueron mis lloriqueos idiota, fue tu comportamiento, no te importó exhibirte con Elsie en cualquier antro, y los periodistas andaban a la caza de un bob
Lisette sonrió al ver de quién se trataba y saludó.— ¡Hola Farid! ¡Qué sorpresa tan agradable! Si ese truhán que viste salir de acá es Gordon Skinner, y ahora estoy más convencida de que él tiene que ver con la desaparición de Karen— dijo la muchacha, en voz poco audible.Farid terminó de entrar cerrando la puerta tras sí y respondió:— Lo he visto en algunas ocasiones merodeando cerca de Karen.— Si, desde que lo ví aparecer nuevamente en la vida de mi hermana no me dió buena vibra, se lo advertí más de una vez a Karen, que ese tipo no me gustaba cerca de ella — dijo Lissette incomoda.— ¿Qué razones dió para acercarse a ella?— preguntó Farid.— Imagínate que la llamó para que lo buscará en un hospital porque según estaba con cáncer terminal, después le dijo que solo bromeaba, era una gastritis, que estaba arruinado y necesitaba trabajar, y desde ese tiempo no ha salido de acá — la voz de Lissette era de enojo.Farid se quedó pensando unos instantes y luego se levantó diciendo:— Vo
Hafid sintió tristeza al ver cómo su hijo se sentía, amar sin esperanzas era algo terrible, recordó cuando pensaba que Sylvia no lo amaba y se le hizo un nudo en la garganta.Gordon hizo todos los arreglos para que Karen tuviera atención médica, llevó un médico y también transportaron un equipo de ecografía para monitorear al bebé con el que él quería quedarse después de deshacerse de la madre, esos eran sus planes.Unas tres semanas después todo estaba listo para revisar a Karen y su bebé. La puerta se abrió e hicieron que ella entrara otra habitación, allí estaba un hombre de bata blanca, aparentemente un doctor quién le sonrió amable al ella entrar, Gordon estaba con él médico.— Hola señora, estoy acá para llevar a cabo un examen para determinar cómo se desarrolla su bebé— dijo él aparentemente doctor.— ¿Y tiene que estar él aquí?— dijo Karen altiva.— No veo porque tengo que salir, estoy interesado en que nuestro bebé esté bien— dijo él.— Tu sabes que éste bebé no es tuyo —
— Yo no he dicho nada, ni diré, se a lo que expongo no te preocupes hombre— dijo la mujer cuidadora.La vecina nueva del edificio donde había entrado Gordon, había visto mucho movimiento últimamente, ese día vio salir a un hombre que entró con él tal Skinner y luego salió sólo, quería averiguar de quién se trataba y lo alcanzó en la entrada del edificio, ella se adelantó y fue a abrir y de repente se llevó la mano a la cabeza.El hombre de inmediato se hizo cargo.— ¿Se siente mal señora?— dijo él hombre — venga conmigo, siéntese por favor.Ella se repuso rápidamente y dijo:— Fue solo un leve mareo, debe ser porque no he comido.— Debe cuidar su salud, es un tesoro estar sano— dijo el hombre.— ¡Gracias, es muy amable; ¿Vive en el edificio?— preguntó inocentemente.El sonrió y respondió:— ¡Oh no! Solo vine a visitar a una paciente en el 5, está embarazada — dijo él doctor.— ¡Ah! con razón su reacción— dijo la mujer— afortunadamente estoy bien, venga lo acompañó a la salida, es tran
Salieron de allí con las dos personas arrestadas y a buscar a los demás que estaban involucrados en la desaparición de Karen Romano, primeramente se dirigieron a dónde se encontraba Gordon en ese momento.Él se encontraba en la empresa de Karen, el detective llegó hasta la oficina y tocó la puerta, una vez que el abrió, habló diciendo:— ¿Señor Gordon Skinner?— ¿Quien lo busca?— preguntó él.— ¿Es usted el señor Skinner?— volvió a preguntar el detective.— Así es, dígame en qué puedo servirle — dijo él hombre.El detective hizo una seña con sus manos y los dos agentes estuvieron al lado de Skinner prontamente.— Queda usted arrestado por el secuestro de la señora Karen Romano — dijo él hombre de la ley.— ¿Qué locura es ésta? ¡No pueden probar nada, esto es obra de la loca de Lissette y su odio por mí, no pueden basar una condena solo con sospechas, soy abogado y conozco las leyes mi señor!— vociferaba Gordon.— Es mejor que nos acompañe sin poner resistencia, recuerde que cualquier