Al fin el muchachito consentido del estúpido de mi cuñado se digna a aparecer. Resulta que se tomó dos días en casa, seguro para no dar la cara. Solo él me puede dar indicios de los motivos para que Pía se fuera de viaje de la manera en que lo hizo.

Los llamados fueron decenas y no respondió ni los mensajes. Ahora he debido rebajarme a caminar hasta el piso inferior donde trabaja Camila con los modelos, estoy furioso y soy capaz de ahorcarlo si no me da buenas noticias.

Nada más entrar a la sala donde se encuentran, Camila le dice que se tome un descanso. Cuando camina hacia la puerta veo su cuerpo tensarse al verme, pero no se detiene.

-Creo que me debes una explicación – le digo sin más ceremonias y salgo antes que él, esperando a que me siga. Llego frente a una puerta, la abro e ingreso a ella cuando veo que no hay nadie -. Entra, ahora.

Cierro con seguro, porque no dese