Me encontraba desde la noche anterior leyendo el libro que mi hermano sacó de él con magia. Cada página se tornaba con mucha dificultad para leer por sus contextos explícitos, las guerras, las traiciones, los nombres de personas que no volverían a pisar aquel lugar, hasta que…La Familia Clives.Al leer eso a mitad de una página en blanco, sabía que lo que seguía era la historia de nosotros. Lo sabía, este era un libro que relataba todo cuando acontece, más que nada, es un libro mágico, no debe estar en el lugar exacto o en manos de alguien para saber qué está pasando en sus tierras. Al tomar la esquina de la página, respiré profundo para pasar, cuando una brisa abre las ventanas de par en par. Me pongo de pie, dejando el libro en la cama, caminé hasta las ventanas para mirar y cerrar las ventanas. Me da por salir a tomar agua, cuando veo a Asher plácidamente dormido. Lo miré una última vez para regresar a la habitación y ver nuevamente el libro. Me siento en la cama y lo tomo en mis
Sentada con Alisher en la mesa de la cabaña, luego de un par de semanas sin que Asher reaccionara. Alisher había estado estas semanas en busca de razones para lo que estaba sucediendo. Pero no obtuvo una respuesta que la convenciera, unos decían que era la humanidad dañando el universo y otros diciendo que era el infierno queriendo reclamar el poder. Más que nada, hay sujetos en el infierno que no están dispuestos a dejar a algunos tomar el trono celestial. Algunas aceptan qué estar en el infierno es su realidad y por eso dan lo mejor de ellos. Estas semanas con Alisher he recordado muchas cosas, en principal nuestras primeras enseñanzas en Amalfinas. Miraba a Asher para saber que respiraba. –¿Él estará bien? –dije angustiada, esperando que la respuesta de Alisher fuera consoladora. –No lo sé. He conocido ángeles que quieren usar el poder demoníaco. Y mueren en el intento, no había visto un caso de un demonio… –sus palabras hicieron que me preocupara más. Quizás Asher no sobrevivirí
Habían pasado solo horas de lo sucedido anteriormente, íbamos en un auto en carretera abierta a un lugar de mayor seguridad, había estado yendo de lugares en lugares que había olvidado a mi abuela y amigos por completo. Le mandé un mensaje a mi abuela con la esperanza que no me rellenara con regaños cuando volviera, busqué el contacto de Daniel y Jenna, y les dejé un mensaje para que supieran que estaba bien. Miré por la ventana y suspiré, Asher pasó su mano en mi muslo y le sonreí. Luego de un par de kilómetros, se detuvo en una gasolinera para comprar cosas para comer y llenar el tanque, él se bajó y me regaló una sonrisa. El sonido de mi celular hizo que no lo terminara de ver llegar hasta la tienda, cuando vi que mi abuela había mandado una foto, al igual que Daniel y Jenna. Me pareció extraño que los 3 respondieran con fotos, cuando vi la de mi abuela, mi corazón latió con fuerza, ella se encontraba con una mordaza y sus manos atadas a lo que parecía un tronco en una montaña con
Abrí mis ojos para darme cuenta de que estaba mirando el cielo de una noche muy estrellada, me maravillé al ver semejante maravilla. Cuando sentí una mano junto a la mía, miré a mi lado y estaba Asher, volteé a mirarlo y verlo sonreír con algo de dificultad, me acerqué para darle un beso, él me sonrió con una sonrisa más completa. Luego lo beso nuevamente, pero no me separo de sus labios, él se ríe junto a mí. Y es cuando me acuerdo, que me quedé dormida en la mitad de un cerro antes de ir a salvar a mis seres queridos, brinqué del susto y me di cuenta de que realmente estaba sucediendo. Ayudo a Asher a levantarse, el cual ya estaba mejor que cuando llegamos. –¿Puedes con ello? –dije preocupada. –Claro que sí. No voy a fallarte luego que me dieras aire. –dijo. Plantó un beso en mi frente y continuamos nuestra subida al cerro, Alisher, no había vuelto a dejar rastro de ella. Miré a mis alrededores y no había nada. Sin duda, nos había abandonado. Miré mis manos temblorosas al estar s
Estaba asustada por los portales que habían estado saliendo en la parte de arriba del cerro, estaba segura que esto tenía que ser plan de Artemisa, así que corrí hacia Jenna, Dan y mi abuela, para realizar un escudo circular y así llevarlos a la parte baja del cerro antes de que todo se pusiera complicado. Miré una última vez para ver por el portal, para ver una cara similar. –¡Hola! No me digas que creíste que te abandoné… –Alisher, sale del portal junto a mi hermano detrás, sonreí ante gran sorpresa.–No iba a dejar que nos matara alguien tan fuerte. –dijo ella, mi hermano me dio un abrazo. En ese momento, empecé a escuchar aplausos detrás de nosotros. –Bravo, la familia está reunida ¿eh? –dijo Artemisa levantándose del suelo y caminando hacia nosotros. –No le darás un abrazo a tu hermanita, ¿Levis? –dijo ella riéndose. Ella empezó a caminar hacia nosotros, y por acto de desconfianza, Levis sacó su espada de la funda que se encontraba en su cintura. Ella retrocedió ante tener su
–A sus posiciones, Lucían ha vuelto… –Danson gritó con tanta seguridad que todos en la parte de arriba del cerro comenzaron a sentir terror. Asher, se puso en posición detrás de Danson, lo que me pareció extraño ya que se suponía que Asher era parte del infierno. Miré que cada quién se encontraba en una posición, Alisher me tomó y corrimos detrás de un árbol cercano. –Todos tienen una tarea cuando Lucían escapara, pero yo nunca me aprendí la mía ya que nunca creí que… –ella se notaba asustada, no estaba lista para un suceso así de grande. La intenté tranquilizar, cuando una neblina comenzó a tapar todo el cerro y yo me quedé estática, sentí los pensamientos de algo lleno de odio, rencor, enojo, estaba totalmente hecho una furia, sentía cada uno de sus dolores del pasado. Miré a Alisher, y le di un poco de valor, sin duda, Lucían era una entidad que debí
Despierto una mañana luego de 3 días la acción que tuvimos, Alisher, se encontraba sentada junto a mi cama esperando que despertara.–¡Al fin! Mi hermano se pondrá feliz. –dijo ella. –Bueno, había despertado antes… Pero, quería dormir más. –dije mientras me sentaba en la cama, estaba en una cama de hospital, luego de la guerra, me había desmayado luego de usar tanto poder. Sin duda alguna, hice más cosas en menos de 4 meses de lo que hice en toda mi vida. Alisher hablaba y hablaba, podía oírla solamente, miraba que sus labios se movían mucho, pero ninguna de sus palabras entraban en mi cabeza. Tomé su mano. –Te pediré que me dejes dormir otro rato… –dije tratando de no hacerla sentir mal. –Son los medicamentos, me tienen algo mal. –Alisher se levantó y volvió a mirarme. –Te dejaré, pero no te inventes algo como los medicamentos, somos ángeles nos regeneramos. –dijo riendo y saliendo por la puerta. Miré el techo de la habitación y luego me levanté para mirar por la ventana, era un
No soy perfecta, es raro para ser un ángel, más raro aún porque mi madre era una de los celestiales; tengo la gran carga de volverme una celestial y mi hermana mayor, puede iniciar ese proceso pronto, pero no es algo que yo desee o anhele ser. Mi hermana mayor Artemisa ha luchado por no dejar que la oscuridad la lleve. La oscuridad nos busca a la edad de los 17 y 18 años, allí se decide si seremos ángeles o demonios. Es algo absurdo, solo de pensarlo. Pero mi hermana acababa de cumplir 18 años. Yo apenas tenía 10 y no entendía nada. Estábamos en la ceremonia de elección. Se organiza una ceremonia para saber a qué lugar pertenecemos.-Bien, estoy nerviosa. Pero confiada de que la oscuridad no me llevará -dice Artemisa mientras arreglaba su vestido blanco para la ceremonia. -¿Hermana? ¿Si te lleva? ¿Te acordarás de mí? -dije caminando hacia ella nerviosa. -No quiero que te alejes como mamá hizo. -Dije tomando su mano y ella se arrodilla, tomándome de ambas manos. -A ver Hestia, si me