Hooolis. Espero que disfruten de este par. El próximo cap será su travesía en la luna de miel.
Jeremy —Ya estamos aterrizando— avisa la azafata después de más de 27 horas de vuelo y yo solo gruño. Mi humor ha estado cada vez peor porque no puedo tener el jodido cuerpo de mi mujer. ¡Dakota! Quien pensaría que sería ella la que me hiciera sentar cabeza. Joder, ni en otra vida me hubiera imaginado casado. Aún no me lo creo. —Tranquilo, cariño— dice en burla aunque esa simple palabra de ternura, me pone como un tren en el corazón y mis partes más preciadas —Ya llegaremos, aunque posiblemente quiera detenerme a comer primero— finge inocencia y la fulmino con la mirada por provocarme. —No te dejaré salir de la jodida habitación cuando aterricemos y lleguemos— miro como aprieta sus piernas imaginándose lo que vendrá y se levanta la esquina de mi labio con satisfacción Me vuelvo a ajustar la erección porque de solo pensarla a ella conmigo a solas en un cuarto, me hará levantarme y llevarla al cuarto de atrás sin importarme si aún no hemos aterrizado. Como travesura, le agarro e
Dakota Despertar al lado de Jeremy es todo un sueño húmedo. El hombre tiene el rostro relajado mientras su respiración sigue de manera y uniforme. Levanto la sábana y puedo ver el cuerpo que me comí y viceversa, en todo el día de ayer. A pesar de que fueron muchas horas de vuelo, el hombre tenía energía para actuar como un adolescente cachondo. Tres veces me tuvo anoche, Joder, las tres muy buenas. El hombre sabe cómo complacer, imagino mi cara ahora de recién follada. Me levanto con cuidado de no despertarlo y me meto en la ducha, necesito quitarme el olor a sexo que llevo. Al salir veo que aún no se despierta, y como quiero darle una sorpresa, me visto rápido con un vestido corto de vuelos color azul claro y unas sandalias bajas, de las cosas que nos dejaron ayer en un momento de interrupción en nuestra intimidad. Me detengo antes de salir de la habitación para darle otro vistazo y suspiro al pensar en todo lo que tuve que aceptar ayer, no sé si es que este hombre tiene poder de
Dakota Decir que he pasado unos días maravillosos, sería un eufemismo. Todo fue extraordinario, y sin contar lo bien que se ha portado Jeremy. Y pensar que quería hacer todo esto por un contrato, aunque todo inició así. Lo miro haciendo unas llamadas de la empresa, y aprovecho que no me ve para comérmelo con los ojos. El es uno de esos hombres que solo buscaba para una noche porque lo tomaba por mujeriego, nunca me hubiese imaginado casada con él. Miro mi anillo como prueba de que todo si pasó y sonrío recordando como sucedió todo. Definitivamente Jeremy es un hombre que suele planificar las cosas. Estos cinco días, hemos estado recorriendo la isla y los lugares que aún no habíamos visitado, por supuesto en la noche lo que menos hacemos es dormir, pero eso está bien para mí, me encanta estar con él. Cuando cuelga, viene con una sonrisa hacia mi, me abraza y como siempre que parece que no puede resistirse, me da un beso profundo. Y no negaré, me encanta que lo haga. —¿Nos vamos?
Dakota Me siento terriblemente mal, he vomitado como dos veces en el camino, no pude dormir en estás 24 horas de vuelo y el dolor de cabeza me amenaza con desmayarme. Ni siquiera he probado bocado desde ayer que salimos del bungalow. Para cuándo pisamos Los Angeles, mi corazón palpita aún más rápido por la anticipación, solo quiero tener a mi pequeña en mis brazos y luego buscar que Jeremy me perdone. Joder, que idiota fui. Mi esposo no me ha dirigido la palabra desde que salimos de Las Maldivas, y lo entiendo, cree que no confío en él, que le oculté cosas porque aún me veo con Harry. Si supiera que no está ni cerca de eso, solo lo quiero a él, desde antes que estuviéramos juntos en San Francisco, me di cuenta que estoy enamorada de él. Ni siquiera intento hablarle porque estoy bastante segura de que me gritaría. Tiene un temperamento fuerte desde que lo conocí. Su mandíbula está apretada y los nudillos blancos de tanto que los ha llevado apretados dentro de su bolsillo. Cuan
Dakota La tensión es insoportable, no solo por el hecho de que mi amiga y el investigador se cayeron,al parecer, mal desde el principio, sino porque la madre de Harry se niega a dar información sobre este si Jeremy no habla con ella. —Por favor— ruego desesperada queriendo saber más de mi niña. Escucho a Jeremy gruñir y siente hacia mi —pero primero dime dónde está ese desgraciado— Jeremy no esconde su molestia —El está en una de sus propiedades recientes, a unos 20 minutos de aquí. —¿Está segura?— ella asiente y se nota la preocupación en su cara —Me llamó hace unos 10 minutos— nos ve de forma alternada y luego su mirada se fija en mi —Dime Dakota, ¿Que está sucediendo? —Luego le explicó, por favor deme la dirección en un papel para ir por mi pequeña. La señora se va por unos segundos regresando con un pequeño trozo de papel en la mano y me lo tiende, cuando Jeremy busca salir, ella lo toma del brazo —Prometiste hablar conmigo— le recuerda. La duda se instala en
Dakota Al día siguiente, Jeremy aún no había regresado. Llamé a Ari para decirle que aún no me iba a incorporar y le expliqué por encima la situación, quería tener otra semana junto a mi bebé. No estaba lista para volverla a dejar lejos de mi. Intenté llamar a veces a Jeremy, pero el muy idiota seguía con el móvil apagado, sé que no le pasó nada porque lo único que supe, fue que llamó su nana para informar que todo estaba bien. Me sentía sola en casa, a pesar de estar con mi bebé. Ambas salimos al patio a tomar un poco de sol, me sentía a gusto con la Nana de Jeremy que parecía una segunda abuela para mí pequeña. Mi orgullo me dictaba que me fuera a casa, no quería estar en este lugar y menos con las cosas como estaban con el que ahora es supuestamente mi esposo, pero sabía que si me iba, sería una decisión estúpida. A pesar de que Harry ahora está preso y que por supuesto debo ir a declarar pronto cuando me avisen, debo seguir teniendo cuidado por la advertencia de la jueza.
Maratón 1/3 Dakota He pasado el día trabajando, ignorando la puerta cerrada frente a mi oficina. Joder, solo quiero entrar y partirle la cara al tonto del otro lado. Primero por meterse en mi corazón y segundo por ignorarme de la forma en que lo hace. Miro mi reloj, y noto que ya es hora de irme a declarar, así que tomo mi bolso y salgo de allí apurada para que se acabe esta pesadilla. Justo cuando entro en el ascensor y se están cerrando las puertas, lo último que veo es la cara de Jeremy. No tengo tiempo de quedarme a hablar si era lo que él quería. Media hora después ya estoy en fiscalía y toman mi declaración, junto con las pruebas que ya tienen, debe ser suficiente. Cuando estoy por firmar papeles, me encuentro con el investigador de Jeremy que resultó ser el que trajo a Cassandra, no me da muchos detalles, pero está aquí para dar su declaración también. Con dos personas es suficiente. Cuando estoy por marcharme, un oficial se acerca a mi —Señora Jobe, el recluso Harry
Maratón 2/3 Dakota Cuando llego a casa, Nana está arruyando a mi pequeña y discutiendo con mamá porque no la ha cargado mucho tiempo. —mírala— argumenta mamá mirando a Emma —Pide a gritos que sea su abuela quien la cargue. Quiero reír con este par que no se han dado cuenta de mi presencia —Solo me está pidiendo que la libre de ti— dice Nana haciendo enojar a mamá y antes de que se salga de control esto, intervengo. —Buenas, ¿Cómo está todo por aquí?— Nana murmura un gracias a Dios y yo aguanto la risa —¿Cómo está mi pequeña?— pregunto tomándola en mis brazos y llenándola de besos. —Bien, aunque estuvo un poco llorona— responde mi madre haciendo que la otra mujer ruede los ojos y la señale con el dedo murmurando que es por mi madre, para que solo ya la vea. —Bueno, aqui está mami— le respondo a mi bebé que me da una sonrisa donde me muestra las encías rosadas —Nana, ¿Será que le preparas la mamila para dormirla un rato?— ella asiente y se va dejándome con mi madre. Ha