—¿De qué… de qué querías hablar conmigo? — digo algo temblorosa.
—¿Cuán grande fue la pelea que tuviste con Mateo como para que te vengases de él acostándote conmigo? — cuestiona con un toque de tristeza y auto desprecio.
Por primera vez desde que me levanto pienso en Mateo. En cómo “su tiempo” se