Las manos de Naomi quedaron entrelazadas, no daba crédito a lo que había escuchado, estaba desconcertada, todavía no asumía lo dicho por la abuela, como era posible que un secreto estuviera tan oculto, tan escondido, la abuela los miró con calma y serenidad, era claro, siempre la verdad había sido suya, pero nunca de ellos. -Abuela creo que es un tema muy delicado-. -Deja las delicadeces ahora, no es el fin del mundo, nada se está cayendo de lugar, solo sé que era el momento, además, mi salud se deteriora poco a poco, uno sabe cuándo el momento se acerca-. -Abuela eres muy trágica, me parece que es mucho más trágico lo que está pasando…papá tampoco dijo nada, se guardó este secreto con él. Ahora el tema es…Ani no es hija de mamá, ¿En qué lugar la deja esto a ella? -. -Ani sigue siendo hija de papá, es nuestra hermana Naomi, así que la abuela tuvo sus razones y son respetables…mejor hablemos de la madre de Ani abuela-. -Tu padre y Yanira se conocieron muy jóvenes, en uno de nuestro
Juan Carlos y Ani llegaban a Barcelona en el vuelo de la noche, la despedida de los padres de Juan Carlos y sus padres estuvo cargada de emotividad. Ani descargaba su equipaje en la habitación donde Juan Carlos le había indicado, pasarían la noche, cenarían, y en las horas de la mañana después del desayuno estarían de regreso a Cadaqués.Ani tomaba el teléfono para llamar a Yamila, quería saber cómo estaba la abuela.-Señorita Ani que sorpresa, me encanta escucharla tan feliz-.-Yamila…eres muy lista-.-La abuela está dormida, hoy estuvo un poco agotada, cansada, pero en general no es alarmante…de todas formas ella le está esperando--Bien Yamila, eres una gran ayuda en mi vida, te lo compensaré bien-.-Entonces espero ese regalo con ansias-.-Tenlo por seguro Yamila, nos vemos mañana en casa, saludos a la abuela-.Colgaba la llamada, su corazón latió tan fuerte que se sintió con algo de ansiedad. En aquel momento Juan Carlos ingresaba en la habitación envuelto en una toalla en su cin
En la sala de cuidados intensivos, el cuerpo de la débil anciana descansaba, sus signos vitales eran débiles, la familia se encontraba allí reunida, sabían que las horas eran críticas, en días anteriores la anciana mujer había pedido su médico de cabecera. Motivo por el cual había acortado su estadía, Nora era no solo su paciente, era también su amiga, su entrañable amiga.Cuando llegó a la clínica, pasó directamente a su consultorio, para revisar los últimos exámenes, quería mirar todo con detenimiento. En aquel momento Naomi ingresaba, solo dos toques en la puerta y ya estaba allí de pie frente a él.-Juan Carlos por fin llegas, todo está detenido en esta clínica-.-Naomi buenos días, que saludo tan efusivo, me reclamas mi ausencia, no lo tomaré en cuenta-.-Oh, buenos días, aunque ya casi estamos a pocas horas de ir por el almuerzo-.-Pero mi reloj indica, buenos días-.-Jajaja, me haces reír con tus cosas…y…Por cierto… ¿Dónde fueron esas vacaciones o viaje paradisiaco? Te ves más
Candelaria terminaba su relato, los ojos de Ani estaban humedecidos por las lágrimas que parecían querer salir sin que fueran contenidas.-Abuela… ¿Porque papa lo ha guardado tanto tiempo? -.-Fue una promesa hecha entre tus padres, creo que las promesas no se rompen, solo se revelan cuando el tiempo empuja la verdad-.-La mujer que te dio a luz, quiso que tuvieras una mejor vida, que crecieras en un hogar, rodeada de hermanos, tu padre, y la mujer a la que siempre llamaste madre, en realidad desde el día que naciste, ella te sostuvo en brazos-.-Es triste saber que la vida ha pasado siendo una mentira abuela-.-Eres hija legitima de tu padre, mi nieta, sobre eso no hay tema que discutir, y sobre tu madre biológica…no tengo porque juzgar su decisión, ese secreto se fue a la tumba con ella, pienso que estás aquí por algo, tienes un destino que asumir, todos tenemos un destino y debemos caminar en esa dirección cariño.Los ojos de Ani miraban al vacío, a la nada, el sol brillaba…siempre
Ani miró a Yamila con algo de preocupación, la abuela no se estaba sintiendo bien, por lo que era mejor llamar al doctor Render.Tomando su bolso buscaba su teléfono para avisarle a Juan Carlos, esperó algunos segundos, su rostro se iluminaba.-Bien entonces te espero-.-La llevaremos a la clínica donde trabaja Juan Carlos-.-Qué bueno que es médico, así podrá decirnos a ciencia cierta como está realmente-.-No tardará-. Se quedó al lado de la cama, el rostro de su abuela lucia algo cansado.Sentía alguna que otra punzada en su corazón que avisaba que una nube gris se estaba posando, no sabía a perfección como llamarle, pero era como un presagio.Eleonora caminaba por el amplio comedor notando que todo estaba en orden, y pulcramente limpio. Solo dos horas atrás habían aterrizado en Barcelona.Estarían unas dos semanas con la intención de ir a Cadaqués, era un hermoso lugar cargado de paisajes únicos.-Bien…todo está listo-. Colocaba las flores en el jarrón del centro.-Juan Carlos que
Los médicos corrían a la habitación de Candelaria, su condición se deterioraba a paso rápido, Juan Carlos estaba al tanto, no había ido a casa ni por un instante.Naomi ingresaba a paso rápido por la puerta de ingreso al piso donde se encontraba la abuela. Al ver a Emilia y Ani sintió una pequeña molestia, pues a su parecer Emilia no era parte de la familia ni era su amiga.-Ani, si gustas puedes irte, yo me quedaré a estar al pendiente de la abuela-.-Yo también, aquí estaré-.Juan Carlos se acercaba en aquel momento.-Su condición empeora, así que les daré un espacio para que la vean, traten de estar calmadas y tranquilas, su corazón está muy débil-.-Yo lo hare de primera, es mejor despedirse de ella ahora-. Naomi miraba a Ani con algo de molestia.-No vayas a ser imprudente Naomi-. Ani le miró.Juan Carlos se retiraba a paso sereno, miraría los últimos exámenes que estaban ya listos sobre su escritorio.Ani se quedaba mirando el vacío del salón.Emilia le abrazaba.-Habrá que desp
Las coronas y flores en la sala de velación rodeaban el féretro, el reloj marcaba las tres y media de la tarde. Se preparaban para salir al cementerio y despedir a Candelaria. Ani se encontraba de pie mirando al vacío mientras las notas del himno sonaban en el piano.A su abuela le había encantado durante su vida aquella canción, el hablar de una mansión más allá del sol era una hermosa esperanza.Las palabras del reverendo alentaban a los presentes, Candelaria había partido, pero estaría en el pensamiento, en los corazones, y atesorada como cada recuerdo.Lindas palabras que llegaron a tocar cada uno de los presentes.Las lágrimas se hicieron presentes en los rostros sombríos.Salían con rumbo al cementerio.Ani tenía tres rosas azules atadas a una cinta blanca que dejaría sobre el féretro de su abuela.En aquel instante sus ojos se centraron en su padre, su rostro era totalmente inexpresivo, la tristeza se veía a leguas.Al llegar al lugar, el salmo 23, fue escuchado por los present
La mañana fue una diferente a las demás, todos estaban reunidos en torno al gran comedor. María la pareja de su padre traía la bandeja con el café, los panecillos, queso, mermelada, huevos con jamón, y té para la señora Berta.-María no te hubieras molestado, yo estaba por hacer el desayuno-.-No fue ninguna molestia, tu padre hizo casi todo-.-Papá definitivamente decirte que el café está exquisito-. Henry y Luisa decían que no solo era exquisito era una delicia.El timbre anunciaba que Naomi había llegado con su familia.-Buenos días familia, hoy quería ir a llevar flores a la abuela, aunque imagino que estará inundado, muchas personas llevaron sus coronas y ramos-.-Creo que la otra semana iremos todos-. María asintió a las palabras de su marido. -María y yo nos mudaremos aquí, hemos vendido la casa de Barcelona, creo que estar más cerca de ustedes será algo maravilloso-.-Es bueno papa, muy bueno-. Henry le daba un abrazo a su padre.-Naomi hay pan en el horno recién hecho-.-Grac