Capítulo 7

Franco notó la ausencia de Daniela cinco minutos después de que esta se fuera y, veinte minutos más tarde, despachó a aquellos clientes que le causaron gran estrés.

—¡Rayos! —vociferó cuando se vio solo. Estaba que explotaba del enojo y la impotencia, pero entendía que su amiga no podía esperar más. Suspiró al dejarse caer en la silla y el recuerdo del beso con Daniela lo hizo sonreír.

—Eso fue increíble. Fui un tonto por no darme cuenta de lo mucho que me gustas. ¡Y yo te gusto a ti! Mañana mismo te confesaré lo que siento y te pediré que seas mi novia. Cómo deseo verte otra vez, mi bella ratoncita —Con ese pensamiento en la cabeza, Franco continuó con su trabajo.

***

Con una rosa roja en manos, una caja mini de helado y un conejo de peluche gris, Franco se dirigió a la casa de Daniela.

Era imposible no sofocarse al caminar, debido a los latidos fuertes de su corazón, la respiración errática y los temblores de sus manos. Estaba tan nervioso que tenía náuseas y sensación de vértigo.

L
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo