Mientras subo el ascensor me suelto el cabello y lo arreglo para que caiga de manera natural por mi espalda. Abro dos botones de mi blusa y me preparo para asaltar a mi hombre.
Apenas se abren las puertas del ascensor me lanzo al vestíbulo que evita entrar de inmediato a la suite. Al abrir la puerta, veo a mi hombre con su pantalón de traje, la camisa con las mangas al codo, mirando por la ventana mientras habla por teléfono.Se gira y al verme esboza esa hermosa que me provoca saltarle encima. Dejo la cartera en el sofá y me acerco a él lentamente.Estira su mano hacia a mí, mientras se dedica a verme de pies a cabeza, tomando más tiempo en mi pecho. Le cojo la mano y me tira hacia él.-Muy bien, señora Cardona, mañana estaré allí a las 7:45. Gracias por su llamado – cuelga y deja su móvil en su bolsillo, me acaricia el rostro con la mano libre, la desliza a mi nuca y me besa con intensidad. Luego se separa y sus ojos se han oscurecido por el deseo -. ¿Cómo ha ido el pr-Alex, tú no eres así – su voz es un susurro -. ¿En verdad estás molesto?-Claro que sí – me pongo de pie para ir al baño a darme una ducha, tengo un plan para mi mujer… o lo tenía -.-No, espera – me toma del brazo y veo que está acongojada -. En todos estos meses jamás me hiciste esto.-Porque nadie te llamó bella ni te invitó a cenar – mi voz grave la hace estremecerse y me suelta -. El único que se atrevió a mirarte y decirme en la cara que te amaba, primero le dejé claro que eras mía y luego le di una paliza, ¿o ya lo olvidaste?Me acerco a ella poco a poco, mientras intenta escapar de mí retrocediendo, acto que le dura poco porque la pared la deja sin más camino, pongo mis manos a cada lado de su cuerpo y bajo mi rostro hasta estar muy cerca de ella. Casi puedo sentir sus latidos acelerados.-Eres mía, solo mía. Tú misma lo dijiste, de todas las formas posibles, cada centímetro de tu cuerpo es mío y no permito que ningún oportunista te llame bella, te invite a c
Estamos en la que podría ser nuestra nueva casa, luego de ver al menos doce antes de llegar a esta. La propiedad tiene una gran entrada que precede a la casa, es solo césped bien cuidado, rodeado de algunos álamos y arces japoneses, estos últimos son mis favoritos, en especial porque se me hacen más parecidos a los Arcianos de Game of Thrones.La casa es de tres niveles, el primero tiene una gran sala de estar, el comedor y una cocina que es un lujo. El segundo nivel tiene dos habitaciones que funcionan como biblioteca y despacho, además de un espacio alfombrado para leer y otras cosas, además de tres habitaciones para visitas, porque no son tan grandes, aunque cada una tiene su baño.Pero el tercer nivel es un sueño, tiene cinco habitaciones bastante cómodas, cada una con su baño, además de la principal que es fabulosa, ocupa todo el ancho del tercer nivel, nada más acceder a ella tienes las puertas a cada lado de dos walking closet, lo que aísla la habitación de las demás. E
Estamos en una reunión con algunos de los proveedores de insumos, entre ellos Gabriel Manterola. Luca no se mira bien, lo que me preocupa totalmente, estamos a dos semanas del lanzamiento y lo necesito a mi lado, ya que si enferma… estoy perdida.Al terminar, Gabriel se acerca para abrazarme y saludar a sus sobrinos, mira a Luca y sonríe.-Me parece que alguien debe ir a descansar. Te puedo recomendar a una chica masajista, es excelente, te quita hasta el resfrío con sus masajes. Podrías ir con tu novia – le guiña un ojo, pero Luca no reacciona como esperamos-.Se para repentinamente y corre hasta su oficina, vamos detrás de él muy preocupados. Menos mal que la reunión ha sido en la sala al lado de su oficina.-Hermano, ¿estás bien? – llamo a la puerta del baño -. Luca... – nada -. Fratello, rispondi o faccio sbattere la porta (Hermano, responde o hago que tiren la puerta).De pronto una voz femenina a mi lado es más tajante.-Abre esa puerta ahor
Han sido meses terribles para mí.Abro los ojos y la vista se me queda pegada al techo. Afuera todavía está oscuro, no me extraña el haber dormido poco y con pesadillas, pensando en todas las mentiras de mi vida.Las imágenes de Pía protegida por Alex en el juzgado, Pía saliendo del hotel junto a él. Pía en una tienda de bebés… muero cada día, sabiendo que he perdido a una mujer espectacular.No sé cuánto tiempo pasa, pero la luz del sol trata de entrar por las cortinas oscuras que me niego a abrir cada día, hasta que llega el mismo ángel de la guarda y hace todo lo contrario a lo que he pedido.A lo lejos escucho abrirse una puerta, luego otra. Pasan unos minutos y se abre la puerta, una alarma que comienza a sonar, pero nadie la para. En lugar de eso llaman a mi puerta, ya sé quién es, así que me giro hacia la ventana, me tapo hasta arriba y me hago el dormido.Escucho que la puerta se abre suavemente y unos pasos apenas audibles se acercan a la ca
Luego de escuchar al doctor decirme que me daría el alta, pero que antes debía darme la noticia de que mi hermana había muerto.La herida causada por la bala perforó la aorta abdominal y no hubo oportunidad de salvarla.Allí mi mundo terminó de desmoronarse. La despedimos dos días después en una ceremonia privada y poco concurrida. Daniela no dejaba de llorar al lado del ataúd de Gabriela, la que parecía dormida tras el cristal.Me acerqué a ella para sostenerla cuando vi flaquean sus fuerzas, ella se aferró a mi pecho y en pocos minutos humedeció mi camisa.-Estaba loca, era desordenada y voluntariosa, pero era mi amiga, la que nunca me dejó desde que perdí a mis padres. Ella fue quien obligó a su hermana me dejara trabajar aquí como empleada doméstica – un enorme lamento salió de sus labios, que me hizo estremecer el corazón-. ¿Qué haré sin mi amiga, mi apoyo, mi confidente?-Me tienes a mí – le dije sin dejar de acariciar su espalda-. No te dejaré sola, al me
Tras el éxito en el lanzamiento de la nueva línea la semana pasada, hoy nos encontramos en la casa de Florencia, la que ha sido preparada para la ocasión.Mi padre me mira orgulloso, posa sus manos sobre mis hombros y me dice con demasiada parsimonia.-Te ves magnífico, hijo mío. Luego de resignarme hace años que no tendría descendencia, estar el día de tu boda es impagable. Más si es con una mujer tan bella y especial para mí, la hija de mi hermano.-Padre, no tienes idea de cuanto la amo. Solo quiero nos declaren marido y mujer, para presumirla mía, solo mía.-Como terminé haciendo yo con tu madre – se ríe y yo trato de ver el chiste en eso -. Ya sabes lo que te espera a mi edad, vas a tener cuerda para rato.- Papá, por favor - me toco la frente con los dedos -. Todavía no sé como mi madre no te mató cuando se enteró.-Una sonrisa, un beso y un “te amo" es suficiente para aplacar la ira más grande de la mujer que amas. Y lo que tienes ent
Un mes después…-Vamos Pía, puja. Tú puedes – el doctor no deja de animar a Pía para que dé a luz a sus gemelos -.-Eso hago – pero la verdad es que no, Pía está esperando a que su esposo llegue -.Alex estaba en una reunión con una galería en Florencia, en donde dará clases particulares mientras sus hijos cumplen la edad suficiente para volver a Chile. Justo antes de cerrar el trato, recibió el llamado de Ana, diciendo que Pía había entrado en trabajo de parto.Se despidió con premura y se subió a su auto, creyéndose corredor de carreras. Sin embargo, a la policía no le gustó su velocidad y lo detuvo.Con el nerviosismo, había olvidado que estaba en Italia, por lo que tuvo que explicar todo lo que había dicho en español, ahora en italiano.La policía le dijo que lo escoltarían, con el compromiso de no volver a manejar de esa forma. Puede que fuera una mujer quien lo detuviera lo que le dio una oportunidad.Al llegar al hospital, lo detuvieron antes de que
*NOTA:Esta novela es ficticia, producto de mi imaginación y lo que esta contiene no tiene relación alguna con la realidad (o lo mejor sí, pero no lo sabemos)Pueden encontrar mis otras novelas, buscándome como Sofía de Orellana.Ahora sí, vamos al capítulo ;)---------------Capítulo 1: DespedidasEl cortejo fúnebre en honor a mi padre nos ha acompañado hasta la entrada del parque. Cuando llega el momento de trasladar el féretro al interior, Marco, mi esposo, y Luca, mi hermano mayor, se posicionan frente de los voluntarios. Los demás son socios y amigos de mi padre.Massimo Cavalcanti era un hombre realmente amado. Fue un empresario exitoso y el mejor de los padres, que llegó a Chile siendo un niño de 10 años, a través de Argentina, y junto a sus progenitores y un hermano menor que murió años después de Tifu