No podía creer que estuviese haciendo esto, pero lo estaba haciendo. Espiando a un ex con un ex. Es que la combinación era apoteósica e hilarante. En lugar de estar descansando este fin de semana, me tocaba estar aquí con Luciano, en su auto, a las afueras del departamento de Mateo.Luciano aparente
Luciano no se conforma con mi propuesta, la insatisfacción es latente en él. También su manía por sorprenderme de la forma en la que lo hace, de repente arranca pisando el acelerador a una velocidad imprudente. Me pongo el cinturón de seguridad lo más rápido que puedo.—¿Podrías conducir como alguie
El dolor de una traición no se asemeja al de otra. Cada traición se clava en tu piel y deja una cicatriz particular. He tratado de superar los fantasmas del pasado y de imponerme sobre el resentimiento hacia mi media hermana Amanda, pero verla conectada in fraganti con Elizabeth, es mucho para mí. Y
—Le suelo cortar el cabello aquí a Amy con cualquier peluquera de turno. La dejó un rato y regreso pronto. No conozco a esa estilista. ¿Vale? — impone Amanda.Me vale una hectárea su intervención. Es peor ahora. ¿Amanda iba a dejar sola a la niña con esta mujer? La paranoia me invade. Veo a Elizabet
—No te he llamado porque vi todo lo que necesitaba ver — digo buscando calma sin éxito.No sé qué haré si Mateo está relacionado con los Kosnikov. Sería demasiado para mí. Y lo más aterrador, Amy, Luciano y yo estaríamos en un peligro inminente.—Yo también lo he visto con tu comportamiento. Nunca t
Narrado por Luciano BrownNo sabía cuándo parar, me valían un bledo las advertencias de peligro y estaba hecho para apostar cualquier precio. Incluyendo mi integridad. El mismo cuento de toda mi vida, sólo que en esta ocasión un tanto más viejo.Esa es la explicación más o menos buena con la que pue
Mateo continúa conduciendo porque el tránsito ya ha avanzado. Todavía no se percata de que estoy por acá. Estaba batiendo records en la posición en la que estaba también, mi espalda no era la misma de antes tampoco.—¿Qué pudiste hablar con Amanda? ¿Pudiste persuadirla? — pregunta este rendido.—¿Pe
La noche ha llegado y la zozobra de no saber dónde está Luciano todavía es potente. Nada que me contesta las llamadas, ha apagado el celular, sobra decir que tampoco ha tomado la iniciativa de contactarse por su cuenta. Desde que llegué a mi departamento con Amy sumamente inquieta, no he parado de p