Tomo del vaso mientras la señora Mary explica esto. Charla de la deshidratación y la ansiedad, habla de cómo hacía que sus estudiantes bebiesen bastante agua en sus días de maestra. En todas estas, me siento como una niña que escucha a su maestra atentamente.—También estas son buenas… — ella saca d
—Me siento como una… — suspira.Contengo mi sonrisa.—Bueno, ya que darás la gran noticia en un mes. ¿No es buena idea ir preparando el baby shower? — propongo.—Ni había pensado en eso, pero ya que serás la madrina, encárgate de eso con mi mamá — menciona Sara.Quedo asombrada y en shock. Sara no m
—¿Qué está pasando aquí? —pregunto sospechosa a Sara.—Tú sólo deja que todo fluya… — aconseja abriendo la puerta de mi lado.Le hago caso o, mejor dicho, me esfuerzo por eso, nos despedimos dándonos un beso en la mejilla, y voy a donde Jesús. Me he guardado el examen el bolsillo del pantalón. Al ll
Contoneo mis caderas de manera rítmica sobre su cuerpo, estamos unidos en el centro, allí donde solíamos estar unidos cada noche que pasábamos juntos. En otras palabras, casi cada una de las transcurridas desde que la parafernalia con cierto corrupto finalizó.Loren comienza a llamar mi nombre cerca
No puedo evitar notar el rostro de tristeza de Lorenzo, él había dicho que no le cedería nada a sus hermanos. E igual fue a ofrecerle una parte, y no sólo eso, sino que ya está preparado para la reacción de sus hermanos y negociar con ellos.—¿No era más fácil ofrecerle lo que les quieres ofrecer re
—Agregar a Hidalgo y Tzar, para Richard; y mi bote para mí. Con ello, firmaríamos el acuerdo — termina diciendo Julián.Me limpio el oído para asegurarme de no haber escuchado mal.—¿Los caballos y el bote? ¿Eso es lo único que quieren? — pregunta sorprendido Lorenzo.—Sí… creemos que… que ellos son
Soy el centro de atención, al tener todas las miradas en mí. Es como si el tiempo se detuviera, y en lo que me han visto se han quedado callados, fijos en mí. Sudo en partes que ni sabía podía sudar.—Hola… ¿cómo están? — pregunto a mi familia.Espero los gritos, espero los reclamos, pero de repente
Narrado por Lorenzo Lewis3 meses después Cuando pensaba que no podía ser más feliz con Sara amándome, de repente, superaba el nivel de felicidad del día anterior. Hace unos meses creí haber llegado al pico de ella cuando aceptó mi propuesta de matrimonio oficial mientras estábamos de viaje por Fin