Capítulo 16. Tensión. * Días después. Han sido largos días; entre baños, masajes, juegos y pasatiempo, Bastián se ha olvidado de la empresa y, aunque su padre está al mando, él aún no deja de preocuparse por la situación. Aún así, su mente está distraída con esta nueva versión de Brittney, una versión que lo tiene hechizado. —Ya se acabó el juego, mañana debes despertar para tu consulta médica, descansa, Bastián. — Gildris se mueve a recoger las fichas de ajedrez y Bastián la detiene. —Una vez más —le pide. —Ya perdiste, Lauder, acepta la derrota. —Una partida más, pero esta vez quiero un premio si gano. —¿Quieres apostar? —pregunta, un poco tensa. —Así es, ¿aceptas la última partida? Gildris pasa saliva, mirándolo con incomodidad. —¿Qué quieres apostar? Mejor dicho, ¿qué buscas en la penitencia? Bastian la mira serio, analizándola, siempre analizando cada movimiento de ella, como si pudiera adivinar lo que ella piensa. —Si tú ganas, puedes pedirme lo que tú
Capítulo 17. Cercanía. Es su primera salida juntos, ella va disfrutando del paisaje, mientras que Bastián va concentrado en una llamada telefónica con su madre quien lo llama con constancia, la mujer parece permanecer distante por la tensión que hay entre las familias, ya que todos saben que ambos venían discutiendo en el coche y la idea de que aún siga con Brittney es un gran reto, después de que incluso él mencionara el divorcio, lo que su familia no sabe es que él está conociendo está nueva versión, que lo tiene distraído, hechizado ante la pureza que está mujer le está demostrando, de cierta manera lo hace recordar al principio de su relación, la personalidad de Brittney era alegre, que le gustaba explorar y su curiosidad la llenaba de inocencia aunque no lo fuera, está Brittney es una mezcla de la antigua con un toque especial, y él está distraído con ella. B: De acuerdo, organizaré todo, todo para la cena, no te preocupes. Yo también te amo. Gildris sonríe al escucharlo
Capítulo 18. Sensaciones. Gildris lo sigue a la oficina de lujo junto a la de presidencia. Al entrar, ella nota lo extravagante del lugar: fotos de Brittney por doquier, una foto de recién casados sobre su escritorio y corto papeleo sobre la impresora. —Hay documentos que requieren su firma, mi señora; no le había avisado porque dijo que se tomaría unos días, por eso todo se ha atrasado. ¿Quiere revisarlos? —Sí, mientras Bastián esté ocupado, yo revisaré algunas cosas. Lucas, tráelo, por favor. —Sí mi señora. Gildris quiere ocupar su tiempo en detalles administrativos que para ella no son nada difíciles; ella revisa algunos archivos y firma algunas autorizaciones. Pensaba que ella era la asistente administrativa de Bastián, pero al parecer, al casarse con él, pasó a ser su administradora financiera, así como la dirigente de recursos humanos. Durante los minutos en los que Gildris está evaluando algunos balances, ella nota una cifra que no coincide, algo que la desconciert
Capítulo 19. Inquietudes. Gildris va distante y muy seria en todo el camino de vuelta a casa; incluso al llegar, baja del auto ignorándolo y se va a su habitación, con una rabia interna que no entiende. Solo ver lo pegajosa que era Belinda le causa irritación. Tras asearse y vestirse, Gildris se reúne con Bastián en el almuerzo; el silencio es tenso y su expresión distraída y distante es más evidente. Ella juega con la zanahoria sin mucho apetito. —¿Vamos al jardín a tomar el sol? —No tengo ganas. —¿Entonces me puedes hacer un masaje? Me duele el hombro. —Qué raro, ¿no te dolía cuando Belinda se colgaba de tu brazo? —pregunta arrogante. —¿Eso son celos? —Tonterías, es una simple pregunta —dice ella enarcando una ceja de manera involuntaria, ya que lo hace cuando está molesta; incluso tiende a cruzar los brazos como lo hace ahora, pero parece que ella no lo nota. Bastián sonríe ligeramente, tomando de su jugo. —¿Entonces sí me harás el masaje? —Tal vez —dice ella
Capitulo 20. Secretos ocultos. Ella lo mira, sin pensar en lo que hace, toma su mano que sujeta su mejilla y la acaricia dejando un beso suave. —Esto es mi culpa. —Ha sido mía, por no ver el camino, tranquila, no me pasó nada.— Ella está inquieta y le acarician la mano.—Lo siento Bastián.— Bastián está sorprendido, es la primera vez que la escucha disculparse, lo que es un indicio que lo lleva a una pista más, una que deduje que ella no es quien dice ser, ¿Pero realmente existen dos personas tan parecidas? ¿Es realmente posible? —¿Quieres que te perdone? Me golpee la mano, así que en esta ocasión, deberás leer tú para mí, lo haremos está vez en la habitación, creo que necesito descansar. Ella sonríe tímidamente. —Está bien, vamos a la habitación. Ella lo ayuda, al estar en la habitación, ellos se acomodan, y ella empieza a leer desde donde lo dejaron, ambos entretenidos con la lectura que ella ejecuta, mientras él la escucha admirándola acostada boca abajo, apoyada de
nota: Iniciamos en esta nueva aventura, ¡hola! mi nombre es Isabella, quiero invitarte a seguirme en Insta: @isabellacreadora16 para conocer sobre los spoiler y mucho más. Capítulo 1. Propuesta. Gildris Scanfort, de 25 años de edad, espera impaciente en la sala de emergencias del hospital del centro de Delano, ciudad del condado de Wright, Minnesota. En la incertidumbre, ansiedad y desesperación por noticias sobre el estado de salud de su madre, quien fue internada esta tarde con un fuerte dolor abdominal que la hacía estremecer. Vecinos llamaron dando aviso sobre la situación a su pequeña floristería donde ella trabaja medio tiempo, intentando conseguir el dinero para los medicamentos, consumos de casa y pagar deudas. Cuando ella creía que las cosas no podrían ir peor, una notificación de embargo llegó a su tienda esta mañana, la misma que seguramente llegó a casa y que ha causado la recaída de su madre. Años intentando sobrevivir a toda la situación económica que presentan, a
Capítulo 2. Reencuentro del pasado. Al ver el dinero y pensar en la propuesta, Gildris intenta no ceder a la tentación. Está convencida de que es una mala idea, además es algo ilegal; si la descubren, no solo no tendrá el dinero, sino que dejará a su madre, quien la necesita, y además estará bajo prisión. La duda pasa por su mente y, aunque tenga el mundo encima, no puede sumarse a esta locura. —Lo siento, pero no puedo, esto no es una buena idea, prefiero intentar resolver las cosas por mi cuenta. —Responde, empujando el maletín hacia Brittney, quien enarca una ceja con frialdad. —¿Es broma? Tienes la solución de todos tus problemas frente a ti, puedes resolverlo todo sin tanto esfuerzo y aún así, ¿te atreves a rechazarlo? —Sí, porque esto no es una solución, es un problema; si nos descubren, iré a la cárcel. —Eso no pasará, ahora tengo mucho poder, te aseguro que es la mejor oportunidad que tendrás, ¿O es que prefieres ver morir a mi tía? —Si tanto te importa, ¿por qué
Capítulo 3. Decisión. Gildris, al verla inconsciente, llama a emergencia. En pocos minutos la ambulancia está en su casa. La tensión en su cuerpo la impacienta, tiene miedo por su madre, por lo sucedido; sabe que pensar en que ella interfiere en su vida la ha llevado a este punto. Si su madre supiera la situación a la que Brittney la quiere exponer, la pondría peor. Ella siempre ha sido ajena a los juegos de las chicas, indiferente a la situación, por eso ahora es más difícil explicarle a su madre lo que está pasando y las intenciones de Brittaney en todo esto. No quiere acceder a este juego, por eso Brittney se ha aprovechado de la situación, sabiendo que su madre, de una manera u otra, la hará ceder. —Una recaída más… —afirma el doctor mientras revisa a Carlota. Ya se lo había dicho, ella no puede pasar por disgustos o emociones fuertes. Vamos a tener que dejarla en observación esta noche; debemos prevenir un impacto mayor y solo teniendo la aquí podremos actuar a tiempo, aun