Capítulo 162SantiagoEl acoso de Cynthia no estaba gustándome para nada, ella no tenía escrúpulos y me estaba incomodando demasiado esa necedad que tenía conmigo. Es una persona necia que insiste en que tengamos algo y yo con ella no quiero tener absolutamente nada y decir nada, es nada. Mi pasado con ella no es algo que yo quiera recordar, para nada.–Santiago no te quedes callado, mejor recuerda todo lo bien que tú y yo la hemos pasado juntos y no me vayas a decir que no recuerdas nada. Eso ni tú te lo crees.–Sí, la pasamos bien en su momento, ahora no es tiempo de acordarme de eso y tampoco de pensar en ti. La verdad es que no me interesas ni como amiga, ni mucho menos como mujer.Tenía que dejarle por milésima vez las cosas claras, es una mujer necia e irritante que quiere hacerme caer en su juego y en sus redes y yo no lo iba a permitir de ninguna manera que siguiera molestándome.–Por favor, Santiago ya deja de hacerte tonto y acéptame. El destino nos puso de nuevo en un camin
Capítulo 163SantiagoMi primo cumplió con llevarse a mi hija y con ello me ayudaba a mí a poder irme a solas a ver a Helena. Ya era hora de que mi esposa saliera de su tienda de regalos y era mejor para mí poder ir a hablar con ella y a verla a solas, no tenía caso que mi hija Julieta escuchara lo que yo tenía que hablar con su madre.Todo el trayecto a la tienda de regalos, yo solo podía ir pensando en una cosa, que mi bella hija iba a ser la más afectada porque con todo esto, lo más probable es que ella vaya a tener que separarse de Cynthia, su única amiga y que lo tenga que hacer muy pronto.–Santiago, mi amor, ¿dónde dejaste a Julieta?Helena se sorprendió mucho al verme llegar a mí solo a la tienda de regalos. Ella sabía que siempre que Julieta salía del internado, ella andaba conmigo y que somos inseparables, por ello le cayó de raro que ahora yo me presentara solo ahí en su tienda.–Hola, mi amor. Vine por ti, ojalá que ya estés desocupada. No quiero que estés con conflictos d
Capítulo 164HelenaSantiago y yo pasamos días hablando de las cosas y de idear la mejor manera de tratar con Julieta la situación de Cynthia, lamentablemente volvíamos al punto de inicio que no era buena ninguna forma para tocar ese tema con nuestra hija. Ella se iba a poner a la defensiva, ya que Cynthia es la única amiga que ha podido tener ella en el internado.Me preocupaba la situación de mi hija y lo malo es que no la podíamos sacar del internado Santiago y yo, eso era imposible y por consiguiente no se podía hacer nada al respecto. No podíamos buscar simplemente otra escuela para ella porque por su comportamiento del pasado no la iban a admitir, Ximena se había percatado de la difícil situación que yo estaba pasando.–Siento tanto que la vida siempre ha sido muy difícil para ti, Helena. Eres el vivo ejemplo que la vida no es para nada justa.–No lo es Ximena y no es que me queje de mi vida, lo que sucede es que me duele, que ahora que Julieta se ha estado corrigiendo tenga que
Capítulo 165HelenaCynthia era una mala persona que ahora, con el fin de tener un acercamiento más profundo con Santiago, se iba a valer hasta de las confidencias inocentes que como mejores amigas, Julieta y su hija Cynthia comparten. No sabía ni que podía responderle a ello, esa era la verdad Julieta es mi hija de corazón y por encomienda de mi amiga Karla, pero hasta ahí, biológicamente, yo no le di la vida.Cynthia se agarraba el cabello como queriendo presumir algo ante mí, queriendo intimidarme y minimizarme o lo que era peor, quería reducirme a cero. Ella es una mujer muy bella, con curvas donde debe tenerlas y una cara preciosa y yo tengo lo propio, nada exuberante, pero me gusta mi cuerpo y me gusta quién soy y es todo lo que importa.–Te has quedado callada, Helena. A la mejor porque no tienes nada que decir y es mejor para ti callar que tener que enfrentarte a mí, eso es entendible que no tienes nada con lo que luchar contra mí.–Me quedo callada por la pena que me ocasiona
Capítulo 166SantiagoMi primo Iván y yo, estuvimos ocupados en muchos proyectos de la constructora, esa semana la tuvimos demasiado ocupada y nos estábamos esmerando por sacar todo a la brevedad posible, teníamos un congreso en puerta del que nuestra empresa era sede y todo tenía que estar de manera impecable, lo que no contábamos era con que íbamos a tener muchos imprevistos relacionados con el problema que yo tenía con Cynthia.La obsesión de esa mujer conmigo, no conocía de límites ni tampoco de barreras. Ella me estresaba a un punto inconcebible. Me dolía mucho la cabeza de pensar que esa mujer, pudiera estar envenenando a Julieta a través de su hija, pero yo sentía las cosas tranquilas porque no habíamos sido llamados del internado, ni Helena ni yo.–Primo, ha llegado Clara y no viene muy tranquila que digamos.Mi primo Iván recibió a mi hermana en lo que yo estaba en una llamada con unas personas que nos estaban ayudando con la organización del congreso y claro que mis hermanas
Capítulo 167SantiagoClara estaba enojada y no podía culpar a mi hermana y lo peor es que ella le iba a decir a mamá y también a Elsa, yo eché a perder muchas cosas con mi familia por mi relación con esa mujer con la que jamás debí de relacionarme. Cynthia había sido, por mucho, un error de esos que no debía repetirse jamás y aunque mucho tiempo lamenté no estar con ella, ahora le daba gracias a la vida por habérmela quitado del camino.–Clara, no te preocupes por nada, hermana. Sabes que yo no voy a recaer con Cynthia, ella me destruyó la vida y no es justo que me hiciera eso y no dejaré lo que tengo con Helena, por esa loca de Cynthia.–Eso lo sé Santiago, lo que me preocupa es que esa mujer vaya a hacerle algo a Julieta. Ya no creo que sea seguro que Julieta siga en ese internado y ha llegado el momento, como ha dicho mi cuñada Helena, que hablen tú y ella con Julieta.–Tiene razón Clara, primo. No pueden dejar que la hija de Cynthia sea envenenada por ella y ahora que se ha queda
Capítulo 168HelenaJulieta salió ese fin de semana del internado y Santiago y yo fuimos por nuestra hija, teníamos que esperar la oportunidad idónea para que ella estuviera un poco receptiva y que nosotros pudiéramos hablar con ella, era necesario alertarla de las cosas y más que eso de todo lo concerniente a su amiga Cynthia.Me daba un poco de pesar con mi pobre hija, ella apenas estaba teniendo a la primera amiga en toda su corta vida y para ella esto que teníamos que hablar con ella Santiago y yo, iba a suponer el fin del mundo como lo puede ser muchas cosas a su edad de adolescente.–Hola hija, te ves muy linda mi princesa. Tu mamá y yo, queremos pasar este día en la playa contigo.–Hola, que bueno que han venido los dos. Quisiera que me permitan ir a comer con Cynthia o podemos nosotros invitarla a ella, ya le he dicho que como familia vamos a veces a la playa y ella quiere venir.Julieta nos cambió la jugada de inmediato y yo nunca pensé que eso pudiera ser. Ella quería por su
Capítulo 169SantiagoHelena prácticamente no me había dejado opción y tuve que dar mi brazo a torcer, Julieta quería llevar a su amiga a comer y bien era cierto que Helena y yo se lo habíamos prometido y ahora nos tocaba cumplir porque si no lo hacíamos las consecuencias las íbamos a pagar después, con los reclamos de nuestra hija y nos sería más difícil el poder hablar con ella del tema de Cynthia.Julieta es una muchacha muy receptiva e inteligente y ella sabe y siempre ha sabido que Helena y yo, siempre le hemos enseñado a cumplir con su palabra y ahora nos tocaba cumplirle a nosotros.–Julieta, mi princesa ven un momento por favor.Llamé educadamente a mi hija y ella se quedó mirándome con mucha atención y al pensar un poco las cosas hizo lo que le pedí y se acercó a mí.–Dime, papá. Sé que me dirás que no puedo llevar a Cynthia y no me parece justo, tú y mi mamá me habían dado su palabra y luego se están arrepintiendo.–No mi amor, no es así. Tu papá lo que quiere decirte es que