Damon LennoxDamian era mi hermano gemelo. Habíamos crecido juntos, aunque él pasó por algunas cosas mucho peores que yo. Él era quien debía haber sido el Alfa de la manada, pero no le interesaba el puesto. No le gustaba la visibilidad.La conexión que ambos teníamos era algo que la gente llamaba extraordinario. Pocos hermanos gemelos tenían la habilidad de tener una enlace y conexión mental como la que nosotros compartíamos.Era por eso que quería ocultarle a la humana, porque si él la veía y resultaba que también compartíamos mates como todos los casos anteriores en los que había una conexión mental, pues realmente estaría en problemas, porque Damian no descansaría hasta que ambos termináramos con ella.Y tal vez él pensaría que se trata de nuestro pasado, tal y como lo pensaba Dereck. Pero no era solo por el pasado. Se trataba también de las inconcordancias físicas que teníamos ambas razas. Ella moriría más pronto. Y nos arrastraría con ella a la muerte si completábamos la unión.H
Eva NorthPermanecer en la habitación durante el resto del día fue lo mejor que pude hacer. Los demás se habían ido a realizar sus labores en la manada y yo me había quedado completamente sola en la casa, así que dormir fue mi mejor opción para descansar un poco más ya que la noche anterior solo me la había pasado revolviéndome con las sábanas alrededor de mí.La otra mitad la pasé dormitando mientras veía la luna por la ventana de mi habitación.Sabía que los humanos creían en un Dios todopoderoso. Al igual que los hombres lobos. Pero su creador todopoderoso era la diosa Luna. La diosa que los había creado y depositado en la tierra para su debida convivencia con los humanos.Y como yo había pasado toda mi vida en una manada, ella era todo en lo que me permitía creer, aunque siempre encontrara una forma de repudiar un poco más a sus creaciones.Pero lo poco que había conocido de esta manada me había dejado claro que no todos eran como los de mi antigua manada. No todos repudiaban a lo
Eva NorthEl último día que vi a Damon fue el día en el que tocó a mi puerta para exigirme que me mantuviera guardada en la casa. Si bien ese día la rabia bailó a través de mí e hice todo lo contrario a lo que me había exigido, durante los últimos seis días había sido todo lo contrario. Lejos de levantarme en contra de sus peticiones me vi aceptándolas y manteniéndome fuera del radar durante todo este tiempo.Había salido cada vez que podía a explorar el lugar y pensar en una vía de escape, pero con cada día que pasaba lo veía cada vez más difícil.Podría resultar extraño, pero la verdad es que ni siquiera había sentido pasar aquellos seis días.Casi siempre uno de los chicos se mantenía alrededor de la casa y dialogaba con él. Las comidas ya eran un poco más divertidas porque tenía muchas personas con las cuales compartirlas.Mi vida había dado un enorme giro y aunque habían demasiadas cosas que cambiar, prefería verle el lado bueno a todo mientras esperaba mi momento.Liam había res
Eva NorthDamian resultó ser todo lo que no creí que fuera.Cuando me explicó quien era para él, lo que significaba que me había encontrado, en quien primero pensé fue en su hermano y en si tendría la misma reacción con él. Pero cuando entendió mi situación, se detuvo y dio paso a mis necesidades, no a las suya.Y solo ese pequeño detalle me hizo sentarme junto a él y quedarme a hablar durante más tiempo del que me propuse, juntos, uno al lado del otro en aquella roca.Y aunque no volví a tocarlo durante todo el tiempo en el que hablamos, había deseado cada segundo volver a sentir ese tirón de cuando nos tocamos por primera vez.Y cuando llegó la hora de despedirnos esperé solo irme, pero él hizo algo más que eso.—Volveré a verte —aseguró —no importa si sigues manteniéndome al margen de tu vida o si decides rechazarme totalmente. Solo necesito tenerte cerca, así que con un par de minutos de tu día tengo suficiente.—Podríamos volver a vernos —aseguré y la sonrisa que escapó de sus la
Damian LennoxCuando me di la vuelta y me fui solo desaparecí del campo de visión de Eva para poder ver como se adentraba en la oscuridad del bosque y lo atravesaba sin inmutarse hasta la casa de los soldados.En cuanto ella entró por la parte trasera de la casa me recosté de uno de los árboles y respiré profundo llevando a mi nariz el aroma que había dejado en el aire.Tomó todo lo que tenía de fuerza, energía y decisión el no tomarla y marcarla y llevarla a cualquier lugar donde pudiera desnudarla y que ambos nos conociéramos total y completamente.Pero ella dijo que no y no importaba que en algunas manadas hubiesen leyes que apoyaran la moción, yo no empezaría defraudando su confianza de esa forma.Todo lo que quería de ella lo obtendría por buenas vías, no por las incorrectas desde el momento cero. Lo que parecía haber hecho Damon con ella en cuanto la vio.Por eso me tomé la molestia de ubicar su paradero a través de nuestra conexión mental y me detuve frente a él sabiendo que ya
Eva NorthHabía escuchado de las fogatas que se hacían en el medio del bosque y se convertían en una fiesta indudablemente inigualable.Pero nunca había tenido la oportunidad de ir a una, porque como siempre, prefería irme a casa antes de estar en un bosque repleto de cambias formas que buscarían cualquier forma de sacarme del camino.Y decir que estaba ebria y me arrojé por un acantilado sería la mejor forma de sacarme de en medio.Pero eso no evitó que cuando Max me invitara a una de esas fiestas que se hacían en la manada, dijera que sí.Dije que si porque por primera vez quería darme la oportunidad de conocer la otra cara de este mundo sobrenatural que me había mantenido aislada aun cuando vivía en medio de donde sucedía toda la acción.Cuando dieron las ocho de la noche ya había cenado y me encontraba peinando mi cabello para arreglar las ondas naturales que se le solían crear y me coloqué unos jeans rotos, un top corto y lazos cruzados en el pecho y una chaqueta jean para el frí
Damon LennoxAsistir a esas fiestas era algo esencial que tenía que hacer aunque no siempre estuviera de acuerdo en venir.Ese día en específico no tenía intención de pisar el bosque, pero me vi arrastrado por Débora. E imagínense mi sorpresa cuando al llegar me encuentro a la humana pegada a Clinton pegada a ella como una sanguijuela.Y toda la puta noche estuvo bailando con cualquiera que se le acerara. Lastimosamente tomarla del brazo y sacarla de aquí se vería demasiado mal, pero era lo único que quería hacer.Por eso, cuando Max Clinton terminó besándola tuve que darme media vuelta y salir de aquel lugar olvidándome de que tenía que avisarle a Débora, pero ella encontraría la forma de regresar cuando no me viera por ningún lado.Por el momento yo necesitaba huir para evitar cometer una locura o dejar en evidencia que la humana me pertenecía por derecho.Damian estuvo a punto de dejarnos en evidencia cuando su único ojo de color cambió, pero por suerte nadie notó aquel hecho y sol
Damian LennoxLos últimos cinco días habían sido probablemente los mejores días de mi existencia. Casi todas las noches me reunía con Eva y hablábamos durante horas antes de acompañarla a la casa de regreso y dejar un beso en su mejilla cuando se descuidaba. Aunque las últimas veces lo había esperado.Ese día me encontraba en la oficina de Damon y aunque parecía estar deseando que me fuera de vuelta a mis quehaceres para que así le dejara de hablar de Eva, podía notar el cambio en su mirada cada vez que me veía entrar por esa puerta.Antes no había tenido demasiadas razones para quedarme en el mismo lugar por demasiado tiempo, pero ahora que estaba Eva cerca tenía una razón para ir a resolver todos mis asuntos y regresar junto a ella definitivamente.—Espero no vengas a dar tu monólogo de todo lo que aprendiste de ella la noche anterior.—Estoy seguro de que te mueres de la curiosidad por saber.—No lo hago —chistó fingiendo estar desinteresado, pero yo sabía que realmente no lo estab