Dakota

Al terminar el juicio, mis nervios son sensibles. Mi padre me abraza y no me doy cuenta que tengo lágrimas en los ojos hasta que él las limpia.

—Ya verás que todo saldrá bien— siento la presencia de Jeremy a mi lado por el olor que reconozco en segundos y mi padre le dedica una mirada fulminante —Y tu y yo tenemos que hablar.

—Lo sé, señor.

Me separo de ellos para ir con Sofía y dejarlos hablando. Además también quiero poner distancia entre ambos porque no quiero ni verle la cara. Cuando estoy con ella, me da el apoyo que siempre ha dado.

—Me alegra saber que ese idiota no se salió con la suya, aunque estoy segura que buscará la manera de joderte— me dice lo que ya sé —¿Cómo es eso que te vas a casar y no me habías dicho?— susurra y el estómago me da un vuelco al recordar el nuevo lío en el que me metí.

—No te había dicho porque no es cierto, eso lo inventó Jeremy en el último momento, ahora estoy en un lío— no me da tiempo hablar porque mi padre nos interrumpe.

—V