Me pongo más nerviosa aun, ya que Shayla y Luis se quedan en silencio, quiero girarme para verlos y tratar de comprender que rayos están haciendo, pero no puedo, ya que no quiero que me descubran… ¡Esta tensión me está volviendo loca!—Solo serán mil —dice Luis de pronto.—No estás en posición para negociar, serán tres mil además del primer pago acordado, o no tendrás nada.Shayla no es una tonta, sabe que tiene el poder de ganar en esta situación, así que no duda en aprovecharse, burlándose de todos, incluso de su aliado.—De acuerdo, chica lista —Luis finalmente acepta, ya que no tiene más alternativa—, pero el pago completo se te dará cuando me lleves hacia el niño.—Por supuesto, ven conmigo, no hay tiempo que perder… —responde ella con una sonrisa, aparentemente feliz de haber logrado su objetivo.Daniel y yo nos miramos una vez más en silencio, mientras de reojo observamos como Luis y Shayla se marchan sin siquiera haber esperado su orden. Daniel y yo hacemos lo mismo, pero a un
—Mamá… Mamá…Abro los ojos con esa dulce voz, viendo a mi pequeño Andrei, cuando tenía unos 5 o 6 años, sosteniendo un libro de niños para colorear, el cual tenía imágenes de diversas flores en sus ilustraciones.—Mamá te quedaste dormida —reclama Andrei, haciéndome sonreír.—Lo siento mi pequeño, mamá está un poco cansada, ¿Terminaste de colorear tus flores?—Sí, coloree todas.—Déjame ver… —digo mientras tomo el pequeño libro de sus manos.Andrei no era un chico valiente, pero sí muy curioso, adoraba estar metido entre libros aprendiendo el mundo exterior, incluso desde muy pequeño, mi adorado hijo siempre fue el más brillante de todos los niños.—Esa es una rosa roja —me dijo Andrei, señalando una de las páginas del libro—, ¿Sabías que en el pasado los lobos las usaban como señales de peligro?—¿En verdad?—Si, por su color parecido a la sangre, los lobos de las manadas primitivas las ponían en lugares como señalización para indicarle a los miembros de sus manadas que hay un peligr
—¿Te sientes orgullosa de ti misma? —le pregunto a Shayla, mirándola a los ojos.—No sé lo que estás pensando… Pero no va a funcionar —se niega ella, intentando mantener la clama para no decir nada.—Cuando te conocí en la manada eras la mujer más respetada, y no solo por ser la anterior Luna, las mujeres de la manada de verdad te respetaban, te consideraban una líder. Si todas ellas te vieran ahora y supieran lo que has hecho, imagino que todo eso terminaría.Tengo un plan claro, que probablemente no vaya a funcionar, pero es mejor que dejar que Adan muela a golpes a esta idiota. Así que planeo ponerlo en práctica, sin dejar de mirarla a los ojos, mientras continuo hablando.—No solo eras una líder, eras una inspiración. Una mujer que no pertenecía a una clase alta, eras solo la hija de una sirvienta, pero te convertiste en la mate del alfa y en una Luna, te encargaste de los pobres fundando una asociación, y también…—¿Tu qué demonios sabes? No sabes nada sobre mi… —niega Shayla de
Según lo que Shayla nos dijo, ella encontró a Andrei fuera de la manada por casualidad.Ella rondaba los territorios de la manada del Sur usualmente esperando ver a su madre y si familia, aunque sea a lo lejos. Así encontró una vez a Andrei, el cual saliendo de la escuela iba a caminar por las afueras de la ciudad, luciendo algo triste desde que yo me fui al norte con su padre.Al verlo solo, Shayla se aprovechó de él prometiéndole que lo traería al Norte conmigo, que ella lo ayudaría a encontrarme. Andrei no es un chico tonto, pero el deseo que tenia de verme de nuevo y de estar a mi lado fue más fuerte que la razón, y tras encontrarse con Shayla por un par de días, confirmando que ella no era peligrosa, finalmente tomó la decisión de ir con ella, escapando de la escuela y saliendo de la manada sin permiso.El plan era ir al norte solo por un día, Shayla le había mentido diciéndole que irían y volverían por solo un instante, así que Andrei aceptó en medio de toda su inocencia. Sin em
Mi corazón late con mucha fuerza en mi pecho, mientras que lo más rápido que puedo subo escalón tras escalón, en camino a uno de los últimos departamentos de ese viejo edificio.El maldito de Luis… Ya que suponía que nosotros habíamos capturado a Shayla, seguramente nos estuvo siguiendo todo el día hasta que llegamos aquí, donde finalmente atacó, dispuesto a encontrar a Andrei antes que nosotros para hacerle daño. Pero yo no planeo permitirlo, no cuando estamos tan cerca de encontrarlo…—¡Alfa! Nos están sobrepasando en la pelea… —una alarmada Iris sube corriendo por las escaleras, buscando a Adan.—Llama a los refuerzos que se quedaron en la manada de California, y a todos los lobos bajo el mando de Armand —ordena Adan.—Ya lo hicimos, pero no creemos que lleguen a tiempo, están acabando con nosotros.Adan deja de subir y se nota pensativo, por su expresión me doy cuenta de que está a punto de hacer una locura, así que de inmediato me tomo de su brazo y trato de impedírselo.—No te a
Fue nuestra culpa… Cuando Shayla finalmente aceptó hablar, todos tuvimos nuestras dudas razonables respecto a la información que nos brindó, todos sabíamos con el tipo de monstruo con el que estábamos lidiando, así que nadie pudo juzgarnos por dudar de ella.Y temiendo que fuera una trampa, vinimos al edifico con el personal justo para buscar en el lugar, no para defendernos de un ataque, ni siquiera estábamos pensando en pelear al llegar aquí. Habíamos dejado la manada con los hombres más fuertes de cada manada, quienes estaban resguardando a Shayla, esperando que cuando todos los alfas se alejaran, ellos intentaran entrar a rescatar a la tonta de Shayla…Pero nos equivocamos, siempre tuvimos a Luis detrás de nosotros, esperando el momento perfecto para atacarnos y quitarnos a Andrei de las manos, un error que yo estoy a punto de pagar con mi sangre.Al reconocer a este demente alfa, rápidamente bajo a Andrei de mis brazos y lo pongo en mi espalda, en un inútil intento de protegerlo.
Sujetando firmemente esa roca entre mis manos, me preparo para darle un nuevo golpe en la cabeza a ese demente, pero más preparado, Luis toma mis muñecas y me detiene, sobrepasando mi fuerza y casi tirándome al piso.Andrei sale corriendo con rapidez hacia las escaleras, tan obediente e inteligente como yo sé que es, mi adorado hijo intenta encontrar una forma de escapar o hallar ayuda, mientras de reojo observo como baja las escaleras con mucha rapidez.—Nunca sabes cómo rendirte… ¿No es así? —pregunta Luis, luchando conmigo para intentar obligarme a soltar la roca.—¡No! —respondo en un grito, intentando luchar para liberarme de él, y seguir golpeándolo.—Ya entiendo por qué le gustas tanto a esos alfas…Sintiéndome ruborizada y algo avergonzada por sus tontas palabras, decido sacármelo de encima, y soltando la piedra dejo que caiga de forma pesada sobre su cabeza, mientras que con una de mis piernas le doy una patada en la entrepierna, observando como él cae al piso doblándose adol
Me quedo estupefacta al mirar el pequeño lobo de mi hijo, ya que por lo general los hombres lobo nos transformamos la primera vez durante la adolescencia, después de entrenar por un largo tiempo el control de nuestra forma animal, ya que ser un lobo puede ser un poco abrumador y los más inexpertos se dejan llevar por sus instintos con mucha facilidad.Pero Andrei hizo algo increíble, solo con 10 años ha logrado transformarse, y parece que tiene un gran control de su forma animal, peleando como puede contra Luis, defendiéndose y atacando con evidente inexperiencia.Dejo de sentirme orgullosa y abrumada a la vez cuando veo que Luis toma una de las piernas de mi hijo en medio de uno de sus saltos, Andrei cae al piso soltando un alarido de dolor, mientras que Luis no pierde el tiempo, y presiona la pata blanca con mucha fuerza, buscando mantener quieto a mi hijo para poder matarlo.A pesar de dolor y el cansancio, viendo lo que Luis intenta hacer, me obligo a mí misma a ponerme de pie, y