Una vez llegó a un lugar desierto, con bosque a ambos lados de la carretera y poco transitado, tomó al bebé en brazos y se bajó del coche dispuesta a acabar con la vida de lo que uniría de por vida a Vidar y Eir, ella acabará con eso que ellos desesperadamente esperaban y sabe a la perfección que esa felicidad terminará con la desaparición de ese bebé. ―Tu madre me robó mi felicidad. ―Dijo mirando al bebé que se remueve en sus brazos, él calló una vez ella lo tomó en brazos. ―Él debió ser mío, pero por ser yo una simple criada no me miró. ―El odi0 en su voz fue mucho. ―Ahora yo acabaré contigo. ―Alzó el puñal, pero esa mirada perdida, la manera tan cómoda en la que él se encuentra entre sus brazos y que haya dejado de llorar al sentir su calor movió el corazón de Savanna. El bebé es realmente hermoso y le ha hecho sentir un calor único. ―¡Mierd4! ―Maldij0 al no poder hacerlo. ―Te quedarás aquí, entregué absolutamente todo en este pacto. ―Sonrió burlándose de ella misma. ―Di mi poder c
―Señor. ―Uno de los policías se acercó. ―Me han notificado de un accidente en un área poco concurrida. ―Dark lo miró al instante, con el corazón acelerado. ―Mis hombres traen a su exesposa. ―Dark asintió, finalmente la habían encontrado, interminables horas buscándola, le habían dado vuelta al reloj unas dos veces y hasta ahora obtienen resultados.―Bien, la traen directo aquí. ―Empezó a caminar. ―Quiero interrogarla cuanto antes.―Su majestad. ―Dark paró en seco. ―Ella está en muy mal estado. ―Le informó. ―No creo que aguante tanto.―No me interesa, tráiganla aquí, de todos modos, no pienso dejarla viva. ―Él tiene la certeza de que fue ella quien se llevó a su nieto, por esa mujer su hija está deprimida en un momento tan feliz como el que debería ser tener hijos.Eir lloró al alimentar a su bebé, ella no puede dejar de pensar en su hijo, ese que le arrebataron de la nada, ¿Por qué alguien querría robarle a su bebé? ¿Por qué debe ella pasar por algo tan duro? Vidar que no se había apa
―¿Cómo fuiste capaz de hacer algo tan vil con un niño tan inocente? ―Savanna no sabía si era por el dolor o por su inminente muerte, pero lo miró a los ojos.―Vidar debió estar conmigo. ―Trató de mantener el único ojo que le queda abierto. ―Ese hombre debió ser mío, pero por mi clase social no me hizo caso y tu hija se metió en medio. ―Ladeó la sonrisa. ―La muerte de tu mujer fue culpa de tu propia hija, ella no debió meterse entre Vidar y yo, ¡Yo debía conquistarlo! ―Río fuera de sí. ―Ahora que se muera del remordimiento por haber perdido a su hijo. ―Dark asintió, está enferma desde siempre.―Aun cuando le hayas arrebatado parte de la felicidad, ellos tienen que luchar por el que le queda. ―Savanna lo miró con asombro. ―Son gemelos. ―Le informó para que su muerte no significara nada, para que muriera pensando en que esos dos estarán juntos siempre.La búsqueda del bebé fue inmediata, hombres lobos, brujas y algunos cazadores que tenían alianza con los Granberg se unieron para peinar e
Eir abrió los ojos y en lo primero que pensó fue en su bebé desaparecido, en ese que no tuvo la oportunidad ni siquiera de abrazar o darle un beso. Tras suspirar miró a su esposo y sonrió, ese hombre es un apoyo fundamental, jamás la ha dejado sola y a pesar del dolor que ambos tienen, él siempre ha sido más fuerte que ella y la ayuda a sobrellevar las cosas. ―¿Podrías quedarte un poco más en cama, mimada? ―La voz gruesa y ronca de su marido la tensó. ―Vamos, nena, el vuelo sale esta tarde. ―Eir besó sus labios. ―Quiero resolverlo todo antes de irnos, de esa manera no dejaremos nada. ―Vidar sonrió. ―Llevas arreglando las maletas y todo lo demás desde ya hace una semana. ―Lo sé, sabes como soy. ―Volvió a besarlo. ―Ahora déjeme salir de la cama, señor Granberg, su esposa debe ir a ver a su hijo. ―Vidar tiró de ella y la abrazó con muchísima fuerza, con ese amor que día a día se vuelve más intenso y enloquecedor. ―Eres la mejor madre del mundo, ¿Lo sabes, cierto? Y una esposa sexy y
Cinco años habían pasado, difíciles y muy largos, todos intentaban sobrellevar el dolor, pero que el niño viviera enfermo toda la vida los frustraba un poco más, se suponía que deberían protegerlo de absolutamente todo y no pueden porque eso se les sale de las manos. ―Amor. ―Eir miró los ojos de su hijo. ―¿Has tenido algún sueño? ¿Has escuchado voz en tu cabeza? ―Radiv negó, él sueña con él mismo frente a un espejo, es todo. ―Vale, no pasa nada, cielo. ―Besó su frente. ―Mami. ―Eir miró los ojos celestes de su hijo. ―¿Por qué siempre hay tristeza en tu mirada? ―El corazón de Eir se paralizó, es primera vez que le pregunta eso. ―¿Tristeza? ―Sonrió un poco más. ―Sí, cuando me miras hay algo más que amor, es mucha tristeza. ―Sin saber que responder negó. ―¿Cómo voy a estar triste si tengo un hermoso hijo? ―Besó sus mofletes hasta hacerlo reír. ―Jamás te miraría con tristeza, cielo. ―Se apartó. ―Cálzate los zapatos, yo iré a peinarme. ―Eir se metió al baño y soltó las lágrimas, es inso
Se quejaron ambos niños al chocar de frente. ―¡Fíjate por donde vas! ―Dijeron a la vez acariciando sus frentes. ―Fíjate tú. ―Volvieron a decir al compás y una vez se miraron irritados, ambos quedaron sorprendidos. ―¡Eres un clon! ―Chillaron a la vez señalándose. ―No, tú eres el clon. ―Radiv frunció el ceño. ―Tú eres el impostor. ―Aseguró. ―No, tú eres el impostor, yo soy el original. ―Ambos se miraron fijamente a los ojos, son como dos gotas de agua. ―¡Caracolas! ―Exclamó el niño. ―Eres el de mis sueños. ―Radiv pensó lo mismo, él siempre consideró que se veía a sí mismo y se escuchaba. ―¿Por qué te pareces a mí? ―Quiso saber. ―No lo sé. ―El niño se encogió de hombros. ―¿No es genial? ―Agrandó la sonrisa. ―No pareces tonto como los otros niños, has tenido suerte de parecerte a mí. ―Eso a Radiv no le gustó. ―Tú tienes suerte de parecerte a mí. ―El niño alzó las cejas, es muy amargado. ―No soy amargado. ―Gruñó al escuchar sus pensamientos. ―¿Has podido leer mi mente también? ―El c
Explicaciones y muchos consejos después, Eir y Vidar decidieron llevar a su hijo por un helado, después de todo fue bueno y se dejó examinar sin gruñir más de cinco veces. Muchas veces parece un viejito en el cuerpo de un niño. ―Este ha abierto. ―Radiv tiró de sus padres para subir al ascensor disponible. ―¡No corras, hijo! ―El niño bajó del ascensor y miró a su alrededor, pero no vio a su clon. ―Hoy has estado muy animado, amor. ―La mujer miró a su hijo impresionada, jamás lo había visto con tanta energía, por lo regular siempre está débil. ―¿Te parece si vamos por un helado después de ver al doctor? ―¿En serio, mami? ―La miró con ojos brillantes olvidándose totalmente del resto. ―¡Te amo! ―La abrazó con fuerza. ―Y yo te amo a ti, mi amor bonito. ―Besó su cabeza. ―Vamos, no podemos llegar tarde a la consulta. ―De la mano se alejaron de los ascensores. Eir se llevó la mano al pecho, esa sensación que había estado sintiendo desde que despertó la estaba agobiando, no sabía exactamen
Incontables exámenes y todos negativos. Han pasado una semana y para Vidar y Eir la situación es inexplicable. Su hijo se encuentra mucho mejor de salud y no lo entienden, él no se está medicando. La felicidad de ver a su hijo bien evita que se pregunten que se está ocasionando, es tan liberador para ellos que simplemente están agradecidos con el mundo porque su hijo no es el mismo de antes, ahora es una versión más vivida y traviesa. Radiv despertó con un solo pensamiento, ver a su clon y ahora nada se lo podrá evitar, él quiere conocer más a su nuevo amigo y descubrir porque tienen poderes y son tan iguales, tantas citas no les ha dado la oportunidad. Esta vez, fue él quien decidió visitar la habitación de sus padres. ―¿Por qué nalgueas a mamá? ―Vidar miró a su hijo en shock. ―¿A qué juegan? ―Lo miró extraño. ―Eh… al caballito. ―Eir deseaba carcajear, pero los fuertes azotes de su marido no eran para nada divertidos. ―Yo también quiero jugar. ―Pidió corriendo a la cama. ―¡Eh,