Emely miró las llamadas, pero no se atrevió a responder, Adrien por su parte no le quedó más que marcharse a casa y meterse a la cama, lleno de angustia, recordando cada momento compartido con ella, y en lo que ahora Renata había confesado, cada vez sentía que estaba más cerca de encontrar la verdad, pero los compromisos que su madre le estaba imponiendo parecían ser una piedra en el camino. Le dolió mucho imaginar cómo Emely había sufrido tanto desde que era una bebé al ser abandonada por Renata.— Perdón por lo que te ha dicho mi madre, está muy asustada por lo que ha sucedido — escribió en un mensaje como último intento para comunicarse con Emely, sin embargo, los minutos pasaron y el teléfono de Adrien permaneció en silencio. Emely no respondía a su mensaje, y la angustia de Adrien aumentaba con cada segundo que pasaba sin noticias suyas.Finalmente, después de esperar durante lo que le pareció una eternidad, Adrien decidió llamar a Emely una vez más. Sin embargo, su llamada fue d
La mirada de Silvia se tornó fría y calculadora. Respiró profundamente antes de responder — Estás hablando tonterías, Emely. No hay ninguna verdad oculta. Eres mi hija, y lo sabes muy bien. Deja de inventar historias absurdas, que tu hermana haya triunfado y tú no, eso no es culpa de nadieEmely, a pesar de su miedo, decidió mantenerse firme en su posición. Había llegado a un punto de quiebre en su vida, y ya no podía seguir siendo manipulada por Silvia.— No te creo, madre. Si realmente soy tu hija, entonces demuéstralo. Cuéntame la historia de mi vida desde el principio, desde mi nacimiento. Quiero detalles, quiero pruebas. Si eres capaz de hacerlo, te creeré, por qué me has hecho de menos siempre, me has hecho sentir como tú dices: un adefesioSilvia se sintió atrapada por la demanda de Emely. Sabía que no podía revelar la verdad detrás de la historia de ella, pero tampoco podía permitir que se fuera de su lado, pues ahi en casa la tenía bajo su merced, fuera de ella sabía que podí
Los gritos provenían de la madre de Adrien, quien había entrado en la habitación sin previo aviso y los miraba con furia. Esa mañana había llegado desde temprano a buscarlo, dado que en la prensa amarillista, las fotos de él con Renata no se habían hecho esperar y ya muchos diseñadores seguían cancelando contratos con la empresa. Emely se sobresaltó y se incorporó rápidamente, sintiendo una oleada de miedo. Adrien, por su parte, se sentó en la cama con determinación, protegiendo a Emely con su presencia. — Qué haces aquí, y por qué irrumpes mi privacidad — gritó enojado — Venía a alertarte de lo que está pasando en la prensa y con tus inversionistas, y esta golfa embaucadora en cambio de estar ya en la oficina solucionando estos problemas, atendiendo a los empresarios está aquí metida en tu cama — gritó Lucrecia con rabia. Mirándola con desprecio, Emely se sintió culpable por meter a Adrien en tantos problemas y sobre todo por no ver que ya eran las nueve de la mañana y ninguno de l
— Renata — logró decir Adrien tras cerrar la puerta con voz agitada, se secó el sudor de la frente e intentó calmarse para poder continuar hablando— Lamento haberte provocado ese escándalo en la Prensa, quizá haya alguna manera de arreglarlo — respondió ella de prisa— No viniendo aquí — respondió de golpe Adrien— Lo siento — dijo Renata avergonzada— Descuida, también estoy alterado, esto ya me tiene enfermo, es como si la Prensa, quisiera desbaratarme en un par de días, y mi madre me tiene más que fastidiado, pues esto me ha traído grandes desventajas con otros diseñadores que participarían en mi show — contestó Adrien agotado y buscando su silla para reposar— Ves, lo tenemos, esa puede ser la solución a este caos, voy a trabajar contigo, hagamos un contrato, yo presentaré mi ropa en tu show y así tenemos a la Prensa callada — dijo Renata rápidamente. Adrien se quedó en silencio un momento, de verdad esa era una buena oportunidad para la empresa también, pues Renata era muy recon
— Ve a la oficina, espérame ahí — dijo Adrien sabiendo que no le quedaba otra opción. Valeria salió inmediatamente.Emely se volteó de nuevo, y disimuló su enojo ordenando unos papeles — todo va a pasar, no permitiré que te acuse por lo de Silvia, buscaré la forma de solucionarlo, y en cuanto a lo otro que hablamos, por favor no te vayas — suplicó acercándose a ella y susurrándole en el oído.— Está bien — dijo incapaz de discutir más, sabía que si hablaba las lágrimas correrían y no habría modo de defenderse— Llamaré a Renata que se reúna contigo en un momento, ella te mostrará sus prendas las eliges, y haz una nueva campaña para buscar modelos — le indicó Adrien— ¿Algo más? — logró preguntar ella— Que Renata no sepa tu apellido — dijo y salió de la oficina evitando que ella pudiera preguntarle más. Emely se quedó inmóvil en medio de la oficina más llena de dudasAdrien envió un mensaje inmediatamente a Renata para que se presentara en la empresa, y se preparó para poder hablar co
— Tenía yo dos años, cuando dijeron que papá había muerto, el hombre para el que se suponía era lo más especial que tenía, pero cuenta mi madre, que ese día, junto con la entrega del cuerpo, llevaron también una niña, diferente a mí, de piel clara, dijeron que esa criatura era mi hermana, que ella había sobrevivido al accidente ocurrido en la carretera, y que de su madre no se sabía nada, nadie supo si había muerto, si iba en el auto con mi padre, o si había huido, mi padre era, bien sabes, el dueño de muchas empresas, y sin embargo, pese a su fama, nadie sabía del porqué él tenía una hija que no era de su esposa, así que mi madre que era muy recatada en esos aspectos, no supo cómo actuar, y solo tomó en brazos a la pequeña criatura que arruinaría mi vida, y lo mantuvo en secreto, hasta el día de hoy que lo confieso ante ti – contó cabizbaja, hablar de eso le dolíaA Adrien eso no le impresionó nada porque era lo que Renata le había contado, pero deseaba conocer sus sentimientos hac
Emely, con lágrimas en los ojos, se aferró a Adrien como si fuera su única tabla de salvación en medio de ese mar de incertidumbre. Sus palabras la habían conmovido profundamente, pero el miedo seguía latente en su corazón.— Adrien, no puedo evitar sentirme asustada. Mi vida ha sido una mentira, y no sé si estoy preparada para enfrentar la verdad, sea cual sea. No quiero arrastrarte a mi caos — respondió entre sollozosAdrien secó las lágrimas de Emely con sus pulgares y la miró con determinación — Emely, esto no es una casualidad. Te encontré en medio de este caos porque nuestro destino está entrelazado, o me importa lo que descubramos, lo que importa es que estaremos juntos, apoyándonos mutuamente y que ya no vivirás engañadaEmely asintió conmovida, pero todavía preocupada — Lo entiendo, Adrien, y te agradezco por tu amor y apoyo, pero necesito tiempo para procesar todo esto. No quiero huir de ti, pero necesito enfrentar mis demonios y descubrir mi identidad, además tengo miedo de
Lucrecia no soportó ver la escena, pero también sabía que no podía delatarse ante ellos, así que prefirió regresar a su casa con un nuevo plan en marcha, debía actuar lo más rápido posible para evitar que Adrien siguiera cerca de Emely, no lo quería con ella, no le parecía atractiva ni era famosa, y ella pensaba solo en eso, en su apariencia familiar ante los medios de comunicación. Adrien y Emely entraron a la nueva casa, ella colocó el bolso en la primera repisa de la habitación — Gracias, Adrien, de verdad, por hacer todo esto por mí — dijo finalmente convencida que no podía seguir fingiendo una distancia con el hombre que amaba — Haré lo que sea por ti, y ya no hablaré más, voy a demostrártelo — Contestó Adrien con determinación ante la luz apagada de los ojos de Emely, quien se tiró a la cama a pensar — Yo por mi parte, voy a contemplarte mientras pueda. Voy a guardar en mi alma estos momentos en los que puedo verte, escucharte, sonreírte, recibir de ti un beso furtivo, una car